Pasos hacia ti. [Larry Stylinson]

Capítulo 19

Niall había llevado el auto de Harry y Louis se había ido con el chico en dirección a su casa. Durante el trayecto, el de ojos verdes no había despegado los ojos de la ventana mirando al exterior como si éste tuviera las respuestas a todos sus problemas.

El ataque de pánico que había tenido realmente había preocupado al de ojos azules y lo peor de todo era que ni siquiera tenía idea de qué estaba sucediendo. ¿Qué había hecho que ese ser tan noble se desmoronara de aquella manera? Pues había comprobado que de las peores cosas que le habían podido pasar en la tierra, ver llorar a Harry era la peor.

Miró el reloj y se dio cuenta de que pasaba de la media noche, por lo cual se sintió completamente seguro pues estaba más que seguro de que su hija en ese momento se encontraba sumida en un sueño profundo del que ni siquiera una bomba nuclear la sacaría, así que no llegaría a hacerles preguntas ni interrumpiría la conversación que sabía que debía de tener con Harry esa noche puesto que lo conocía tanto que era consciente de que si no lo hacía hablar esa noche, perdería toda oportunidad de enterarse de qué había detrás de todo eso.

Estacionó el auto fuera de su enorme casa y miró a Harry quien tenía la cabeza recostada en el cristal del auto.

-          Hemos llegado a mi casa, Hazz – anunció para sacarlo de su ensimismamiento.

El rizado se limitó a asentir antes de abrir la puerta del auto para bajar de él.

Louis se apresuró con temor a que saliera corriendo de repente en otra dirección para escapar de él como en aquellas películas que había visto, pero de repente recordó que él no era un policía, Harry no era un criminal y su casa no era una prisión de alta seguridad, así que la misma idea le pareció ridícula.

Camino hasta la puerta y la abrió de par en par para que el chico de ojos verdes entrara y cuando lo hizo, simplemente lo siguió para llevarlo hasta la sala de estar pues creía que aquel era el lugar más apropiado para entablar una conversación que parecía más seria que la que había tenido con su hija cuando ella le había presentado a su primer novio a los 13 años.

-          Iré por un poco de agua – anunció después de que el rizado se dejó caer en uno de los elegantes sofás.

Se dirigió a su enorme cocina para sacar dos vasos, llenarlos con agua y después volver a donde se encontraba Harry.

Se dejó caer a su lado y le tendió uno de los vasos, el cual él tomo lentamente.

No parecía estar mejor a un 100% y eso era completamente claro, pero se veía mucho más tranquilo que horas antes.

-          Gracias… - susurró el rizado.

Los labios de Harry abrazaron el borde del vaso para darle un largo trago al líquido que contenía y después lo dejó sobre la mesa de centro que estaba delante de ellos.

-          ¿Quieres contarme…? – preguntó el de ojos azules antes de que el valor se le fuera volando a algún lugar.

-          Yo… es muy difícil Lou… - susurró.

Louis tomó aire con pesar y después lo dejó salir pesadamente y es que en realidad no quería presionar al rizado, pero realmente sentía que necesitaba saber todo aquello. Algo le decía que algo no iba a estar bien desde ese momento en adelante.

-          Quiero que lo compartas conmigo – lo animó – quiero ayudarte.

Jamás había visto a Harry tan inseguro como aquella noche. Jugaba con sus dedos como si fueran lo más interesante del mundo o simplemente, como si fueran su única escapatoria de mirarlo a los ojos al hablar.

-          Yo… estoy casado.

-          Eso ya me lo has dicho, Hazz.

-          Con Zayn Malik.

El de ojos azules tuvo que contenerse para no dejar que el vaso que tenía en las manos cayera al suelo.

-          ¿Qué… qué mierda, Harry? – soltó sorprendido – yo trabajo con él y jamás… no me lo imaginé…

-          Destruyó mi vida.

-          Hazz, él dijo que su esposo está cuidando de su madre en otro lugar – le explicó -  no me digas que le has mentido únicamente para poder separarte de él porque…

-          Eso no es lo que sucedió – se defendió – ni siquiera sabes mis razones.

-          Quiero saberlas.

El rizado soltó un suspiro esperando a que todo el aire que tenía en el cuerpo se le escapara en ese momento para poder morir y dejar atrás todo de una buena vez.

-          De acuerdo…