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Capítulo 34: Bien empecemos con esto...

Cuando ya le había mandado a Sam los videos para editarlos, decidí bajar a ver qué había de comer pues moría de hambre, mejor no lo hubiera hecho jamás. Marcy casi me taclea como a jugador de fútbol americano al verme bajar las escaleras.

-¡Joder Marcy! ¡Quítate de encima!- Empecé a quejarme y me la quite de encima luego de unos segundos. 

-Ya tenemos los vestidos para la fiesta.- Dice ella y alzó una ceja, que recuerde no le pregunte nada sobre eso. -¿Tu no compraste nada verdad? Ugh Zara.

-La verdad tengo uno.- Le resto importancia. Y camino a la cocina para que no sigan molestando, pero fue inevitable, Kelsey y Marcy no se rindieron, siguiendome a la cocina. Ugh joder. Insistiendo que que querian verlo y ruedo los ojos. 

Tome una bolsa de frituras y luego subí seguida de ellas y de las demás, montón de chismosas. Entre en la habitación y me acerque a mi armario, saqué el estuche donde estaba el dichoso vestido y lo tire en la cama. -Ahi esta.- Murmuro y abro la bolsa para empezar a comer.

Marcy es la primera en correr a verlo y cuando lo saca sonríe levemente. -¿De donde sacaste buen gusto para estas cosas Zara?- Alzo los hombros, cuando era la Duff sabía mucho de moda, leía mucho sobre esas cosas, solo que jamas las puse en mi prioridad.

-Internet.- Respondo.

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Al día siguiente fue toda una locura, mayormente cuando ocurren estos eventos muy pocos van a clases, ya sea que son un montón de superficiales o chicos que buscan esa excusa para seguir durmiendo. Como yo.

Como las chicas no dejaban de armar escándalo por una secador, un vestido, una uña rota, etc. Me coloqué los audífonos mientras a través de ellos evadía los gritos y escuchaba Fairly Local de Twenty One Pilots

Deberías arreglarte. Pff, no lo necesito no voy a esa estúpida fiesta por lucir, sabes a lo que vamos.

En eso escucho el sonar de mi celular y enciendo la pantalla. Ya está todo listo, te veré en media hora para cerrar por completo el trato. -S.

Esto si era buen motivo para levantarme de la cama. Y así lo hice, me levante, me arregle un poco y luego de media hora salgo de la fraternidad a encontrarme con Sam. Que quede claro, esta broma, no quita las que tengo planeadas para los que faltan en mi lista, no, no. Esta es solo genral, la que debe ser recordada. 

Llega otro mensaje. He terminado de comprar todo lo de la lista a donde las llevo. -X.

Sonrio con algo de maldad. A mi casa, tienes la llave dejalas todas en mi habitación y luego te regresas acá, tenemos cosas que terminar. -Z.

Esta bien, en media hora. -X.

Luego de eso camine hasta el lugar donde iba a ser la dichosa fiesta y en la entrada me encuentro con Sam. -Hice todo lo que me has pedido, ahora quiero mi parte.- Asiento y le entregó la memoria.

-Con eso vas a tener mucho poder en lo que te queda de tiempo aquí.- Sonríe y asiente.

-Creeme que no solo aquí, sino fuera también.- Asiento restándole importancia, estoy segura de que Sam dominaria el mundo cibernético en menos de lo que estoy pensando por eso estoy de su lado y prefiero que el me vea como alguien de confianza que todo lo contrario.

-Bien, debo irme, aun tengo que hacer ciertas cosas.- Le dije y ambos nos fuimos por caminos diferentes.

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Ya faltaban pocas horas para que la fiesta empezara, las chicas como siempre tenían un escándalo mientras yo seguía en mi traje deportivo mirando videos de Youtube como si fuera otro dia normal. Aunque lo era.

-¡Zara! ¡¿Por qué no te has arreglado?!- El grito de Marcy por poco hace que me caiga del sofá y la miro fulminante.

-Por que planeo llegar de última a la fiesta.- Alzo los hombros. Y la ignoro nuevamente mientras seguia viendo los videos de ciertos blogueros que me gustaban.

Cuando ya ha pasado un tiempo veo llegar a los chicos arreglados y trato de no burlarme de ellos. -¿Que haces que no te arreglas?- Cuestiona Kian. Ugh.

-Estoy ocupada haciendo cosas más importantes.- Digo y cuando veo que el último video a terminado me levanto del sofá y los miro.

-Se dan cuenta lo ridículos que se ven con trajes, de seguro sus mamis jamás se los han dicho.- Digo en tono de burla y luego subo las escaleras ignorando sus reacciones, pues yo decía la verdad. Era totalmente insultante usar traje para estas estúpidas cosas, al igual que vestidos, era tan usado, tan cliché que quiero arrancarme los ojos. Tu sola no.

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Luego de dos horas más ya hacía bastante que la casa había quedado sola y pues yo apenas terminaba de arreglarme, mi contacto había terminado de colocar las pintaras en sus lugares la harina y los huevos, las cámaras en sus lugares y solo faltaba algo. Yo.

Estas loca, nos van a matar a las dos. Callate.

Cuando termine de arreglarme tome mi celular y salí de ahí. Me subí a mi auto y gracias a dios las calles estaban solas asi podria majeras distraídamente sin importarme matar a alguien estaba algo desierto todo esto. 

Al llegar me bajo del auto. -No tardare mucho.- Sonrio ampliamente sintiendo que nada en esta noche me iba a salir mal a mi. Cuando entre vi bien decorado todo, incluyendo mi trampa estaba bien escondida que nadie se daría cuenta.

Los chicos al notar que he llegado se acercan a mi y veo que ya va bastante avanzada la fiesta pues me perdí el aburrido discurso de mi padre y otras cosas más que había hecho. Lo que significaba que ya había llegado la hora.

-Bien empecemos con esto...

La Gran Apuesta. COMPLETA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora