amores de w...pad.

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Dejé de ser misteriosa ante tus ojos.
Me mostré tal cual era, tan inestable que al final no sabías con quien realmente tratabas.
Dejé que me besaras y enamoraras con tus poemas absurdos y canciones ridículas. Tomé cada parte de tu ser para quebrarlo y devorarlo. Me alimento de almas, de cuerpos inocentes necesitados de amor.
Estoy hueca.
No sé sentir.
Me da pavor pensar en amar.
Pero esa es mi trampa. Mostrarme tal cual soy para atraerte. Y cuando te tengo, ya no serás capaz de olvidarme nunca mas. Me tendrás como un ser maligno, o un ángel caído. Pero me tendrás presente, eso tenlo por seguro.
Y mientras tú sufres agonizante de dolor.
Yo me voy de vacaciones, dejando descansar al corazón.
Volviendo a la individualidad con la que nací y posiblemente moriré.
Me dedico a disfrutar de los sentimientos que devoré.
Posteriormente cuando vuelva a estar hambrienta, saldré de casería y jugaré con uno o dos corazones más.
Así ha sido desde que yo fui a la que devoraron y marchitaron. Desde que me usaron aprendí a usar.
No puedo decir que solo una persona fue la culpable, pues fueron varias que lograron engañarme. A todas las amé y di todo de mi. No me valoraron, o no lo hicieron lo suficiente.
Fui un ser frágil como tú.
Soy frágil, quizás más que tú.
Pero la rigidez no me sabe dejar, y tampoco quiero que lo haga. Me gusta esto. Me gusta dejar.
Tengo una mente extraña.
Para muchos anciana y amargada.
Para otros inmadura y aniñada.
Lo que no saben es que soy ambas.
Y que yo decido que cara mostrar.
No es hipocresía. Es estrategia.
¿Me ves sufriendo?
¿Me ves llorando?
No.
Todo es parte de.
Parte del juego, del engaño.
No vengas a esta plataforma buscando amor sincero porque aquí todos sacan su cáncer humanizado.
Aquí siendo todos anónimos, somos asesinos seriales. Todos matamos ilusiones con palabras.
No te enamores de un ser que hayas conocido aquí.
No lo hagas.
Tomalo como advertencia, porque no te ayudaré cuando vengas agonizando pidiendo y suplicando comprensión.
Yo no estoy aquí para curar.
A mi también me gusta devorar.

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(pd. esto lo escribí hace mucho, pero no lo había subido por la pereza de echarle limón a heridas recientes. Ahora sólo queda como un escrito más, porque ya todo pasó y en realidad es un buen consejo)


Al límite de mis dolenciasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora