1. SÓLO TÚ [XiuHan|LuMin] - FINALIZADO

14 - Lo que somos

—Baozi ¿Por qué tenemos que vernos aquí?

Lu Han juega con la pata de una mesa aburrido. Minseok llevaba ¿Qué? ¿Cuánto? Alrededor de 15 minutos ignorándolo mientras veía lo que fuese en su celular.

Lu Han le sopla en el cuello intentando capturar su atención inútilmente, mira por encima del hombro hasta el móvil volviendo su vista al rostro de Minseok resignándose a descansar la cabeza sobre la mesa.

—Baoziii —Le zamarrea un brazo. —Baoziii, vayamos a mi casaaa —Minseok le saca la mano de encima. —¿¿Por qué me ignoras?? —Se irrita.

—No te ignoro.

—Entonces ¿Por qué tenemos que vernos aquí? ¡Vayamos a mi casa!

—No.

—¡¿Por queeeeé?!

Minseok lo fulmina. —Porque tú sólo me quieres violar.

Las mejillas de Lu Han se incendian. Minseok se limita a prestar nuevamente la atención al teléfono y al cappuccino sobre la mesa de la cafetería.

—¡No es para tanto! —Dice Lu Han para sí.

Minseok llevaba escapando de él durante toda la semana, Lu Han hubiese estado de muerte sino fuese hasta gracioso. Y es que el mayor tenía miedo que lo agarrara a besos en cualquier momento, delante de la gente, en la universidad o en cualquier lugar, porque que se hiciera el tonto era otra cosa, pues no necesitaba tener más de dos dedos de frente para percatarse de cómo Lu Han lo miraba fijamente... casi al punto de sentirse un poquito, un poquitito, ACOSADO.

—Ven, sígueme... —Lu Han lo agarra de la muñeca arrastrándolo junto a él.

Minseok choca contra la puerta del baño que Lu Han cierra tras él.

—Luge, nos van a ver...

—Nadie viene al baño de la cafetería, Baozi. —Dice, más bien le ronronea sobre un oído.

Aunque era cierto que esos baños eran más desérticos que biblioteca a principio de año, el miedo a que los encontrasen no se lo quitaba nadie.

—Lulu... —Pero Minseok no es capaz de decir algo más cuando Lu Han le toma el rostro con ambas manos y lo besa. Lo besa apretándolo contra la puerta para que no tuviese escapatoria.

Minseok no lucha. De hecho, se siente patético porque entre tanto "no, no, no" su corazón sólo grita "¡sí, más, más!".

Su sabor le explota dentro de la boca. Siente cómo las piernas le comienzan a hormiguear. Lu Han se separa tirándole el labio inferior viéndole con esos ojitos de lujuria que a veces colocaba y no se daba cuenta.

Lu Han, frente a él, se veía exquisito. Sus labios brillaban a causa de la saliva y un rubor leve le crecía en los pómulos.

—Baoziii, me estás volviendo loco...

Lu Han a veces decía cosas sacadas de películas o libros, porque la gente común no se decía eso. O quizá sí, pero no al principio, si no que al tiempo, con un poco de vergüenza y no tanto descaro como él.

Minseok aún se sentía inseguro respecto a todo, aún con nervios levanta su mano y acuna la mejilla de Lu Han cuestionándose mil veces si estaba bien o no. Minseok no sabía que todo lo que hacía, Lu Han lo venerada. Hasta un suspiro para el chino era majestuoso.