Preparatoria Westeros (+16)

30 - Jon: Noticias del tío Benjen

Jon seguía atorado en la misma línea de su libro. A pesar de tener puesto el walkman que le había prestado Arya seguía escuchando a lo lejos a Robb intentando explicarle a Theon sobre álgebra básica.

Volteó a ver el colchón que Ned había colocado del otro lado del ático y la mochila del chico Greyjoy. Jon entendía un poco lo raro de ser la pieza sobrante pero a diferencia de Theon, él ya sabía lo que haría una vez terminara la prepa.

El teléfono sonó. La voz de Catelyn se deslizó hasta llegar hacia la habitación improvisada de su hijastro.

-Buenas tardes ¿cómo has estado?... Me alegro mucho, Ned aún no llega... Entiendo, dame un segundo.- ella dejó el auricular en la mesa y caminó hacia las escaleras de la buhardilla.- Jon, tienes llamada de Benjen.

Se quitó los audífonos tan rápido que por un segundo creyó haberlos roto. En cuestión de segundos Jon estaba al teléfono.

-¿Bueno?

-Jon ¿cómo estás?- era la voz calmada de su tío favorito.- ¿qué tal el colegio?

-Bien pero aún no es época de exámenes.

Una risa se escuchó del otro lado y a pesar de tener algo de tristeza en ella, Jon sabía que era franca.

-Creo que no tendrás que preocuparte mucho por eso.- respondió Benjen.

-No entiendo.

-Hablé con el coronel Mormont una vez más de tu situación y a regañadientes accedió a que ingreses como soldado raso en Fort Crow...

-¡Tío esas son excelentes noticias!- dijo Jon entusiasmado de finalmente poder empezar una vida nueva.

-Aún no te entusiasmes mucho chico, el coronel tiene ciertas condiciones que tengo yo que comentar con tu padre ¿podrías decirle que me devuelva la llamada pronto?

-¡Claro! Tal vez deba empezar a empacar...

-Aún no.- la voz de Benjen sonaba algo preocupada.- Jon, Fort Crow es una de nuestras bases más delicadas y prácticamente está en medio de la nada. Si crees que es igual a cuando acampábamos con tu padre temo mucho que no vas a pasar de la primera semana del entrenamiento...

-Tío voy a estar bien. Llevo años preparado para esto pero si tanto te preocupa le haré llegar tu mensaje a papá.

-Perfecto, hasta entonces.

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Unas horas después llegó Ned con su maletín lleno de formularios por revisar. Catelyn lo tomó y se lo llevó al estudio no sin antes darle un beso en la mejilla.

-Querido ¿quieres que caliente café?

-Sí por favor.- Ned comenzó a desatarse el nudo de la corbata. Jon tuvo precaución para no cruzarse con su madrastra para acudir con su padre.

-Papá.

-Hola Jon ¿cómo te está yendo con Theon?

-Bien creo, pero no venía por eso ¿podemos hablar en privado?

Ned se limitó a asentir mientras su hijo tomaba asiento en el estudio. Cerró la puerta y se sentó en su escritorio.

-¿Son malas noticias Jon?

-No. El tío Ben habló por teléfono, dice que el coronel Mormont ha accedido a incorporarme para el siguiente grupo de soldados en Fort Crow pero quiere hablar contigo sobre las condiciones.- Jon intentó disimular su alegría, sabía que su padre no estaba muy complacido con la idea de tener un hijo en el ejército.

-Está bien, deja que le llame.- Ned tomó el auricular el teléfono negro que estaba a su derecha. Jon estaba tan nervioso que incluso creyó escuchar los tonos de línea.- Buenas noches, quisiera comunicarme con el capitán Stark por favor... su hermano Ned... yo espero, gracias.

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Jon salió al pórtico donde encontró a Arya esperándolo con un par de guantes de béisbol y un bate. Apenas comenzaban a asomarse las estrellas y los grillos cantaban levemente.

-¿Por qué tardaste tanto? Pensé que papá te había castigado.- dijo su media hermana.

-Llamó nuestro tío, al parecer en dos semanas podré comenzar mi entrenamiento.- contestó Jon aunque en su voz podía reflejarse la molestia.

-Pero es lo que querías desde el año pasado.- alcanzó a decir Arya.

-Sí pero no bajo las condiciones que quieren imponerme.- Jon tomó uno de los guantes, arrojaba la pelota hacia su mano con tal fuerza que la chica creyó que se terminaría rompiendo los dedos.- Primero no podré estar aquí en Fort Irwin, me van a mandar a Fort Crow en Alaska. Eso es lo de menos. Lo que me molesta es que me van a entrenar mas no piensan mandarme a misiones.

-Que raro...

-Más que raro es simplemente estúpido.- Jon seguía jugando con la pelota a pesar de que Arya intentaba detenerlo.- ¿Para qué me quieren allá si solamente me van a poner a llenar formularios?

-No lo sé, tal vez solo sea cuestión de demostrar que eres el mejor como hace dos años que entraste al equipo como pitcher aunque no le agradabas al entrenador.- la chica se puso su manopla y se colocó del otro lado del jardín.- ¡Lánzala!

-El tío Ben sabe que estoy más listo que el resto de los chicos que ingresarán conmigo, él debió haberle dicho eso al Coronel Mormont.- Jon lanzó la bola a su hermanita quien logró atraparta fácilmente.

-Sí pero se vería mal si lo estando en su puesto ¿no lo crees?.- Arya lanzó la pelota de regreso.

-Puede ser. Me niego a que los demás piensen que soy un cobarde, ni siquiera es porque yo desee estar tras un escritorio.- el chico volvió a arrojar la bola.

-Pero eso ya no queda en ti. Quien sabe, como están las cosas tal vez sí te manden a pelear a algún sitio, solo recuerda lo que dice papá: "Ir es fácil, regresar es el problema".

-Yo volveré, posiblemente para tu graduación de preparatoria.- contestó Jon.

-Más te vale.- repuso Arya dejando que su hermano le diera un abrazo.- Te extrañaré.