Hermanos amados

Capitulo 2

Me quede en el sofá unos minutos a que Elías bajara a desayunar, pues le cocine su platillo favorito que le da más energías.
-¿flaquita que haces despierta? -pregunta Elías tomando mis hombros con cariño.
-estaba esperando que bajaras para que desayunes.
-ay que linda eres la mejor -dice colocando su cabeza entre mis hombros, sentí tan lindo que rasque su cabeza con ternura.
Pasó el rato y era hora que mi amado hermano se fuera a trabajar, suele llegar a las 2pm por eso no me preocupa tanto.
-bueno tengo que irme -dice tomando mi mano, te voy a extrañar.
-si ten cuidado. -lo abrazo fuerte poniendo mi cabeza en su firme pecho.
-te quiero -susurra en mi oído algo que sin duda me encanto tanto.
-también te quiero cariño.
-adiós.
-¿y mi beso? -preguntó mostrando mis labios.
-a si.
Algo que no me convenció fue su beso, es decir, me dio en mi mejilla cuando eh intentado llamar su atención pero parece que no va bien.
-me darías otro -dije mimada.
-todos los que gustes.
-pero.. -postró mis labios para poder sentir sus cálidos labios por una vez en mi.
-sería una locura.
-por favor -mencionó acercando mi boca más a él.
-pero... Somos hermanos.
-no tiene nada de malo.
-vale.
Sentía una adrenalina increíble brotar en mi, sin más los labios de Elías fueron acercándose más y más a mí hasta que por fin se juntaron en un beso perfecto y lleno de pasión, lo mejor era que sentía los labios de mi hermano no querer separarse de mi boca algo que no iba a dejar, moví mi boca abriéndola un poco al mismo tiempo mis manos las pase a su rostro saboreando más a fondo sus besos exquisitos.
-Elisa... -trata de decir algo pero mis labios los impiden.
-no hables.. -beso más a fondo -bésame Elías.
Las manos de Elías pasaron a mi cadera haciendo que me pusiera más nerviosa, mis manos las pase a su cuello sintiendo el beso más profundo al mismo tiempo un gemido de placer salió de mi hermano.
-debo irme querida -agrega Elías entre los besos.
-lo se bebe. Vete o no llegaras -dije separando mis labios de su boca que podía saborear a menta.
Al separarnos note a Elías algo nervioso y ruborizado, yo solo puse mi cara algo nerviosa saber cuál sería su respuesta, digo si él no siente nada por mí, es lógico que diga algo fuera de lo normal.
-valla.. Eso fue.. Intenso
-me deje llevar.
-no, de echo... me gusto. Mejor que sea así nuestros besos.
-¿mande? -dije sorprendida.
-te tengo que irme.
No pude entender eso último ¿a que se refirió?.
-te veo pronto -cuando dijo eso último acerco de nuevo sus labios dándome un beso rápido que el tronar sus labios en mi fueron simplemente perfectos.
-¡te amo! -grite
-¡y yo a ti!
Al cerrar la puerta deje caer mi cuerpo en el sofá sintiendo la victoria más cerca, podía sentir mis labios con sabor a menta, mojaba una y otra vez imaginando el beso que fue maravilloso , sin más decidí hacer mis cosas para que cuando venga Elías este todo listo.
Narra Elías.
Valla ese beso que me dio mi hermana fue algo que me sorprendió bastante, más por qué yo volví a darle un beso más, no senti nada malo besarla de esa manera incluso me gusto bastante, digo, es mi hermana la persona que menos daño me aria siempre puedo confiar en ella sería lindo poder llevar esa hermandad más allá de lo prohibido sería feliz por qué sé que jamás volveré a sufrir encontrando la felicidad que siempre busque.
Me estuve cuestionado todo el tiempo ¿y si solo me dio ese beso por qué me ama? ¿Seré yo el exagerado? Sentí diferente ¿qué es esto que siente mi pecho? ¿La atracción? ¿Por mi hermana? Demonios debo saber si realmente es lo que creo que es, o solo es mi imaginación pensar que Elisa lleve eso a un límite diferente.
Antes de llegar al trabajo pase a una cafetería que me gusta mucho por la forma que atienden. Al llegar me senté frotando mis manos por el frío que hacía, solo me quite los guantes y espere con ansias mi café caliente.
-hola hermoso -siento unas manos cálidas en mis hombros.
Al mirar vi que era Karol una chica hermosa que llevo conociéndola tiempo en el trabajo, también por eso me gusta venir a este lugar para poder verla más, es súper bella rubia de ojos grises, sus labios carnosos y rosados, esa mirada profunda que pone cuando me ve, ese cuerpo hermoso sensual que tiene, esa cadera Dios ese trasero sus pechos todo es perfecto en ella, si me caso con Karol, más como me trata es súper linda siento que también le gusto, el único detalle es que ella es más grande que yo me dobla la edad tiene 30 años.
-hola Karol no te vi -dije tomando sus manos con cariño.
-¿qué haces tan temprano aquí? -pregunta pasando sus manos a mi cuello rodeándolo
-pues quise venir por un café, y de paso verte.
-ay qué lindo -pasa su cuello a mis hombros a lo que acaricie con cariño.
-mejor ve a trabajar o te regañaran.
-primero déjame atenderte cariño.
-oh es verdad.
Fue lindo ver a Karol de nuevo, después de eso termine mi café pagan irme a trabajar sin antes de despedirme.
-adiós Karol, otro día te veo.
-adiós cariño te quiero.
-y yo a ti.
Karol me dio un abrazo fuerte sintiendo su calor pasarse a mí algo que me encanto mucho.
Después de eso me fui a mi trabajo algo nervioso por lo que pase al rato con mi hermana.