XIII

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Y despues de aquellas palabras, se devolvió a casa a sentir su derrota, si no le decía, nada acabaría y ahora estaría, en su infinito pesar y agonía.

Queria tenerle, y quería dejarle, todo dependería de su respuesta al siguiente día. En su mano aún sostenía una borrosa carta hecha de tristeza, se limitó tanto a solo pensar, y la lluvia en el camino la letra hizo borrar.

Terminó por dormirse, no se sentía bien, un dolor empezó, no era físico, era emocional, se prometió a si mismo por nadie llorar. En sus sueños una vez más, vió a su amado a la distancia, se quiso acercar, no debió hacerlo, debió de irse de ahí lejos, si no de otro modo no habría despertado llorando amargamente...comenzó a hablar solo.

---Me estresas y me animas, me matas y me haces volar, me tienes tan jodido, no sé como hacerlo parar.

·

I love it
I hate it
And i can't
Take it
But i'm keep on coming back to you.
·

Oh, si tan solo tuviera la fuerza de voluntad que tiene el resto para hablar, se estaba comiendo a sí mismo en su desesperación por ser correspondido.

Recordaba miles de canciones y frases que describían con detalle su confusión y estado de ánimo, había una que hablaba de alguien quien no había experimentado el amor, pero sabía perfectamente lo que era de lejos.

Y continuó derramando lágrimas, pensando que en realidad Bodoque, había encontrado la mejor excusa, y pidió extrictamente que no quería verle.

Pero todo fué malentendido por el...

Ya no deseaba otra cosa que dejar de llorar y botar aquel lago de lágrimas, recorriendo sus pálidas mejillas, que ya comenzaban a tintarse del rojo que le hacía recordar aquel mechón que su enamorado portaba en el pelo.

Por otro lado, Juan Carlos no había dejado de pensar en lo que pasaría cuando se enfrente al pequeño albino, lo peor sería que deje de hablarle, o que ya no quieran ser amigos, pero en el fondo, muy en el fondo de su corazón, no quería admitir que le quería, quería estar con el de no ser por su maldito orgullo, las malas lenguas y el qué dirán.

Quizá había solución en medio del caos de su mente, porque para empezar debía aclararse que era un mujeriego y si estaba de novio con alguien lo estaría con todas, si Juanín comprendía eso, había pasado la primera prueba y la más importante, lo segundo era que si estaba con el, su romance debía de ser detrás de cámara, que nadie se entere para no crear polémica, ya que solo el hecho de aparecer en la televisión te hace parte de la inescrupulosa farándula, del chisme, y ser espectador de programas para viejas copuchentas, gente que prefiere meterse en la vida de otros, para no criticar ni ver la suya propia.

Es así como comenzaba el plan B de Bodoque.

*

Al día siguiente en su hora de colación, el tierno Juanín quiso ir al hospital para ver como estaba el afectado del incidente, y conversar lo acordado consigo mismo el día anterior, la enfermera que estaba a cargo del joven, era muy amable, pareciera como si trabajara en el área infantil.

Llegó hasta la dichosa camilla y se sentó en una de las sillas, Bodoque estaba despierto, y observaba atentamente cada uno de sus movimientos, a lo que Juanín comenzó a ponerse nervioso y quiso entablar conversación para romper la tensión.

Just One Minute | Bodoque y Juanín | 31 Minutos [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora