Mi idiota (EUN#2)

¡Jesús Dios mío santo!

—Jace y tú no fueron los únicos al notar que Kendall es misteriosa. Es decir, ella a veces me agrada pero otras veces pienso que es muy extraña... ¿no lo creen?— preguntó Ashley

—Concuerdo contigo... ya pasó mucho tiempo y todavía no veo su arrepentimiento al haber rechazado a Austin Miller— dijo Austin— algo anda mal con ella.— negó   

 No puedo creer que todavía siga con la misma tontería.

—Ya pasó mucho tiempo y aún no veo tu superamiento al haber sido rechazado por Kendall Leduc.— dije— es tiempo, hermano... las cosas se superan, ya hazlo por el amor de Dios.

 Me miró mal— ¿Cómo pretendes que supere que alguien supuestamente "normal"— hizo comillas— rechace a esta belleza?— se señaló— soy irresistible.

 Creo que está más que claro que no lo es.   

—Veo que alguien tiene el ego algo alto— Ashley rodó los ojos— sólo un poco...— hizo un gesto con su mano        

—Si yo pude superar mi adicción por los osos pandas, tú puedes superar a Kendall, amigo.— dijo Alicia 

 Austin suspiró— Ustedes no comprenden... sólo olvídenlo.

—Olviden a este tonto... volviendo al tema de Kendall, es un poco misteriosa pero tal vez eso sea normal en Francia o en simplemente en ella, o tal vez no confía en nosotros aún como para decirnos quien le gusta... no lo sé.— me encogí de hombros

—No lo creo... la chica es rara, aceptémoslo.— dijo Justin mientras le rallaba queso a su cereal

 Lo miré raro... Y se supone que Kendall es la extraña...

—Listo, ya llegué.— Greg entró a la cocina 

—¿Ya llegaste?— pregunté irónica

—Cállate, chica sin licencia.

 Bufé. Ya se les hizo costumbre llamarme así a estos idiotas.

—Si no quieres que esta chica sin licencia se vaya y no te ayude en lo que quieres hacer, ya habla.— dije

 Greg nos llamó a los gemelos, Alicia, Ashley y a mí porque necesita nuestra ayuda, ¿para qué?, no tengo ni la más mínima idea.   

—¿Para qué quieres nuestra ayuda, pequeño Greguie?— preguntó Alicia  

—Verán, lo que sucede es que... Stella y yo ya llevamos bastante tiempo juntos y pienso que es hora de proponerle matrimonio.— dijo con una gran sonrisa— y necesito que me ayuden en eso.

 Todos lo miramos boquiabiertos.

 Oh

 Dios

 Mío.

 ¡Jesús Dios mío santo!

 Alicia y Ashley dieron un grito, haciendo que todos las miráramos como si estuvieran locas.

—Mis pequeños bebés se van a casar.— Alicia abrazó a la otra rubia

—No puedo creerlo.— dijo Ashley sin soltarla

 Las miramos sin entender... se supone que se "odian", ¿por qué están abrazándose?

—Awww...— exclamó Austin como todo un gay— sabía que se amaban, son adorables.

 Estas, al escucharlo se soltaron de su abrazo rápidamente— Sólo... la abracé porque... necesitaba abrazar a alguien y ella era la que estaba más... cerca— Alicia se excusó— pff... sólo por eso, chicos...