1.El extraño

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Me encontraba durmiendo mi siesta vespertina hasta que desperté y no pude moverme, era como si me hubieran drogado y no tuviera control de mi propio cuerpo, lo peor era, que sentía una intensa mirada sobre mí, cuando por fin identifiqué de dónde provenía la persona que me observaba me quede helada.

Seguía luchando por mover mi cuerpo, intenté hablar pero no salía palabra alguna solo balbuceaba como si fuera una bebe, y ese extraño aún no me quitaba la mirada, su aspecto me tenía intrigada, era totalmente raro, era calvo, piel clara, delgado y lo más extraño era sus tatuajes o marcas que tenía por todo su cuerpo de color celeste, sabía que significaba algo más y que no eran solo un montón de símbolos, sabía que era algo importante, pero eso no importaba, yo quería ser dueña de mi propio cuerpo otra vez, él estaba justo en la ventana viendo hacia mi cuarto con su mirada tranquila y serena observando cómo luchaba por moverme y hablar.

Justo en ese momento.

Desperté de mi sueño, me quedé unos instantes asimilando lo que acababa de soñar, sintiéndolo tan real, tan vivido.

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Me dirigía al trabajo como de lunes a viernes, cruzo la calle ya que no tardaba en sonar el timbre y no quiero que se me haga tarde, soy maestra de un colegio privado, no es gran cosa apenas me acabo de graduar de la universidad y necesito experiencia.

Mientras espero a que el semáforo cambie de color, siento una extraña mirada, pero no encuentro de dónde proviene por más que volteo a los alrededores, es extraño.

Llego al trabajo y saludo a la chica de recepción y me pasó directo al salón con los muchachos, mientras entro y coloco mi bolso en el escritorio y empiezo a sacar mis plumones, me invade aquel recuerdo de un sueño raro que tuve hace días y por más vueltas que le doy no logro entenderlo, esa persona que me observaba por la ventana de mi cuarto, y yo sin poder moverme, desechó la idea, solo era un sueño, solo eso y nada más.

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Ya pasadas las horas toda cansada y agobiada por el día, me despido de la recepcionista y me voy caminando a mi casa, ya que solo vivo a unos minutos caminando, cuando llego a casa y saco de mi bolso las llaves vuelvo a sentir esa sensación de que alguien me observa, pero no logro identificar quién o de dónde me observan. Ya en casa y con ropa más cómoda voy a la cocina para preparar algo rápido de cenar termino y me voy a bañarme e irme a la cama; cuando de repente tiro el vaso de agua y se hace añicos por toda la cocina, en ese momento por el rabillo del ojo veo pasar una sombra me voy inmediatamente a la sala y enciendo la luz y lo veo ahí sentado en el sofá, tranquilamente observándome y ahí es cuando me doy cuenta que es él quien me observaba el día de hoy en la calle y afuera de mi casa y, pero, él es la persona que me observaba en mis sueño, aquel sueño perturbador que no logro quitármela de la cabeza.

En ese momento todo regresa a mí, las sensaciones de aquel sueño como si hubiera sido real, la desesperación invade mi cuerpo otra vez, como si ese sueño realmente hubiera pasado, me sudan las manos a mares.

Él sentado me observa y solo sonríe, ese maldito me sonríe como si fuéramos viejos amigos de la infancia; clavó mis uñas en mi mano hecha puño, y el separa de mi sofá y camina hacia mí.

Quiero correr y golpearlo con algo, pero mi cuerpo no reacciona me quedo congelada ahí parada como una estúpida. Se para justo frente a mí.

-Estás preparada? - me dice el muy estúpido

-Quién eres y qué es lo que quieres? - una rabia se apodera de mí, quién se cree para hablarme así, de estar dentro de mi casa.

El me mira por unos segundos que parecen eternos y vuelve a poner su risa de asesino.

-Ya es hora y tienes que estar preparada, vas a tener cambios en tu vida inimaginables, enséñate a vivir con eso y muy pronto te buscaremos para continuar con tu preparación.

Y dicho eso no sé qué fue lo qué pasó, nada más el muy cabrón desapareció frente a mis ojos, sé que no estoy loca pero una persona no puede desaparecer en un segundo a otro de tu vista. Sigo parada no sé cuánto tiempo analizando lo último que me dijo.

¿Preparada para qué? ¿Y cómo que mi vida va a cambiar? ¿Y quienes me buscarán? Ese cobrón sí que está loco. Finalmente me voy a la cocina y limpio el vaso en el suelo termino de cenar, me baño y me voy a la cama. Definitivamente este día que empezaba a marchar "normal" cambio totalmente, cierro los ojos y caigo en un sueño profundo.






Espero y les guste este primer capitulo
Voten y comenten que les pareció

La ElegidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora