Pasos hacia ti. [Larry Stylinson]

Capítulo 20.

Twitter: @_Anne1D (sólo verán ruegos a Harry Styles para que me siga, pero ahí está. Si a alguna de ustedes las sigue, díganle que me siga jaja)

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El día era frio y no podía encender la calefacción lo cual hacia que los golpes y su alma dolieran más de lo debido.

Si unos meses antes le hubieran dicho que se iba a arrepentir de haberse casado con ese hombre él se hubiera reído fuertemente y les hubiera contestado que jamás pasaría puesto que Zayn desde su punto de vista era el mejor que podía existir sobre la tierra… antes era iluso.

Se abrazó más a sí mismo para envolverse mejor en su abrigo con la esperanza de que el frio disminuyera ya que si llegaba a encender la calefacción tendría golpes garantizados y se acercó a uno de los enormes ventanales de la casa para poder mirar hacia la calle. Una patrulla de policía se encontraba estacionada ahí como si lo estuviera vigilando y maldición, es que así era.

Zayn tenía demasiada fuerza debido a los entrenamientos de la policía y es que desde que lo había conocido se dedicaba a eso… ser policía, pues su papá era el jefe de ese departamento, pero en días como aquel, cuando se suponía que su esposo debía de estar patrullando la ciudad, se estacionaba fuera de su enorme casa para vigilarlo como si fuera un delincuente más y aquello había empezado desde la primera vez que había tenido un intento de escape fallido.

Retrocedió dos pasos y decidió que lo mejor era limpiar aquel lugar que no podía estar más limpio y cocinar la cena para cuando él llegara del trabajo. Puesto que si se ponía a recapitular, recordaba que la primera vez que había recibido un golpe de Zayn había sido porque él suponía que la casa se encontraba completamente sucia.

Había rogado por una ayudante de limpieza pero su esposo se había negado. Al principio le había dicho que “no” con palabras, pero después su puño se había estrellado en el rostro de Harry sin compasión mientras le gritaba que se callara la boca puesto que él no merecía aquellos lujos y, claro, el rizado le había creído al principio, pero después se había dado cuenta de que simplemente Zayn no quería testigos de su crueldad, no quería que Harry tuviera algún tipo de amigo.

Después de limpiar el suelo había empezado a preparar la cena con tranquilidad y mientras cortaba las verduras sintió un deseo incontrolable por enterrarse aquel cuchillo una y otra vez hasta caer tendido en el suelo, muerto, pero libre al fin. Pero era un cobarde, un maldito cobarde que ni siquiera tenía el valor de acercar el cuchillo a su muñeca para hacer un ligero corte y estaba seguro de que si él no terminaba con su vida, Zayn lo haría en uno de sus arranques de ira.

Aun estando ahí de pie esperando a que el pollo terminara de hornearse, no podía entender cómo había fallado en su primer intento de escape, pero después lo pensaba con detenimiento y se daba cuenta de que había cometido demasiados errores. Principalmente, el día había sido pésimo puesto que la nieve caía en una espantosa tormenta, el frío calaba sus huesos y sus pies no podían más con esa situación cuando se encontraba demasiado cerca de la casa de sus padres. Lo único inteligente que había pasado aquella tarde había sido salir cuando Zayn no estaba en casa, después había sido mierda, desde el principio hasta el momento en el que había dejado el tiked de compra del billete de autobús hacia su casa sobre la mesa, un lugar en el que claramente Zayn lo encontraría e iría a buscarlo. Lo desconcertante era que había llegado tan rápido por él que ni siquiera había tenido oportunidad de acercarse a la puerta de la casa de sus padres y mientras su esposo lo apuntaba con esa pistola que utilizaba para su trabajo, él sólo había podido llorar y seguir sus indicaciones hasta que habían vuelto a casa.