Nuestro Destino | Cornelio Vega Jr

04 |¿Nos ibamos a besar?

Andrea

Ahora me encontraba en el sillón con Cornelio.

-Gracias, Vega- dije.

-No es nada-

-No, neta, gracias, por todo, por invitarme a comer, por cubrirme de la lluvia, por curarme la mano, por hacerme de cenar, por to...- me interrumpió.

-Shhh- dijo mientras ponía su dedo índice en mi boca, justo como hace rato.

Me dedicó una sonrisa e hizo que una corriente me recorriera todo el cuerpo, entonces nos estabamos mirando a los ojos, acercándonos lentamente.

¿Nos ibamos a besar?

Un trueno hizo que pegara un brinco y ambos nos separamos, ahora no era lluvia, era tormenta electrica.

Le tengo pánico a los truenos y rayos.

-Creo que es tarde, mejor voy a dormir- dije incómoda.

-Ve tú si quieres, estaré otro rato acá-

-Va-

Me fuí a mi cuarto, pero no podía dormir, tenía insomnio.

Ota vez los malditos truenos, ¿por qué le tengo miedo a ésto?

Pegué otro grito parecido al de hace rato, de verdad me daba miedo.

-¡¡Vegaaaaaaa!!-

Cornelio en un segundo ya estaba en la puerta.

-¿¿Qué pasa??-

-Bueno es qué...

-¿Te da miedo la tormen...

-¿Te quedas conmigo?

Cornelio

La pregunta de Andrea me sorprendió, pero no podía desaprovechar la oportunidad, de verdad me gustaba estar con ésta mujer.

Me acerqué al borde de la cama.

-¿Segura que quieres que me quede?- dije.

-Sí, Vega-

-Pues me quedo- le dí una sonrisa

-Ven- me dijo mientras palmeaba la cama, como diciendo que me acostara junto a ella.

Y ahí estabamos, acostados en la cama ambos mirando el techo.

Había un silencio, para nada incómodo; pero aún así decidí romperlo.

-Y, ¿viniste a estudiar?- dije

-Sí, estaré becada, voy a estudiar fisioterapia- explicó

-¿Entonces te quedarás aquí toda la carrera?-

-Y tal vez para siempre-

Ambos reímos.

Un trueno hizo retumbar la habitación, y Andrea se asusutó, y me tomó del brazo.

Se soltó inmediatamente y me miró.

-Perdón- dijo un poco apenada

-Tranquila plebe, no pasa nada. La miré y recosté su cabeza en mi pecho.-

-Y perdón por hacer tantas bromas eh- dije riendo

-Es tu esencia-

Nos quedamos en silencio, ambos fuimos cerrando los ojos, y nos quedamos dormidos.

× × ×

Andrea

Un ruido impidió que siguiera durmiemdo.