Te mueves tan rápido,
siempre tan fugaz y veloz.
Con tus prudentes arranques de seducción,
y tu roce de altanería
que le da vida a tu alma.Estás seco.
Pero muy dentro de ti
finges arder en llamas,
finges que nada te mata,
que todo pasa.Pero cariño,
yo sé que estás roto.
Recuerda que soy tú,
recuerda que yo sí logro entenderte
y sin analizar de mas,
puedo comprender que me necesitas justo más de lo que yo a ti lo hago.Crees que ya tenías todo pensado, cuando en realidad
la improvisación es tu mayor atributo.Tus labios intentan dañarme
escupiendo verdades marginales,
fingiendo saber lo que me duele, queriendo ocultar que tu alma está más quebrada que la mía.Como el mar,
tan feroz, tan misterioso, tan tenaz.Como una ola,
veloz, helada y clara.Profundo.
Dispara profundo, mi amor,
que solo nosotros sabemo matarnos
y traernos a la vida de nuevo.Ya no hablemos más.
Tan solo tocame con tus rimas,
seduceme con tu mirada,
enamorame con tu sonrisa.Complicados como el mar.
Complejos como el océano.
Extraños como su contenido.Somos fugaces,
eternos,
efímeros,
infinitos.
Podemos serlo todo.
Solo vamos a dejarnos llevar como lo hacen las olas de mar.Deja que nuestros latidos se hagan uno solo.
Que nuestra respiración se combine,
que nuestra saliva pegue nuestros cachos rotos con besos y caricias.
ESTÁS LEYENDO
Al límite de mis dolencias
PoetrySufro de tal forma que puedo expresarlo de un modo exagerado en palabras con sonido poético y melancólico, aunque el motivo sea banal y bruto.