Luego de eso decidí ir a dormir ya que mañana iría a conocer un poco más de Seúl.
Día siguiente
Me desperté gracias a los puñeteros rayos del sol que caían desde mi ventana, a veces pensaba que solo quería dormir y que ojala nunca despertara, pero se que esto no va a pasar por obvias razones. Después de que unos 10 minutos aproximadamente me levanté de mi cama y realice mi rutina diaria. Me arreglé y me coloque esto.
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Ya que era tarde (11:30) no quería hacer mi desayuno, así que decidí desayunar en un restaurante que quedaba muy cerca.
Salí de mi casa, y en el momento en que salí me encontré con una gran sorpresa.
–¿Hola? –dije dándome cuenta de que Namjoon estaba apunto de tocar la puerta, pero luego se retrocedió por el susto.
–Hola.
–¿Qué hacías aquí Namjoon?
–Hmm... Estaba esperándote.
–¿Por qué?
–Porque quería invitarte a desayunar TN –dijo sonriente
–Ok...
–¿A dónde ibas?
–A desayunar y después caminar por Seúl.
¿Te acompaño?
–No, gracias. Estoy bien.
–¿Estás segura?
–Si –hablé mientras sonreía. Toque delicadamente la punta de su nariz para que se diera cuenta de que si estaba bien.
–¿Enserio?
–¡Qué si!
–Esta bien. Si pasa algo solo llámame.
–Te recuerdo que no tengo tu número.
–Oh, cierto. Deja y te digo el número –mientras saque mi celular para que escribiera su número.
–Bueno, gracias –dije luego de que me escribió su número.
–No hay de que, llámame luego para poder agregarte.
–Esta bien. Adiós, cuídate.
–Igual.
Luego de haberme despedido de Namjoon salí a desayunar. Entré al restaurante y espere a que un mesero se acercara.
–Buenos días señorita. ¿Qué desea?
–Unos waffles con fresas, por favor.
–Esta bien.
Esperaba a que trajeran mi comida, mientras esperaba encendí mi celular y hable con mamá, no hablamos mucho ya que me dijo que estaba trabajando, entonces saque los audífonos de mi bolso y dentro de unos 2 minutos sentí que alguien me observaba así que mire a mi alrededor y nadie lo hacia, entonces decidí ignorarlo, pasaron 2 minutos y nuevamente sentí esa mirada, mire a mi alrededor de nuevo y como lo imaginaba, no había nada, en ese instante llegó el mesero con mi comida, comí, pague y salí del restaurante.
Cuando estaba por salir del restaurante sentí esa mirada una y otra vez, así que aceleré mis pasos al caminar y para mi gran suerte tropecé con alguien.
–Fíjate por donde caminas hermosa –dijo una voz masculina ¿Sexy?
–L-Lo siento –dije nerviosa al chico mientras hacia reverencias una y otra vez.
–No te preocupes princesa –dijo aquel chico regalándome una sonrisa de oreja a oreja.
–Esta bien, gracias –deje de hacer aquellas reverencias y volteé para seguir mi camino, pero el chico agarró mi muñeca.
–¿Cuál es tu nombre?
–¿Para qué lo quieres saber?
–Porque ayer te vi con un amigo mio y quiero saber qué eres de el ya que los vi muy unidos.
–¿Cuál es su nombre?
–Namjoon.
–Oh si... Pero solo somos amigos, no confundas las cosas.
–Esta bien princesa –habló dándome una sonrisa–. ¿Ahora me dirás cuál es tu nombre?
