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~Recuerdos de Blend~

Todo pasó muy rápido, ese día al llegar al pueblo después de cortar madera.

—Ella es la nueva integrante del equipo. –dijo el dueño de la cabaña.

—Oh Blend que bueno que llegaste, prepara la cena después que dejes los maderos.

—Esta bien –respondí.

Happy Shoot es un pequeño albergue que le da una mano a aquellas personas que alguna vez lo perdieron todo.

Cuando tenía 8 años, fuí adoptado por un comandante muy importante de uno de los clanes más fuertes del mundo, Shoot Star y él fue quien fundó este lugar.

—¿Hey Blend que harás para la cena?

—Bueno... pues...

—¡Me gustaría pescado frito! –dijo uno de los chicos del grupo.

Pero no hay suficiente para todos... Y si divido los que nos quedan entonces yo...

—¡Bueno, lo dejo en tus manos!

Yo soy así, nunca tengo el valor de decir lo que pienso.

Al final todos terminaron comiendo su cena.

Me refugié en la cocina mientras todos comían. Me alegra que haya alcanzado suficiente y esta bien...  un día sin comer no me matará, así que a limpiar y disfrutar.

—Disculpen... ¿quien preparó esto? –escuché desde la sala.

Es una voz muy suave y dulce, un momento ¿es una chica? ¿Que hace una chica aquí? Ahora que recuerdo cuando recogía maderos todos estaban rodeando a alguien.

—Lo hizo Blend, es el cocinero de la casa –dijo uno de los chicos

—¿Y en donde esta? ¿Él... no va a comer con nosotros?

Ehh..

De alguna manera mi corazón palpitó de alegría... nunca antes nadie se había preocupado por mí.

Desde niño siempre fui el asistente del comandante de Shoot Star, siempre llevaba sus armas y tomaba apuntes de sus deberes y cuando se va de expediciones me deja aquí como ayudante, no soy necesario ni importante, ¡¿Porque alguien a quien no conozco se preocupa por mi?!


—¡Te encontré!

—Ehh...

Me tomó desprevenido. Mi corazón comenzó a latir con mucha fuerza, el color celeste de sus ojos eran tan deslumbrantes, su piel tan clara y su cabello naranja era tan liso que por acción de las pequeñas brisas se movía inocente embelleciendo sus delicadas curvas de su cuerpo...

—Hola, ¿estas bien? –dijo la chica mientras estaba paralizado.

—E..e...est...yo...emm....e..

—Señor cocinero, su comida esta muy deliciosa ¿quisiera comer con nosotros?

Ha... si con verla era demasiado impactante, su sonrisa la hacía tan bella como una diosa...

Legión-INDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora