RED.

F i n a l 🌙

Día de la boda

Estaba vestida de blanco, frente al espejo preguntándome si estaba bien lo que hacía, ni siquiera tenía claro a quien había invitado por mi parte a este horrible día, pero no me importaba.

Mi rostro solo demostraba seriedad y tristeza, aún estaba perdidamente enamorada del pelirrojo que alguna vez robo mi corazón de una manera tan indescriptible que daba miedo en pensarlo. Quería huir. Quería llorar, pero eso arruinaría el duro trabajo de la señora Hawk por preparar a su futura hija.

Todo en mi se estaba deteriorando. Todo se estaba volviendo fantasía, una simple ficción y mentira en mi mente cuando ví a Han en la ventana de mi habitación con su típica ropa holgada y de color negro. Parar varias veces y su imagen desapareció. Si. Me estaba volviendo loca. Estaba viendo su ilusión mientras mi mente jugaba a las escondidas que mi corazón roto.

— SuMin, ya es hora.

Jerri me dió el ramo de flores blancas y me ayudó a bajar las escaleras con mi gran vestido blanco. Aún no digería lo que estaba pasando.

Estaba viendo a Han por todos lados, entre las personas sentadas a los costados del altar, junto a la mesa del buffet, junto a Dietrich, justo frente a mi. Todo eso me hacía sentir mareada cuando caminaba hacia el altar y que Dietrich tomara mi mano para ayudarme a no caerme con los horribles tacones que había sido obligada a usar.

La ceremonia transcurrió conmigo siendo iluminada por la imágen de Han detrás de Dietrich, ya no sabía si era un ilusión de mi mente o simplemente estaba ahí, así que solo cerré los ojos y le dije: — Acepto.

Finalmente, Dietrich se inclinó frente a mi y depósito un beso sobre mis labios y se retiró tan rápido como se había acercado.

Y así di por perdido mi cordura y mi amor por el pelirrojo que tanto había amado.