Después de su partida [CAMREN] 2º Temporada De L.S.D.M.V.

Capítulo 27

MARATÓN 1/3

Cuenta regresiva para el final...

- Lauren, por favor, dime que esta es una pesadilla, que en realidad no me traicionaste de esta manera! -decía llorando Camila, Lauren agachó la cabeza, sin poder mirarla a los ojos y dijo;

- Me la debías Cabello, todo fue parte de un plan, Alejandro, ya llevatelas. -dijo Lauren dándoles la espalda y caminando.

- Eres una maldita! Te odio! Te odio! -gritaba a todo pulmón la castaña, Taylor comenzó a llorar porque sus madres habían peleado y se irían con el señor gritón.

- Camilita, sabes que Lauren puso una pequeña bomba que yo mismo se lo envié en la mochila de tu hija, la que tiene ella en manos. -susurró Alejandro a Camila. -Y sé que aunque le pidas la mochila ella no te la dará, porque sabes que ama a esa mochila y si vuelves a gritar, voy a volar todo! -susurró de nuevo, cuando la gente comenzó a acercarse y preguntar qué pasaba, Alejandro sólo miró y sonrió a Camila.

- Hija, todo bien? -preguntó una anciana que iba con otra señora, Camila contuvo el llanto y respondió con voz temblorosa.

- Sí... señora, sólo me puse algo histérica porque nunca viajé en avión y mi esposa no irá conmigo y me puse mal. -respondió, pero la señora preguntó de nuevo;

- Segura? Conoces a este hombre? -dijo señalando a Alejandro. Camila lo observó y él sonreía cínicamente.

- Sí, él... él es... es mi padre. -dijo la castaña, esperando a que la señora llamase a seguridad o algo, pero no hizo nada más, sólo asintió y se marchó.

- Camila, anda, vamos. -decía Alejandro, estirando el brazo de la castaña. - Y no se te ocurra gritar o presiono el botón que tengo en el bolsillo. -amenazó Alejandro y fue ahí que todo se le quedó Claro a Camila.

Ella se recriminaba mentalmente por haber sido tan idiota, como Lauren de la noche a la mañana la perdonó, como fue a parar en su casa justo el día que Austin decidió aparecer, tal vez su padre quería deshacerse de él y Lauren llevó a la policía, cuando ella había recibido un disparo, pero no murió, cuando bajó para darle la comida a Tay, había tomado la pequeña mochila de la niña, diciendo que ahí guardara su sándwich si no lo comía todo, fue tal vez en ese momento que colocó el dispositivo explosivo, con pasos temblorosos seguía caminando, las lágrimas no paraban de caer por sus mejillas, Taylor la abrazaba, Camila esperó hasta el último momento un milagro, milagro que no llegó;

- Por favor, sus boletos de viaje y pasaportes. -dijo una mujer detrás del escritorio, Alejandro entregó los boletos y su pasaporte, Camila también buscó su pasaporte en su billetera y se lo entregó, ella escribió en la tablet algo y les devolvió los pasaportes y boletos. - Que disfruten su vuelo. -finalizó la joven con una sonrisa en el rostro.

Caminaron por un pasillo largo, en ese momento, Camila se detuvo y dijo;

- Padre, por qué me haces esto? Por qué no me dejas ir? Yo jamás haría nada en tu contra. -decía ella tratando de librarse de su suerte.

- Ni hablar, o te vas conmigo, o morimos aquí. -dijo Alejandro, sacando un pequeño mando de su bolsillo, parecía un llavero, tal vez era para disimular que era un dispositivo.

- Por lo menos mi hija, deja que se quede con mis mejores amigas, ella no merece esto! -intentó una vez más, pero Alejandro perdía la paciencia.

- Camina de una vez, porque me estás haciendo perder el control. -dijo nervioso, Camila comenzó a caminar con resignación, llegaron a la puerta y estaban dos auxiliares de vuelo.

- Buenas tardes, sus boletos por favor. -solicitó nuevamente una de ellas, Alejandro sonrió coqueto y entregó los billetes a la joven, mientras la otra descaradamente se acercó a él

- Su primer vuelo? -preguntó ésta sonriendo a Alejandro, mientras la otra comprobaba los billetes.

- No, pero espero el mejor servicio, sí me entiendes, no? -dijo Alejandro en doble sentido.

- Le garantizo que no olvidará este viaje. -dijo ella separándose de él, Camila rodó los ojos y observó a la otra mujer y pensó por un momento, que la mujer había cambiado los billetes, pero por qué haría eso? Le restó importancia y la mujer dijo;

- Adelante, disfruten del vuelo. -Alejandro tomó los billetes y le cedió el paso a Camila, ella entró, pero oyó como Alejandro decía a la fulana esa;

- Te estaré esperando guapa.

Alejandro una vez dentro, miró los billetes y entregó a Camila el suyo;

- Vamos, nuestros asientos son 21, 22 y 23 B. -dijo caminando hacia el lugar, Camila sólo lo siguió.

Pasaron por algunos asientos y encontraron el lugar, un hombre estaba sentado en el asiento 20, Alejandro quedó en el 21, Camila en el 22 y Taylor en el 23 del lado del pasillo.

- Estúpidos recepcionistas, había solicitado específicamente los lugares que quería y terminaron colocándome donde se les antojó, en mi vida volveré a viajar en esta aerolínea. -decía furioso el hombre.

Camila no dijo nada, ella sólo se sentó, sentó a su hija, de pronto oyeron por los altavoces del avión, dándo el aviso de que pronto despegarían, cuando Camila iba a colocar el cinturón a su hija, un hombre y una mujer se acercan a ella, Camila los observa y el hombre dice;

- Disculpen la molestia, pero creo que ustedes están en nuestros asientos...

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