Cuando Lily se dignó a bajar de su habitación no encontró a nadie. Las vacaciones de Navidad estaban ya a la vuelta de la esquina pero algunos alumnos habían decidido a irse antes. Pero eso no sería hasta la semana próxima, sin embargo no había nadie en su sala común. Salió de ella con cuidado de no encontrase a Malfoy y decidió irse al comedor, tal vez estaban desayunando.
Se enteró que ese sábado había salida a Hogsmade y recordó lo que Hermione le susrró minutos antes de que se durmiera. Le había dicho que harían lo de su plan de enseñar defensa contra las artes oscuras por su cuenta. Se sentó y pensó. Si iba a Hogsmade se podría encontrar con Malfoy y aún no estaba preparada para eso, todavía seguía confundida.
Pero si no iba no se enteraría de que pasaba con las clases.
Lo pensó mientras observaba por la ventana del comedor la nieve cayendo, llegó a la conclusión que no iría pero que iría a enviarle una lechuza a Sirius acerca del comportamiento de Harry. Justo cuando se estaba levantando una lechuza negra entró al comedor y dejo caer un paquete negro en sus manos. Luce alzó la ceja y se sentó de nuevo para abrirlo, oyó como entraban personas a comer pero ella ignoró todo. Se había quedado paralizada al leer el destinatario. El paquete provenía de una tal Lily Evans.
-¿Lily?-oyó como Draco Malfoy, quien debía ser una de las personas que había entrado al comedor. Pero no lo miró. Se paró y con una mano tomo el paquete, con la otra jaló la muñeca del rubio y se encaminó a otro lado. El rubio la seguía preguntando sobre lo que pasaba pero ella no le ponía atención. Llegó a donde se suponía la Sala de los Menesteres se aparecía y entró.
-¿Donde estamos?-preguntó Draco. Ella dejo el paquete en una mesa y se giró a él.
-Le llaman la Sala de los Menesteres o también la Sala que viene y va.-comenzó a contar Lily mirándolo-La descubrí en mi segundo año, es una sala que se adapta a las necesidades de quien la necesita, menos las cinco excepciones de la Ley de Transformación Elemental de Gamp pero, es eso básicamente...-divago Lily regresando su vista al paquete. Draco se acercó y le tomo las manos. Llily se negó a mirarlo.
-¿Y que es esto?-pregunto mirando el paquete con atención-¿Y quien es Lily Evans?-preguntó confundido.
-Eso es lo que vamos a descubrir.-respondió abriendo el paquete. En el había fotos, muchas. También había dulces. Al fondo había una carta. Lily sacó los dulces y se los dió a Draco quien gustosamente los abrió y comenzó a comerlos. Pero luego los escupió.
-No son de ahora-dijo con una mueca de asco. Ella frunció el ceño. Sacó la carta y la abrió. Se armó de valor y comenzó a leer la delicada letra.
Para Harry, y para Lily.
No sé muy bien cuando se les entregará está carta. Y en verdad espero que no sea muy tarde, estaría feliz de verlos de nuevo.
Sé que es duro. Ustedes perdieron a sus padres, y yo perdí a mi hermana y a un querido amigo. Uno nunca se recupera de tal cosa, ¿O si?
Harry, eres el vivo retrato de James. Es increíble el parecido, a excepción de los ojos. Te lo dirán mucho, lo sé, son como los de Alex.
Lily, tanto en el cabello como en tu rostro, eres Alex. Pero tus ojos son los de James, cálidos, amables.
No sé en qué año se les entregará esto. Pero es importante que lo lean.
Existe una profecía. Y si estoy en lo correcto en que ek señor Tenebroso no está muerto, irá por ella. Tienen que recuperarla. Dumbledore sabrá que hacer con ella.
Está en el departamento de Misterios, en el Ministerio de Magia, sé que sabrán en donde, no se les hará difícil. Están conectados.
No saben como los extraño. A ustedes y a sus padres.
Con amor, tía Lily.
-¡Por las barbas de Merlín!-exclamó Lily. Draco, que la había estado observando a la chica mientras leía, dió un salto ante su expresión.
-¿Que es? ¿Que dice?-preguntó Draco tratando de ver la carta pero Lily la dobló. Sabía que el padre de Draco era un mortífago, y por ende, querrá la profecía. No dejaría que eso pasara.
-Tengo una tía-dijo Lily, en parte era verdad-Es hermana de mi madre, se llama Lily cómo yo.
-Pensé que ya no tenían más familia. -dijo Draco- Me alegro que aún haya alguien.
-Si-diji con simpleza Lily. Luego lo miró y se dió cuenta de que fue un grave error. Él inmediatamente la atrapó con la mirada. Esa que no la estaba dejando dormir.
-¿Ya podemos hablar de eso?- preguntó Draco. Ella suspiró.
-Sé que te debo al menos una respuesta. No he dormido pensando en eso-se sincero Lily.- Pero no lo sé.
-¿No sabes qué?-preguntó Draco entrecerrando los ojos. Ella suspiró.
-Te quiero, eso ya lo sabes. Me gustas, también lo sabes.-dijo Lily sonrojada- Pero lo que tú sientes, no lo sé. No aún.
-Bien-diji Draco con frialdad. La miró y alzó una ceja- Tal vez cuando lo sepas ya será tarde.-aunque Draco sabía que eso era una maldita mentira. La amaría por siempre.
-Draco...-dijo Lily, pero él ya estaba saliendo de la Sala.- Idiota.
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𝗟𝗶𝗹𝘆 𝗣𝗼𝘁𝘁𝗲𝗿 𝘆 𝗟𝗮 𝗢𝗿𝗱𝗲𝗻 𝗱𝗲𝗹 𝗙é𝗻𝗶𝘅
FanfictionCONTINUACIÓN DEL LIBRO "LILY POTTER Y EL CÁLIZ DE FUEGO" [Se recomienda leerlo antes de esta] Sin su ancla, Lily Potter se las tendrá que arreglar sola para sobrevivir a un año más en Hogwarts. Ella, su hermano y sus amigos enfrentarán esta vez a...