CAPITULO 13

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Sara

-Hermano. -Abro despacio la puerta de su habitación, aunque es de día las cortinas están cerradas, y el lugar en penumbras. Camino hasta ubicarlo sentado a un costado de la cama, sobre el mosaico. Su cabeza sumergida en las rodillas, abrazándose las piernas.

Mi corazón se oprime, no puedo ni imaginar el dolor que está atravesando, mi mano se detiene a escasos centímetros de su hombro, por fin me decido y la apoyo, haciendo una leve presión.

-Quiero estar solo. -Su voz agónica se escucha como un lamento.

Me niego a abandonarlo al corroborar su estado de ánimo. No me muevo ni un ápice.

-¿Por qué lo hizo? -Pregunta levantando un poco la cabeza.

-No lo sé, parece que disfruta haciéndonos daño.

-Ella no lo merecía.

-No, no lo merecía. -Acaricio sus cabellos.

-Julián es el culpable. -Se pone de pie, cerrando las manos en puño.

-¿Qué? -Lo imito, colocándome a su lado.

-Ha sido por él, Ofelia arriesgo su vida por salvarlo.

-Un momento, no me agrada el cazador, pero no ha sido él quién mató a Ofelia.

-Como si lo fuera, maldigo la hora en que lo capturé.

-Darien, estás enfocando tu enojo en la persona equivocada.

-Madre tiene razón, soy débil, pero eso va a cambiar.

-¿A qué te refieres? -No me gusta por donde se dirige la conversación.

-La muerte de Ofelia no quedará impune.

-Explícate.

-Iré por el cazador, sacaré su corazón y lo comeré mientras todavía palpite en mis manos.

El odio reflejado en su mirada me asusta, no es el Darien que conozco, es como si hubiera sido reemplazado por un ente maligno.

-Hermano, no defiendo al cazador, pero Will me contó que cuando supo que Ofelia estaba involucrada en su escape, se negó a acompañarlos.

-¿Qué te pasa? Ahora estás a su favor. -Me grita.

-No te permito que me hables en ese tono, estoy contigo.

-Entonces ayúdame a deshacerme de Julián Evanson, quiero su sangre.

-Eso no regresará a Ofelia.

-No me importa. -Las palabras salieron guturales, jamás lo había visto en estas condiciones, intenté acercarme pero me rechazó.

-Haré esto, con o sin ti. -Sus ojos llenos de veneno, se enrojecieron, mamá logró su cometido, lo contaminó con maldad, el dolor se convirtió en venganza., desquebrajó en él, lo que quedaba de humanidad. Darien se retiró advirtiéndome con la mirada que no lo siguiera.

Confundida, asimilando lo ocurrido, me senté en la cama, no lo comprendo, debería estar molesto con madre pero por el contrario el cazador se convirtió en el objeto de su ira.

-Sara. -La puerta se abrió despacio entrando Sabanna, es mi mano derecha, y se puede decir, que mi mejor amiga.

-Debo hacer algo, no puedo perderlo, no a él.

-Tú sabes como proceder._Advierte frunciendo el ceño.

-Soy insignificante ante su poder. _Refiriéndome a la reina.

CAZADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora