Capitulo 8

333 10 0
                                    

Abrí mi ajos cansados lentamente para fijar mi mirada en Elías que estaba en un profundo sueño algo que vi súper lindo fue verlo descansar teniendo su mano sobre la espalda de la niña que dormía tranquilamente escuchando sus respiros normales.
-mi amor -susurro colocando mi mano en su pelo suave.
-dime... -habla con dulzura con voz dormida.
-buenos días mi amor
-buenos días corazón -sonríe al verme. Quería verte ya amor
-y yo a ti.
Le di un beso de buenos días en sus labios suaves sintiendo como mi corazón latía tan rápido más por qué es un riesgo, un riesgo romántico perfecto que dos hermanos muestren su amor.
-la niña -habla Elías entre los besos lentos que le daba escuchando nuestros labios tronar.
-bésame.
-eso me encanta -siento sus besos más apasionados llenos de fuego algo que sin duda me encanta.
En un parpadeo separe mis labios de los de Elías para fijarnos en bebe.
-deberíamos despertarla, ¿qué hora es? -pregunta Elías en un bostezo largo.
-las 8 amor.
Elías comenzó a mover a la niña despacio sin asustarla.
-oye -susurra -despierta.. -la mueve lentamente -niña.. Oye..
Fue tan rápido que en que momento la niña abrió sus ojos tan rápido, al vernos su expresión dijo otra cosa.
-ah.!!! Quienes son!!
-Eh.. Calma -trata de Elías tranquilizarla.
-oye oye.. Tranquila -trato de agarrarla.
-no!! Déjame!! Ayuda!!
-eh!!
Elías le tapo la boca para que así no pudiera gritar más o tendremos problemas serios.
-basta ya.. -habla Elías tapándole la boca. -si no te callas no podremos ayudarte.. Ahora mueve la cabeza si no aras ruido.
-mmm.. -dice que si la niña asustada con sus ojos cristalizados.
-bien.. Te quitaré la mano, no te aremos daños solo queremos ayudarte.
Elías fue quitándole la mano de su boca lentamente hasta ver que no ara más ruido para así comenzar las preguntas.
-te are unas preguntas solo queremos saber de ti.
-¿qué..? ¿Qué quieren?... ¿Donde estoy? ¿Qué me aran?
-oye oye.. -la toma Elías de sus brazos. Dije que yo are las preguntas después tu me aras a mi las preguntas que quieras.
-s-si..
-bien. ¿Cómo te llamas?
-Elena... -contesta la niña con miedo.
-Elena, qué edad tienes?
-cu-cuatro...
-eres una bebe aún. ¿Quién era esa mujer que trajo aquí?
-era.. Era.. Mamá.. Me estaba salvando.
-¿de quién?
-papa..
-¿tu padre quería matarlos?
-no sé bien qué pasó..
-llegaste aquí dormida, tú mamá te entrego en plena madrugada sin decirnos bien que pasó.
-no sé nada.. Por favor no me hagan nada.. -dice la niña en tono de llorar asustada.
-calma -dije tratando de calmarla. -mira tu madre te trajo aquí que te cuidáramos, por qué alguien quería matarte.
-eso sí.. Solo recuerdo antes de que me dio sueño..
-debiste perder la conciencia. -agrega Elías preocupado.
-no sé que quieren de mí..
-solo queremos saber por qué te querían matar.
-esta loco.. Papa está loco. -dice la niña tras eso comenzó a llorar de la desesperación.
-no llores -hable abrazándola para calmarla.
-no me dejen con el, ni con mamá son malas personas. -llora profundo la niña
Esto era difícil para todos, no quería dejar esta niña con esas malas personas pero, ¿que podíamos hacer?
-amor, ¿qué hacemos? -pregunté asustada sin saber qué hacer.
-no se mi amor. -mira la niña que me abrazaba fuerte llorando.
-hablemos con mamá ella dirá.
Estuve calmando a Elena para poder bajar y ver que podíamos hacer. Elena estuvo mejor eso hizo que bajáramos, vimos a mamá que hablaba con alguien por teléfono muy nerviosa.
-mama. -habla Elías
-luego hablamos -cuelga mamá. -dime corazón.
-ay algo que debemos hacer.
-ah. Hola pequeña. -mama pone sus manos en su piernas sonriendo fijando sus ojos en la pequeña Elena que se escondía en mis pies.
-¿quién es ella? -pregunta Elena asustada.
-ella es mama.
-no es mi mama.
-no pero es la mía, es muy buena.
-ven mi amor. -estira las manos mama para recibirla.
-no.. -jala mi pantalón -dile que no. -pone cara triste en señal de desconfianza.
-no te asustes pequeña. -habla Elías tomando su manita delicada.
-tranquila no te aremos daño -habla mama en tono dulce.
-me.. ¿Me cuidas? -habla Elena en tono mimado mirando a Elías.
-si mi pequeña.
-quiero ser tu pequeña menos de ella.
-¿quién ella?
-la que me trajo -talla sus ojos controlando el llanto.
-no, no te asustes no vendrá más. -afirma Elías -ahora saluda a mama.
-no soy tu mamá pero podemos ayudarte.
-¿como? -pregunta la pequeña Elena.
-podemos buscarte una casa donde te cuiden bien.
-no.. -llora asustada. -dile que no.. -jala el brazo de Elías pidiendo que la cuidara, a lo que no podía y quería llorar en ese rato.
-tranquila.
-quiero estar aquí con ustedes. -me señala y a Elías.
-fueron los que me ayudaron.
-pero..
-déjenme aquí
-¿mama? -pregunta Elías.
-supongo.. -pone sus manos en su cadera. -puede estar aquí mientras pienso en algo -talla su rostro perdiendo la esperanza sin ver una salida.
-déjame cuidarla -hable poniendo mis manos en los hombros de la pequeña Elena.
-cielo.. -habla Elías en desacuerdo.
-lo aremos nosotros dos.
-¿vas en serio?
-si -afirme mirándolo sería pidiéndole a gritos que no me dejara hacer esto sola.
-bien. Hagámoslo.
Una sonrisa se me puso en mi rostro al escuchar eso de saber que Elías siempre me apoyara.
-debo trabajar hijos.
-si mami -hable feliz cargando a Elena en mis brazos.
-¿podrán cuidarla?
-de eso me encargo yo -asegura Elías mirándome con si sonrisa
-¿no irás a trabajar?
-no mama, me quedo hoy.
-si hijo solo pórtense bien
-seguro.
-adiós mi amores los amo -se despide mama de nosotros con un beso a cada uno
-te amo mami -hable mimada
-te amo mami -habla Elías dándole un abrazo.
-también yo los amos hijos. -mira a Elena que estaba en mis brazos -adiós cosita hermosa.
-mm.. -esconde su rostro en mi pecho para volver a mirar a mama -a-adiós.
-Aww que hermosa nena.
mama salió de la casa dejándonos solos, viendo el dinero en la mesa para que compráramos algo y siempre nos dejaba comida lista.
-bueno a desayunar, y luego comprar algo de comer -propone Elías
-si amor -dije para dejar a Elena en el piso y poder abrazar a Elías colocándola brazos en su cuello mirándolo fijamente mostrando mi sensualidad y esa sonrisa que tanto ama ver.
-sabes que me encantas -hable en tono seductor.
-y tu a mí me fascinas -habla en tono seductor
-bésame.
-claro.
Elías comenzó a besarme lentamente sintiendo sus besos húmedos en mi boca. Entre los besos que nos dábamos sentí a Elena caminar hasta a mí a lo que baje mi mano derecha sin dejar de besar la boca de Elías pegando el cuerpo de la pequeña a mí acariciando su rostro suave mientras sus manitas las colocaba en mis pies y su cabeza, sintiendo una ternura imaginándome por fin mi familia.
-te amo -hable separando mis labios de los de Elías.
-también te amo.
-ah.. -siento a Elena jalar mi pantalón
-dime corazón -hable bajando hasta la altura de Elena.
-¿son mama y papa?
Elías y yo soltamos una risa tras su comentario más yo ya que me puse nerviosa sin pensar la consecuencia que nos vio besarnos.
-bueno -se hinca Elías -no somos mama y papa por qué no tenemos hijo.
-ah.. -baja la mirada Elena
-amor -toco su mano en desacuerdo.
-pero... -toca su pelo.
-lo que papa quiere decir es que. ¿No quieres que te compremos algo? --agregué tratando de ponerla feliz.
-si.. -mueve su cabeza algo mejor.
-pues vamos mi niña.
-chi..

Hermanos amadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora