Después de años de opulencia, la austeridad llama a la puerta de Edu, un chico de buena família, buena escuela y buenos amigos. El replanteamiento de su vida empieza en una playa de aguas profundas y peñascos, con las notas de una guitarra ajena cau...
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Cuando buscas hermosura en el diccionario:
Aunque exista gente con ojos similares no es el caso del modelo en questión, siempre se los retocó.
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Edu se acostó cuando un sol alto ya entraba por la ventana. Se cubrió hasta arriba con la sabana y no se tardó en dormir. Aquella mañana Edu soñó con Clara. Estaban tumbados sobre arena blanca y él le acariciaba los cabellos dorados, meciéndolos entre sus dedos. Era Ibiza el verano pasado, donde se besaron por primera vez. De repente, con la naturalidad propia de los sueños, sus hebras se tornaron negras como el carbón y la arena mutó en un gris opaco. Clara, o quién fuera esa persona, abrió los ojos y Edu contempló el atardecer en sus pupilas. Siguió acariciándole los cabellos mientras una voz grave tatareaba una canción.
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- ¿Qué? Esta noche voy a un concierto.
- Desde que hemos llegado no hemos hecho absolutamente nada en familia. No te morirás por no salir un día. Además tengo una buena noticia.-dijo mientras seguía pasando las páginas distraída.
- ¿Nos quedamos aquí a vivir?-dijo con socarroneria. Su madre le miró extrañada.
- No te sigo. ¿Es ironía?
- No. Ojalá.
- Pensaba que lo odiabas.- dijo volviendo la vista al papel.
- Supongo que le he encontrado el punto.
- Ya te lo dije. No entiendo a que venía tanto drama.
- No se mama...Ahora lo pienso y parece una tonteria pero... Me jode todo esto. La empresa de papá, el cambio de escuela...
- No te anticipes, sobre eso os quiero hablar.- su madre sonrió traviesa y dió por zanjada la conversa.
En otros momentos Edu hubiera insistido hasta descubrir el misterio. ¿Una nueva inversión? ¿Un ascenso? Lo dudaba teniendo en cuenta la ocupación de su madre. Pese a eso, en esos momentos a Edu le importó más bien poco. Estaba centrado en esa noche. Se iba a perder el concierto de Ona en acústico con Pere. Pol estaría allí. Todos estarían de hecho. Todo por ir a una estúpida cena en Cadaqués. Llamó a Ona.
- Ona...hola, sí. No podré ir a tu concierto esta noche.- dijo entre suspiros.- Mi familia y yo vamos a Cadaqués. Sí ya se que es bonito, pero joder ¿tenía que ser hoy? - Edu rió- Sí, me debes uno ahora. Mucha mierda, eh. Nos vemos.
- ¿Ona es tu novia?- dijo Marina, rondando por la casa con un vestido de gasa blanca. Edu no pudo evitar soltar una carcajada. Su ropa tenía cierto aire ibicenco que le hizo recordar su sueño. Había sido algo confuso y pese a estar seguro en ese momento, Edu dudaba que realmente fuera Clara la persona de sus sueños.