Un salto al vacio

2.3K 107 14
                                    

Narra Alfred

Amaia estaba realmente preciosa esa noche, su pelo ondulado caía sobre sus hombros desnudos que intentaba cubrir con sus manos por el frío de la noche. La luz tenue de la farola nos iluminaba en una de las calles del Prat, nunca había visto un ángel o algo parecido pero esa noche me parecía estar cara a cara con uno.

Íbamos caminando juntos pero no demasiado cerca, habíamos aprendido en cierto modo de forma casi automática, que nuestra amistad tenía una línea marcada que ninguno de los dos podíamos atravesar.

Llevaba unas semanas observando a Amaia, no podía negar que esa chica había despertado en mi un gran curiosidad y ya ni hablar de la tensión que se palpaba en el ambiente cuando estábamos solos, como en este momento. He visto que no soy el único que ha puesto interés en la chica, Cepeda no ha perdido su tiempo y también ha lanzado sus fichas.

Estaba decidido a salir de mi duda.

- ¿A ti te gusta Cepeda? - Dije frenandome en seco mientras ella parecía repetir el mismo gesto-

En sus ojos vi la incredulidad ante mi pregunta pero yo no me iba a dar por vencido hasta obtener mi respuesta. Yo estoy bien como estoy pero no puedo permitir que se lie con Cepeda que es igual o peor que yo. No iba a permitir que un ángel cayera en el infierno, porque para que engañarnos Cepeda y yo somos compañeros de fiesta y ninguno nos quedamos con nada serio.

- No... bueno es guapo y simpático pero... ¿a qué viene esto ahora? - dice cruzandose de brazos delante de mi y mirándome fijamente a los ojos -

Le mantengo la mirada por unos segundos más y echo a caminar de nuevo recuperando mi templanza, no iba a permitir que viera en mi ni el más simple síntoma de que me importaba más de la cuenta su respuesta.

- Alfred - dice en un grito para llamarme pero yo sigo caminando tranquilo hasta que noto como me sujeta del hombro para girarme-

Quedamos frente a frente y sus ojos me decían que no me iba a dejar moverme hasta que le dijera todo lo que ella quería saber.

- ¿Por qué tanta curiosidad por mi vida amorosa? -Si quería jugar íbamos a jugar-

- Vamos a ver Amaia, no es ningún secreto el coqueteo que tenéis Cepeda y tú - dice con ironía intentando provocarla, había una tensión entre los dos que por lo visto íbamos a resolver esa misma noche-

- Yo no tengo ningún coqueteo con nadie y menos con Cepepeda, sólo somos amigos como tu y yo -dice desconcertada ante la actitud del chico que a su parecer está celoso-

- ¿No será que estas celoso Alfred? -dijo con una media sonrisa en su cara que al ver la del chico y como su gesto cambió parecía que había dado en el clavo-

Estaba dispuesto a encaminar mi marcha otra vez ¿yo celoso? venga ya, dije para mis adentros intentando que mis emociones no se reflejaran en mi cara. La chica me volvió a parar, ella tenía el control de la situación y yo parecía un niño a su merced.

- Contesta - dijo tanjante-

- Yo no estoy celoso Amaia, sólo que Cepeda no es la mejor opción para ligar - dijo aparentando una falsa seguridad-

- Mira que bien... la historia se repite - dijo casi en un susurro para si misma al recordar las palabras de Aitana el día del concierto -

- ¿Bueno podemos seguir? tu casa está a unas calles de aquí y es tarde - dijo zanjado la conversación-

Hicieron el camino que les faltaba en silencio, ninguno de los dos se había vuelto a dirigir la palabra después del interrogatorio de hace unos minutos. Llegaron al portal de la casa de Amaia, el se quedó esperando a que ella entrará para irse pero a ella le quedaba una pregunta para hacerle, ya que era la noche de las preguntas no iba a desperdiciar la oportunidad. Se gira quitando las llaves de la puerta para ver al chico a los ojos que estaba atento mirando cada uno de sus movimientos, se acercó un poco más a él y lo miró directamente a los ojos.

- ¿Te puedo hacer yo también una pregunta? - dijo mirando fijamente al chico que asintió con la cabeza-

- ¿ Por qué nunca has intentado ligar conmigo?

Alfred se quedó descolocado, está chica era una caja de sorpresas. Amaia no apartaba su mirada esperando la respuesta del él. El chico se pasaba las manos por el pelo intentando digerir la pregunta que lo había pillado por sorpresa.

- Porque... - dijo dudoso, pensando bien que iba a contestarle - no lo sé, creo que mereces que alguien mejor que yo se acerque a ti - dijo con total sinceridad-

No le dio tiempo a terminar la frase porque Amaia estaba decidida a cortar la tensión con la que habían cargado durante toda la noche, y sin miramientos se lanzó a besar al chico que llevaba 1 mes robandole el sueño.

_____________________________________________

Holaa ¿qué tal?, bueno espero que os este gustando la historia :) si tenéis alguna sugerencia o idea me la podéis dejar en los comentarios.

Me pasaba por aquí para daros las gracias a tod@s los que apoyais la historia dejando un comentario o una estrellita, me hace mucha ilusión leeros y ver que os gusta tanto como a mi.

Otro de los motivos por los que me paso por aquí es porque he hecho unos cambios en cuanto a la narración y creo que a partir de ahora lo haré así.

Gracias a todos y hasta la próxima :) que la música, el amor y las luces os acompañen siempre ✨

¿Y si fuera ella?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora