¿Y si fuera ella?

Es un buen chico

La inesperada llegada de Javiera desde Pamplona había dejado una tormenta que amenazaba con destruir todo a su paso.

Por un lado estaban Ángela y Javier a esperas de la regañina de su madre por no haberla puesto al tanto desde un principio de los líos de su hermana pequeña. Javiera comprendía que Ángela la encubriera en todo lo que hacía pero de Javi no se lo esperaba, de los 3 siempre había sido el más sensato y ella fue muy clara con las condiciones que le dió al chico para que su hermana viviera con él.

Amaia siempre había sido una niña dulce, risueña con un toque de rebeldía. Desde muy pequeña mostró sus aptitudes para la música y siempre destacó por ello más que por sus notas en el colegio. Gracias al consejo de una de sus profesoras, decidieron que lo mejor sería fomentar ese lado musical a meterla en clases particulares para que mejorase sus notas en el colegio. No era una niña de 10 en la escuela pero en el ámbito musical no tenía comparación alguna.

Desde muy pequeña siempre hizo lo que le dio la gana, no dejaba que nadie decidiera por ella. Su madre le daba la libertad que creía competente, adecuándola a su edad, pero la protección de su madre no pudo llegar hasta la noche de su dieciocho cumpleaños.

Después de ese incidente, Amaia se encerró en si misma, se volvió más hermética y comedida. Dejo de ser la chica risueña y despreocupada que quería comerse el mundo para ser como un animalillo asustado que huía de cualquier contacto. Fue un año duró pero poco a poco volvió a ser casi la misma.

Javiera estaba en alerta después de la llamada de Eugen, quien se suponía que era uno de los amigos de confianza. Era normal que quisiera proteger a su hija de todo mal, después de todo.

- ¿Y como dices que te llamas? -inquirió Javiera alzando una ceja y mirando al chico sin perder detalle-

-Alfred -carraspeó nervioso- Alfred García

Javi musitó algo por lo bajo pero Ángela enseguida lo contuvo.

-Comportate como un adulto racional Javier-

En el salón se hizo un silencio sepulcral mientras Javiera interrogaba al chico que acompañaba a su hija. Todo esto bajo la atenta mirada de Ángela, Eugen y Javier que tenía cara de pocos amigos.

Ángela y Amaia compartían miradas complices durante el interrogatorio de su madre a Alfred, las cosas estaban tensas y ambas sabían que lo mejor era guardar silencio pero Amaia no pudo soportarlo.

-Bueno mamá no creo que esto sea necesario -dijo tratando de que su madre dejara de focalizar toda sus atención sobre Alfred que estaba al borde de los nervios-

-Amaia hija -dijo seria y recolocándose en el sofá- no sería necesario si hubieses seguido las sencillas pautas que te di antes de salir de Pamplona y has quebrantado cada una de ellas sin miramientos-

-Mamá soy lo bastante mayor como para saber lo que hago... no necesito ni pautas ni niñeras -dijo mirando seria a su hermano que la retaba con la mirada-

Alfred no entendía nada y no podía sentirse más incomodo en aquel momento, estaba ante una disputa familiar y sentía que el allí sobraba. A pesar de no poder huir de allí como le gustaría se puso a analizar a las personas que estaban en ese salón supuso que así podría saber algo más de su familia pero no consiguió mucho más hasta que nuevamente se alzó la voz en ese salón más de lo normal.

- Amaia solo lo hago por tu bien -dijo con gesto triste- se que este ultimo año y medio ha sido difícil pero no quiero que otra vez alguien...-

No pudo terminar la frase, Amaia se levantó sería del sofá al borde de las lágrimas.

-No, no sigas por ahí -apretaba los puños con fuerza contra su cuerpo- esa historia esta enterrada y no creo que sea momento de sacarla a relucir -le dirigió una dura mirada a su madre alzando sus ojos que hace un rato miraban al suelo-

-Mamá déjalo -intervinieron Javi y Ángela-

- No Javier -dijo enfadada y al borde de las lágrimas- tiene que entender mi dolor también, mi miedo a que le vuelva a pasar otra vez lo mismo -dijo con algunas lágrimas derramadas por su cara y alzando la voz enfadada- es que mira como actúa -dijo mientras señalaba a su hija y a Alfred que la abrazaba tratando de reconfortarla, estaba siendo de todo menos una charla agradable-

- No lleva ni 3 meses en Barcelona y se escapa para irse de fiesta, no rinde en el conservatorio como debería y encima se toma confianzas con un chico que apenas conoce, como quiere que no me preocupe si es que ya ni conozco a mi hija -dijo recriminándola pero ella no la miraba, solo sollozaba abrazada a Alfred-

Ángela y Javier trataban de calmar a su madre, entendían su dolor pero no era ni el momento ni las formas. Javier era el primero en estar enfadado con Amaia pero no quería dar un espectáculo delante de Eugen y Alfred.

Mientras Eugen se limitaba a mirar la escena con una sonrisa victoriosa, acababa de lograr parte de su propósito, que la familia de Amaia odiara a Alfred y no porque el chico hubiese echo nada malo, sino porque trataba de aprovecharse de un doloroso recuerdo del pasado.

-Alfred por favor vámonos de aquí -dijo casi en tono de suplica mientras lloraba abrazada a él-

-Pero ¿cómo nos vamos a ir? se va a enfadar peor tu madre y no quiero que tengas más problemas por mi culpa, ya escuchaste todo, no me quieren cerca de ti -dijo triste viendo como ella no paraba de suplicarle que se la llevara-

En medio del revuelo que había formado tratando de calmar a Javiera, Alfred aprovechó para sacar a Amaia de la casa tal y como se lo había pedido, mientras Eugen veía como se escapaban de toda la situación. Cuando consiguió que le prestaran atención fue demasiado tarde, ya se habían ido.

-Joder -mascullo Javier dando un puñetazo a la mesa de café-

-Javier Alfred la quiere -dijo Ángela tratando de calmar lo ánimos, sabía por boca de su hermana lo buen chico que era y que no podía estar mejor acompañada-

-Hay que ir a buscarla -dijo una Javiera desesperada y culpable por las duras palabras que le había dicho a su hija, no tenía derecho a remover el pasado- yo -dijo mientras buscaba sus cosas desesperada para bajar a la calle-

-Mamá no es conveniente

-Ya voy yo a buscarla, quédate con Ángela -dijo Javier-

-Tranquilos ya voy yo -dijo Eugen desde la puerta preparado para salir- ese chico no me da buena espina

Y sin mas miramientos salió por la puerta no sin antes recibir una mirada fulminante por parte de Ángela. Si Alfred pensaba que podría salirse tan rápido con la suya la llevaba clara, aunque la vida le costase conseguiría que los Romero Arbizu lo vieran como al propio demonio. Llevaba toda su vida esperando la oportunidad para conquistar a Amaia y no iba a permitir que el catalán cambiara sus planes.

No esta vez.

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Primero que nada hola de nuevo :) se que no estáis acostumbrados a leerme tan seguido pero me apetecía recompensaros estos días que he tardado más de lo normal en subir capítulo.

Sólo quería deciros que:

1. Tengo muchos lectores en la sombra que por vergüenza o bien porque están en su cuenta personal no me dejan su comentario o no le dan a la estrellita por eso tenía pensado abrirme un curioustcat para que me podáis preguntar y dejar vuestras teorías de forma anónima así nos conocemos un poquito mas y podemos interactuar :). He visto que muchas personas en wattpad lo hacen y está funcionando bien. https://curiouscat.me/man_trombone

2. Pensaba abrirme un Twitter específico para está historia ya que por el mio personal me da algo de vergüenza (es otra idea que he pillado de por ahi) así os puedo dejar cuando subo, encuentas para elegir la temática del capítulo siguiente, etc. https://twitter.com/man_trombone

Bueno ya nos os molesto más 😊 dejadme que os parece las ideas en los comentario y si os gusta no olvidéis darle a la estrellita para yo saber que os ha gustado.

Mil dieciséis gracias 😍❤✨💞💡

Pd: Siento si no os llega la notificación pero es que no se que tiene wattpad :(