XIX

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Alexander

—Alexander~ —. De nuevo esa voz, cerré mis puños y agaché la cabeza.

—Ya basta, estoy soñando... Deja de aparecer en mis sueños —. Sentí una presión en mi espalda, Sarah me abrazaba por la espalda.

—Que poco me quieres Alexander, ¿tanto te molesto en tus sueños? —. Me mordí el labio inferior.

—¡E-Eso es mentira! Yo sí te quiero pe-pero... —. No supe que más decir, y mejor dicho... No quise decirlo.

—¿Estoy muerta? Rayos, ¿por qué será? —. Desvié la mirada — Oh cierto... Tú me mataste, casi se me olvida —. Susurró a mi oído.

La separé de mí y me volteé para verla.

—¡Sarah jamás sería así conmig—. Me interrumpió.

—¿Estás seguro? —. Elevé una ceja, no entendí a que se refería, era obvio que estaba seguro.

Sarah fue una chica dulce y tierna, que me ayudaba a seguir hacia adelante como Alan, alguien así jamás me haría sentir este dolor profundo en el pecho todas las noches, recordándome una y otra vez aquel suceso que trato de olvidar.

—¿Cómo te sentirías tú, Alexander si...?—.

—¿Si qué?—.

—Si después de apoyar a una persona, darle todo el cariño que puedas y escuchar sus problemas... Un día te ataque por las espaldas, te corte una pierna y te extrangule hasta matarte —. Cerré los ojos, mi pulso fallaba.

— Y-Yo no... —. No pude responder, un nudo en la garganta me lo impidió, sentí mi mirada nublarse por las lágrimas.

—¿¡Cómo te sentirías!? ¿¡EH!? —. No podía.

No puedo más, no lo soporto; esa imagen no deja de repetirse en mi cabeza.

Caí al suelo, mis piernas me fallaron.

—¡Dímelo Alexander!—.

—¡BASTA!—. Dije entre mi llanto, mi voz era quebrada.

Me llevé las manos a la cabeza, aquella imagen...

"—¿Q-Qué... He hecho? —".

No, sentía que me estaba volviendo loco... Cada vez mi cordura flaqueaba más.

"—¡Sarah! ¡S-Sarah no p-por favor! —."

¿De qué me sirve vivir? Estoy tan quebrado, debería morir y dejar de hacer daño a ayá donde vaya.

"— V-Vive, por favor... Perdóname —."

...

—¡Alexander! —. Me levanté de golpe sentándome en mi cama. Mi respiración era agitada, sentía todo mi cuerpo sudado... De nuevo la misma pesadilla.

Notaba las lágrimas secas en mis mejillas.

Miré a mi alrededor y vi a Sophie sentada en la cama a mi lado, estaba en pijama y me miraba muy preocupada.

—Alex, cariño —. Susurró para luego limpiar las lágrimas secas de mi mejilla con su pulgar.

Yo la miré sintiendo un vacío completo en mi interior.

—Sophie... ¿Si te pido cualquier cosa la harías?—. Pregunté sintiendo como de nuevo mi ojo volvía a soltar pequeñas lágrimas.

✖El Amor No Existe✖ (BL) (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora