La Elegida

17.Juego de poder

EEn la mañana siguiente levantamos las tiendas de acampar y nos dirigimos devuelta al edificio para seguir con nuestra rutina de entrenamientos.

Mientras tonteaba con las hojas y ramas de los alrededores se me ocurre una idea traviesa. Intento mover una rama de un pequeño árbol que está justo a lado de Evan sacudiéndolo por los lados mentalmente, me lo imagino a la perfección me relajo y en ese momento la rama hace justo lo que yo ordeno, pegándole de lleno en la cabeza a Evan. Todos estallaron de risa mientras Evan se masajeaba justo donde la rama le dio el golpe.

-Quién fue, fuiste tú verdad-me mira directamente a mi

-Quién yoooo? - lo digo con voz de no saber a qué se refiere

-Si, ¿quién más, acaso conoces a alguien más que pueda mover objetos a voluntad? -enarca una ceja y tiene sus manos en la cintura.

-Yo no sé de qué hablas yo solo voy caminando concentrada en no caerme con las raíces de los árboles.

Justo en ese momento siento que no puedo mover mis pies. Cuando bajo mi vista sé por qué no puedo. El maldito me a enterrado mis pies hasta la mitad de mis pantorrillas.

-Deja de hacerlo o juro que lo pagarás-digo de forma molesta, aunque por dentro me estoy divirtiendo

-Y si no quiero...-y sonríe

-Te arrepentirás, me divertiré contigo a tal grado que suplicaras que te deje en paz.

-Inténtalo.

-Te lo advertí- en ese momento mis pies salen de la superficie porque así ordené yo. Pienso en infringir daño a Evan, aunque no muy fuerte, él se tira al suelo, pero no grita, maldito orgulloso.
El levanta un montón de tierra y desaparece de nuestra visión. Todos nos quedamos en inmóviles porque no sabemos a dónde carajos se ha ido, literal se lo ha tragado la tierra. Veo como a Karen se le dibuja una sonrisa y me mira, sé en ese momento que ella sabe el plan de Evan y no me dirá nada porque todos quieren ver hasta qué punto llegarán nuestras habilidades.

En ese momento brincó al árbol más cercano que tengo y empiezo a subir, entre más lejos del suelo mejor para mí, así estaré lejos de su alcance. Me instalo en una rama y ahí me siento. Me quedo esperando ya que tiene que salir a respirar, sino lo obligaré a salir del hoyo en el que está metido.

-Protéjanse esto va a doler. -le grito a los tres que están parados y Eric entiende mi mensaje.

En ese momento dejo salir todo mi poder dirigiéndolo hacia el suelo, quiero que Evan salga gritando de dolor. Espero. Pero nada, nadie sale.

Maldición ahora no sé qué hacer.

-Busca soluciones Ali, tú puedes. -dice Karen sonriéndome. Esto se a vuelto un espectáculo.

Trato de concentrarme y ver qué puedo hacer con mis habilidades. Empiezo a concentrarme, esto va a requerir esfuerzo, respiro una, dos, tres veces así hasta tranquilizar mi pulso. Cuando por fin lo he logrado sé que estoy preparada para lo que tengo planeado hacer.

Empiezo a imaginar lo que quiero visualizar que pase, en el tiempo que deseo. Y así lo ejecutó.
La tierra empieza a temblar poco a poco, mientras tiembla trato de ver algún cambio en los movimientos del suelo, veo un punto en el que la tierra vibra menos, justo en ese momento me imagino una mano fuerte toma toda la tierra de esa zona en su puño y lo levanta del suelo; Evan grita ya que le duele como lo estoy apretando la tierra que subió empieza a caer y aparece un Evan todo terroso. Salto del árbol y no puedo evitar sonreír.

-Te lo advertí, esto lo voy a disfrutar tanto. -y lo miro con malicia.

-Déjame o juro que te enterrare viva hasta que te falte el oxígeno y mueras una y otra vez. -lo dice mientras trata de zafarse del agarre, y se ve que está sonriendo.

-Te dejare si dices en voz alta que soy la mejor. -sonrió ante su expresión incrédula

-Eso jamás, antes prefiero andar en calzoncillos. -ataja

-Bueno tú lo has pedido-desprendo toda su ropa hasta dejarlo en su bóxer totalmente descalzo porque si señores también los calcetines y tenis cuentan como parte de su vestimenta.

Él se me queda viendo

-Prefiero esto antes de aceptar que eres la mejor. -me saca la lengua, algo infantil para mi gusto y empieza a caminar de forma graciosa dirigiéndonos hacia el edificio.

Todos estallamos de risa y seguimos su paso hasta llegar al edificio. Nunca dejo de caminar de forma grandiosa. Cuando llegamos al edificio todos se le quedaban viendo, otro solo sonreía y otros no podían evitarlo y se acercaban y le decían cosas muy perturbadoras sobre cómo se veía en bóxer. De ahora en adelante de seguro se ganará fans ya sea por su ridículo caminar o por el hecho de ir semidesnudo por todo el campo y entrar al edificio. Eso le pasa por ser orgullo y no aceptar la simple verdad.
Justo antes de desaparecer se gira y grita

-Esto no se va a quedar aquí, de ahora en adelante vete con cuidado en cualquier momento tomaré venganza. -se gira y se adentra al edificio.

No puedo evitar sonreír, es la primera vez que ponemos en práctica nuestras habilidades, aunque sea para gastarnos bromas al fin y cabo estamos practicando para ver hasta dónde podemos llegar hacer.