18. Convivencia

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—Aún no puedo creerlo.

—Jamás creí que lo decía en serio — comentó Patrick viendo a Frank recostado en su cama.

—Y-yo... les dije — habló Frank entrecortado —. Y no quisieron escuchar... ¿POR QUÉ NUNCA ME ESCUCHAN?

—Ya Anthony , tranquilo — le dijo Ray—. No era nuestra intención... de verdad, no queríamos que te refriaras ni nada ¿y sabes por qué?

—¿Por qué?

—¡Porque eres una criatura salida del infierno cuando te enfermas!

Frank formó un puchero y ahogó un sollozo, eso hizo que Ray se sintiera culpable, pero al menos el de afro se había desahogado.

—Lo siento — Ray se sentó en la cama al lado de Frank —. En serio lo siento...

—Está bien — asintió y luego se sorbió la nariz —. Pero promete que ya no jugaremos con agua en el parque... y si lo hacemos, al menos, lleva el automóvil para volver a casa.

—Bueno sí, tal vez fue eso lo que te enfermó. Caminamos con ropa mojada.

—Al menos estuvo divertido — mencionó Patrick.

—Patrick — le dijo Ray —. Ahórrate tus comentarios.

—¡No puedo! ¿te das cuenta de que le estás pidiendo que se calle al personaje más querido de este fanfic?

—¿Qué?

—Olvídalo.

—Cállense ambos — pidió Frank tratando de incorporarse —. ¿Quién me prepara una sopita?

Frank tenía los cachetes rojos a causa de la fiebre, el cabello despeinado y estaba con una pijama de El hombre araña.

Te toca, Patrick — Ray se volteó al rubio.

—¿Y yo por qué?

—Porque yo ya le di su jarabe y además le puse una toallita para la fiebre.

—Bien, ya — rodó los ojos —. Por cierto ¿No debes ir a trabajar?

—Uy... sí... ¿te quedas a cuidarlo?

—Lo siento pero no puedo... tengo cosas que hacer.

Ray soltó un gran suspiró, se puso de pie y salió con Patrick para hablar en el pasillo.

—Por favor, Patrick. Cuídalo — le pidió Ray removiéndose el cabello.

—No puedo, te dije que tengo cosas importantes que hacer... si pudiera me quedaría aquí viendo Star Trek todo el día.

En ese instante, se escuchó el sonido del timbre. Patrick se encargó de abrir la puerta y para su sorpresa se trataba de Gerard.

—Hola Patrick — le sonrió el pelirrojo —. ¿Está Frank? Me dijo que...

—¡Sí! — exclamó Patrick sujetando a Gerard del brazo para conducirlo a la habitación de Frank —. Ven pasa.

En el pasillo se encontraron con Ray.

—¿Qué haces aquí? — le preguntó Ray.

—Frank me mandó un mensaje y vine a verlo porque creo que está mal.

—¿Y tú cómo sabes que está mal?

—Se le olvidó poner un punto al final del mensaje.

—Como sea — interrumpió Patrick —.  ¿puedes quedarte a cuidarlo? Está enfermo e insoportable.

El teorema del amor [Frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora