Mi jefe es un Saiya...¿qué? Trunks y Tú [EDITANDO]

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27|Daño

Intenté levantarme, pero caí al suelo de nuevo, tenía que ir con Trunks y asegurarme de ver si estaba bien.

La puesta de Sol estaba cerca, el cielo era de un color sumamente anaranjado, escuché a Mr. Satán llorar a Pan, ella estaba inconsciente con Giru entre sus manos.

Solté un suspiro sobre la arena caliente, mi espalda dolía. Intenté levantarme y fue inútil, posicioné ambas manos para alzarme, mis brazos temblaron. No podía mantener el equilibrio.

No tuve de otra más que arrastrarme por el suelo para llegar al chico de cabellos lavanda.

A medio camino deje de sentir mis piernas. Me alarmé, intenté moverlas, pero no respondían. Comencé a llorar, silenciosamente.

—¿Eh?, ¿qué sucede ____? —el campeón mundial se acercó, preocupado.

—No siento mis piernas, Mr. Satán —declaré, entre sollozos.

Nada me dolía más que la espalda, podía con eso, pero no entendía por qué mis piernas no se movían.

Él me ayudó a levantarme, pero fue en vano; antes de caer al suelo me sostuvo, cargándome.

—Llévame con Trunks, por favor —pedí, con lágrimas en los ojos.

Prometí que no volvería a llorar. Lo que pasó fue mi culpa, si tan sólo le hubiera hecho caso.

Mr. Satán acató mi pedimento dejándome a un lado de aquel joven, él volvió a lado de Pan.

—Trunks, respóndeme —lo sacudí de la manga de su camiseta. Estaba respirando levemente, pero no despertaba—. Te necesito conmigo ahora, por favor levántate— supliqué colocando mi cabeza sobre su pecho.

—¡Por favor, Goku, has pedazos a ese sujeto! —Mr. Satán y yo gritamos al mismo tiempo.

A una distancia considerable, pude ver al mencionado azabache convirtiéndose en super saiyajin para después darle un golpe en el centro del estómago al androide No. 17 mandándolo a volar atravesando un edificio. Ambos se alejaron.

La oscuridad de la noche comenzó a aparecer.

[ . . . ]

El señor Goku, transformado en esa fase de pelaje rojizo, estaba peleando contra la máquina mutante de Muy y aun así no conseguía hacerle ningún daño. Me arrastré sin ayuda a un lugar donde pude ver la pelea, ahora estaba alejada de Trunks otra vez.

Todo se complicaba cuando me di cuenta de que el androide absorbía los ataques del señor Goku, afortunadamente, este también lo notó.

Un momento después, el de cabellos alborotados estaba vencido en el suelo, Número Diecisiete le lanzó una enorme energía blancuzca con el centro negro.