27.-No podemos crecer sin volver a empezar

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Siempre he estado cerca de la muerte. Desde que era pequeño me sentía más cómodo con los muertos que con los vivos, y con el tiempo aprendí a no darle importancia. ¿Cómo se siente ser un espíritu? A pesar de que hablaba con ellos, de que podía hacer que vinieran a mí, nunca me lo pregunte.

¿Un espíritu tiene pensamientos? Si, seguro que sí. También recuerdos. No estoy seguro de que puedo recordar. No siento nada de mi cuerpo, ni puedo hablar, lo cual tiene sentido porque los espíritus tampoco pueden hacerlo.

¿Así es como se siente ser un espíritu?

No debe ser normal sentir que huele demasiado a flores, ni que parezca que corre el aire. Algo sólido se materializa ¿abajo? ¿Acaso estoy acostado sobre algo? eso no debe ser normal. Me muevo.... Ah, esa fue mi mano. Al moverla, es como si mi brazo se formara por primera vez, le siento, frio, e inmóvil. Algo más se mueve, y la luz me impide ver más.

¿Dónde estoy? Aun con el dolor que me causa la luz, abro los ojos. ¿No morí? Ah, casi es una decepción. Un gemido sale de mi garganta. Estoy en una habitación blanca, parecida a la de los hospitales, pero no hay nada de lo que pudieras encontrar en un hospital. Una ventana esta sobre mi cabeza.

— Hadrien— muevo la cabeza. Han está ahí, de pie, mirándome con alegría. Tanta que parece que va a arrojarse sobre mí. No lo hace, y lo agradezco, porque ahora que de algún modo vuelvo a estar vivo, el dolor regresa— ¿estás bien? ¿Me recuerdas? ¿Sabes que paso?— habla tan rápido que me cuesta seguir la coherencia de lo que dice.

— Han...— mi voz suena horrible. Me duele hablar también. ¿Qué rayos fue lo que hizo Viktor?

— ah, ¡Kiran! ¡Kiran!— Hanley sale corriendo. Cierro los ojos. Recuerdo lo que paso, sí. Kiran tuvo una pelea con Viktor, y él me quiso matar. ¿Me mato? No sé si morí, pero sentí que sí. Obviamente no estoy muerto, lo cual es un alivio y no por el dolor.

Escucho de nuevo los pasos rápidos sobre el piso, acompañados esta vez por unos más pesados.

— ¿Estás seguro?— esa es la voz de Kiran. Estoy con Kiran. Siento que mi cuerpo se volvió una masa gelatinosa solo de escuchar su voz.

— sí, estaba... oh, quizá volvió a dormirse— abro los ojos lentamente. Kiran y Hanley están hablando. Les miro unos momentos, sintiéndome aliviado al verles. Sabía que Kiran no iba a dejar a Han. El brazo de Han se ve bien, que este vivo significa que ya no tiene esa maldición. Mi atención se centra en Kiran. No parece tener heridas, y vaya que veo mucho, pues trae puesta una camisa sin mangas.

— Si me hubieran dicho que vería esto... hubiera despertado antes— consigo hablar lo más claro que puedo. Kiran se gira hacia mí, su rostro pintado de alivio, murmura algo ¿quizá una plegaria?

— Estás vivo...— dice.

— Me siento más muerto— me quiero sentar, pero Kiran no me lo permite. De cualquier modo, no creo que pueda hacerlo por mi cuenta.

— tómalo con calma. Y por una vez en tu vida haz lo que te dicen— sonrió, decidiendo que por el momento me siento mejor como estoy.

— ¿Qué paso?

— descansa, acabas de...— Kiran calla cuando le miro de la mala manera— ah, bien— su mano se coloca en mi frente, mientras la otra toca una de mis muñecas y luego se cierra alrededor de ella.

— ¿Y?— pregunto cuando no dice nada.

— ¿no prefieres esperar?

— No— Kiran suspira.

Crónicas de un villanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora