que un día despiertes con ganas de dormir es normal,
que hayan veces en las que llorar te apetezca más que reír es normal,
es normal estar triste sin razón alguna, así como es normal reír a carcajadas aunque nadie haya contado un chiste.
es normal que sueñe con tus ojos, aunque aborrezca cuando me miras, pues cuando los sueño me siento amada, pero cuando me miras me doy cuenta que de amor no hay ni una pizca.
es doloroso saber que esto es normal.
es normal que siempre hayan personas mejores que tú en muchos aspectos.
también es normal que tú seas mejor que muchos otros y así sucesivamente.
es normal escuchar música aunque estés dormido, o escuchar ruidos aunque estés viajando entre sueños.
la curva de tus errores son normales cuando cuestionas tu actitud y decisiones.
frenar de pronto y querer volver a iniciar es normal, porque no hay límites de jugada, ni labios que no merezcan ser besados.
la normalidad de nuestra errónea existencia es espontánea en cuanto a cómo la vivimos y manejamos.
fumar sabiendo que hace mal, es normal.
así como es normal detestar el tabaco.
es normal la doble moral, la hipocresía, la arrogancia, la poca modestia y los malos modales.
es normal ser respetuoso y educado, amoroso y amargo.
el desequilibrio del equilibrio está siendo manipulado por la diferencia de emociones, sin embargo tu escondes tus canciones.
es normal tener miedo.
tu belleza es normal cuando es vista desde el ángulo de las mentiras, así como es normal que todo sea distinta menos los días y las horas.
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Al límite de mis dolencias
PoesíaSufro de tal forma que puedo expresarlo de un modo exagerado en palabras con sonido poético y melancólico, aunque el motivo sea banal y bruto.
