Capítulo 19

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-¿¡En serio?! Parece que yo soy la adulta aquí. -Nos reprochó mi hermana, despertándonos a las cuatro, que dormíamos plácidamente envueltas en el calor de las mantas y refugiadas en los cuerpos de las otras.

-Shh... Habla más bajo niña. -Dijo Nare removiéndose en un intento de no despertarse del todo.

-¿Qué hice para merecer esto? -Preguntó Audrey, escurriéndose hasta caer al suelo.

-¡Que alguien apague el maldito sol! -Gritó Yuri mientras se tallaba los ojos.

Sí, esas tres loquillas eran mis mejores amigas, y juntas no había quien nos parase...

Bueno, salvo mi hermana pequeña Alice. Ella podía parar un asteroide con sus charlitas desmotivadoras...

Aún recuerdo el día en que me regaló un precioso "estás más plana que una tabla de planchar... ¿Que tienes contra lo sujetadores con relleno? Tendrías que ir a un psicólogo a que te miren los complejos, chica..." o, y cuando me soltó un "Se nota que aprovecharse las navidades para comer todo lo que no comiste durante el verano..."

Pero así era ella... Y no podía evitarlo, parecía que lo de criticar le saliese solo...

Me levanté por fin del columpio, mientras Nare se estiraba en el sitio que ahora había dejado libre. Me desperecé y fui a la cocina a prepararme el desayuno.

Cuando entré vi como Aiden escondía algo detrás suyo y sonriera de manera natural...

-¿Qué escondes? -Pregunté entrecerrando los ojos y acercándome un poco a él para ver que tenía detrás de la espalda.

-Esta bien... La verdad es que... ¡Una vez me hice un test de embarazo cuando me cogiste de la mano porque no estaba seguro de como funcionaba! -Dijo poniéndose muy rojo.

-¿Qué? Me refería a que escondías detrás de la espalda.

-Ah... Pues olvida todo lo que acabo de decir.

-Estoy en ello... ¿Ahora me vas a decir que escondes ahí?

-Pues no te lo puedo enseñar porque es una sorpresa.

-¿Una sorpresa?

-Sí, así que vete para que la pueda terminar.

-¿Sabes qué? Me has convencido. Esta bien. -Dije mientras salía de la cocina. Aquel chico estaba como una cabra...

-¡Kira! -Gritó Alice desde el porche. Salí a ver que pasaba, pero ni había nadie allí. Tal vez solo eran imaginaciones mías... ¿No?

Subí a mi habitación, me di una larga ducha y me puse algo de ropa cómoda. Bajé al salón y me encontré a Yuri viendo la tele.

-¿Qué estás viendo?

-C.S.I. cyber.

-Porque será que no me sorprende... -Farfullé. -Oye, ¿Has visto a...

-¡Shh! Espera un segundo... ¡Van a decir quien es el asesuno.

-¿Raven? ¿Por... Porqué lo hiciste? -Preguntó la chica rubia de la tele.

-¡Dios! Lo sabía. ¡LO SABÍA! sabía que había sido esa zorra. Nunca me calló bien... -Gritó mi amiga poniéndose de pie sobre el sofá... A veces pensaba que aquella chica era incorregible. Di un largo suspiro para ponerme a hablar

-Estupendo, ahora que ya sabes quien fue... ¿Viste a Alice por alguna parte?

-Sí, hace como 10 minutos, cuando me despertó amablemente de un grito.

-Gracias por la ayuda... -Murmuré saliendo del salón para ir a las habitaciones de arriba.

Cuando subí al primer piso, escuché música salir de uno de los cuartos. Me acerqué y abrí la puerta, encontrándome con una Audrey cantando a pleno pulmón con un cepillo del pelo en una de sus manos, utilizándolo como micrófono.

-¡Audrey!

-A to the G to the U to the STD,
Hongkongeul bonaeneun my tongue technology. -Seguía rapeando ella... Ahora me planteaba si de verdad cantaba o estaba intentando invocar a satanás....

-¡AUDREY! -Grité esta vez tan fuerte que mi amiga se sobresaltó y se dio la vuelta a la vez que apagaba la música.

-¿Qué pasa? -Dijo posando el cepillo en la pequeña mesita blanca que estaba al lado de su cama.

-¿Has visto a Alice?

-No, ¿Porqué preguntas?

-Nadie la ha visto.

-No seas exagerada... Lo más seguro es que esté en el País de las Maravillas.

Al ver que no me reía de su chiste se pso seria y me miró a los ojos, con esa mirada tan profunda que tenía ella que parecía perforarte el alma.

-No creo que le haya pasado nada, al fin y al cabo, estamos en un sitio tranquilo y sin mucha gente... ¿Qué es lo peor que le podría pasar?

Teniendo en cuenta que mataron a Leo, secuestraron a Jorge y a Nare, mi amiga apareció ayer con heridas y Kai no está muerto...

-Tienes razón... ¿Qué es lo peor que podría pasar? -Dije antes de marcharme de la habitación de Audrey para ver si Nare estaba en la suya.

Fui al cuarto de mi amiga, ero no estaba allí. Asomé un poco la cabeza por la ventana de su habitación y la vi, sentada en las escaleras de la casa, con una guitarra en la mano, intentando tocar algo. Bajé y ella dejó de tocar cuando se percató de mi presencia.

-Hola. -Me dijo con una sonrisa dibujada en la cara.

-Hola.

-¿Qué pasa?

-¿Viste a Alice?

-No ¿Ha pasado algo?

-No, solo...

-Eso significa que si que pasó algo. ¿Vas a contármelo o prefieres esperar a que lo adivine yo sola?

-Escuché que gritaba mi nombre desde el porche, pero cuando fui ahí, no había nadie.

-¿Por eso estás preocupada? A lo mejor solo fueron imaginaciones tuyas y ahora se está dando una ducha en el baño de su habitación.

-Gracias Nare. -Hubo una pausa hasta que volví a hablar.- por cierto, tú tenías una larga historia que contarme... ¿No?

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FIN DEL CAPT. GRACIAS POR LEER!

Cómo matar a un ángel  2Where stories live. Discover now