Gotham Academy - A Damian Wayne's Story

Kara

Kara

- Así que Dami ¿finalmente has enviado las muestras para entrar al concurso? - pregunto la animada rubia que ocupada el asiento de copiloto en la camioneta que Jasón conducía.

Damián no pudo evitar lanzarle una mirada furibunda a su hermano mayor, no es que el asunto del concurso fuese un secreto, pero tampoco le gustaba andar por allí divulgando sus asuntos a todos.

- Lo siento enano, pero es mi novia y conoce formas de hacerme hablar...formas muy agradables. - contesto Jasón con un doble sentido bastante evidente.

- Eres un fácil Jasón. - fue la respuesta del menor que provoco las risas de todos los ocupantes.

Las vacaciones de verano finalmente habían llegado y con ellas la fecha límite de entrega para el concurso y el inminente campamento junto a los Kent. Era una especie de tradición entre ambas familias, todos los años pasaban dos semanas de campamento a las orillas de un enorme lago en la reserva natural de Metrópolis conviviendo y pasando tiempo juntos. Durante los primeros años de su vida eran Bruce y Clark quienes se hacían cargo de dicha actividad en la cual estaban incluidos por supuesto los cuatro Wayne y los tres Kent.

Fue en uno de esos campamentos donde la rubia se confesó a Jasón y Clark los descubrió besándose tras las casas de campaña, aunque si Damián era sincero más que besarse parecía que Kara trataba de violar a su hermano, después de eso, y a pesar de que se convirtieron en novios con todas las letras, Clark no los dejaba a solas cuando iban a la granja, quizás el padre de Jon no temía por la integridad de su prima tanto como temía por la de Jasón.

La idea le causo una mueca de diversión a Damián que no pasó desapercibida por sus amigos; conforme las ocupaciones de los respectivos cabeza de familia crecieron, Dick, Jasón y Kara se convirtieron en los líderes de dichos campamentos haciéndose cargo de los más pequeños y asegurándose de que sin importar nada esa tradición no desapareciera.

Por desgracia ese año en particular Dick estaba demasiado ocupado con el ingreso a la academia del FBI y tanto Conner como Tim habían alegado prometer a Ra's pasar el verano con él en la isla y se habían librado del campamento; por lo que en un arranque de "genialidad" por parte de Richard, invito a Maya y Colín asegurándose de ir el mismo a convencer a sus respectivos tutores, razón por la cual ahora Damián se encontraba encerrado en aquella camioneta con ellos, además de Jasón, Kara y Jon.

- Vamos Dami bebe, deberías estar feliz, en lugar del gruñón de Tim tienes a tus amigos aquí contigo, seguro que este será un año verdaderamente divertido. - intento animar Kara, ella sabía al igual que todos lo frustrante que podía ser la relación de los Wayne menores y en el fondo agradecía poder pasar un verano sin tener que preocuparse porque se mataran entre ellos.

- Y no solo eso Kara. - añadió Jon con una sonrisa que no deparaba nada bueno. - Dami no solo está de buen humor por el campamento sin Tim.

- ¿Ah no? - pregunto la rubia interesada. - ¿Acaso hay algo más?

- Por supuesto que lo hay. - añadió divertida Maya.

- Cállense todos. - gruño Damián perfectamente consciente de a donde querían llegar.

- ¿Pero porque Damián? - pregunto Colín intentando aparentar una inocencia que no tenía. - ¿Acaso no quieres que Jasón y Kara se enteren que no has parado de intercambiar mensajes y llamadas con una chica?

- ¿Una chica? ¿En serio? - grito emocionada Kara al mismo tiempo que Jasón daba un giro brusco a la camioneta para orillarse en la carretera y frenar sin cuidado antes de casi saltar sobre el asiento a ver directamente a su hermano menor.

- ¿Es eso cierto demonio? ¿Finalmente te has interesado en una chica? - el brillo travieso en la cara de Jasón le provoco un sudor frio a todos los presentes, estaba planeando algo verdaderamente malo y lo sabían.

- Cariño. - llamo Kara un tanto preocupada al notar como su novio arrancaba de nuevo el vehículo y echaba llave a todas las puertas. - ¿Está todo bien?

- Por supuesto amor, todo está bien. - la sonrisa del aludido había pasado de burlona a casi maniática mientras subía las ventanas. - Es solo que considerando las circunstancias...

- ¿Las circunstancias? - Kara estaba preocupada, cuando el joven se ponía así nadie podía detenerlo, ni siquiera ella.

- Así es, las circunstancias y dado que todos los presentes están en la edad que sus hormonas los controlan. - Jasón echo un vistazo por el retrovisor a los más jóvenes. - Creo que es mi deber civil como hermano mayor y ciudadano responsable darles a todos los presentes la charla.

El silencio se instaló en la camioneta de forma sepulcral, nadie se esperaba eso y el sudor comenzó a correr por la frente de todos los presentes, ni siquiera Kara se salvó de ello pues conocía lo grafico que Jasón podía ser con esos temas y no le apetecía discutirlos fuera de la habitación y menos rodeada de chiquillos, Jon por su parte se arrepentía de haber causado semejante lio y Colín comenzó a temblar cual gelatina ante la idea, Maya seguía estupefacta y Damián ya había comenzado a rabiar en un vano intento de abrir las ventanas y lanzarse a la carretera.

- Sujeten los cinturones chicos, aún nos quedan dos horas de viaje. - comento Jasón con una sonrisa aún más amplia. - Serán más que suficientes para instruirlos adecuadamente en el tema.

Kara no pudo evitar lanzar una carcajada también, iban a ser dos horas muy largas e incomodas, pero con todo y eso no podía negar que en verdad estaba enamorada del lunático que tenía por novio.