Déjame amarte [P#2]

Enyell

Enyell

Lunes de nuevo.... ¡NOOOO!

Decidí apagar el celular estos días, porque se que cuando Sebastian le cuente a Alejandro, él le contará a Catty y no quiero que me esté preguntando horas de horas de horas de mi estado emocional.

Pero ya tenía que encender el celular, hoy tenía que trabajar por ende no podía tener el celular apagado.

Dónde lo encendí vi que tenía cómo 15 llamadas de Catty, 35 mensajes de Catty y una llamada de....¿Sebastian? y tenía un mensaje de voz.

Llamando

-Usted tiene un nuevo mensaje hablado, para escuchar sus nuevos mensajes hablados marque el 1.

(1)

-Enyell yo.... Nada más quería saber si llegaste bien, o si estas bien, si necesitas algo me llamas, esperaré tu llamada.

-no tiene más mensajes.

Llamada finalizada.

...

-Se preocupó por mi- dije en voz alta.

-Se preocupó por mi, se preocupó por mi, se preocupó- lo decía cantando, mientras bailaba y daba unos cuántos saltitos.

-¿Enyell estás bien?- preguntó mi mamá detrás de la puerta.

-Si, yo, creo que he sido flechada por cupido de nuevo- dije mientras me tiraba a la cama de nuevo.

-Bueno flechada por cupido, alistese que tiene que ir a la U, ¿a que hora entra?- dijo ella.

-11am y son las 8am tengo tiempo de sobra...

10:15am

Okay, tiempo de sobra no tenía, ya voy tarde de nuevo...

Termine mi desayuno lo más rápido que pude, subí a lavarme los dientes y mientras iba bajando las escaleras de mi casa, iba pidiendo el Uber, ya que mi auto me lo dan hasta mañana, que en realidad esta listo cómo hace dos días por ahí, pero no he podido ir a recoger a mi bebé.

Pero al salir me encontré a Sebastian apoyado en su moto, ¡Dios! porque tenía que ser tan lindo.

-¿Qué haces aquí?- dije con voz fría, tenía que hacerme la difícil.

-Vine por ti, para ir a la Universidad, sé que no has ido por tu carro, y fue mi culpa que este en el taller, entonces ¿qué dices me dejas llevarte?- dijo mientras me acariciaba la mejilla.

«Resiste Enyell, resiste»

-Eres muy amable, pero no gracias, ya llegó mi uber- dije y me dirigí hacia el auto.

-Hey campeón- le dije.

-Dime- dijo él.

-Buen inició, pero necesitas más que eso para convencerme- dije mientras le guiñaba un ojo y me subía al auto.

«Bien jugado Enyell»

A los 45 minutos, llegamos a la universidad.

Empecé a caminar hacía la facultad cuando alguien me tomó con mucha dulzura el brazo.

-¿Hey? ¿Estudias aquí?- dijo un muchacho con una media sonrisa.

Era muy guapo, ojos azules, pelo café, con una sonrisa hermosa, tenía buen cuerpo, era muy alto.

-No, es que me echaron de mi casa, entonces vengo a dormir aquí- dije con ironía...- obvio que estudio le aquí- le dije un poco fuerte.

-Disculpa es que es mi primer día y estoy muy nervioso, me llamo Nate ¿y tú eres?- dijo, se ve que es todo tierno...

-Me llamo Enyell- dije.

-¡Wow! Tienes nombre de ángel, ¿te puedo decir ángel?- dijo él

-Ehh si claro esta bien, ¿para que facultad va?- dije.

-Medicina.

-Ah genial, vamos para la misma facultad, ven- le dije mientras entramos a la facultad.

Llegamos y fuimos a la dirección, a Nate le dieron su horario, compartimos una que otra clase, de hecho la primer clase nos toca juntos, que es de la profesora "yo soy todo primeros auxilios".

Llegamos a la clase y ya Catty estaba ahí y habían dos campos solos a la par de ella.

-Hola Catty- dije tomando asiento a la par de ella.

-Se puede saber porque rayos no ha contestado mis llamadas..... Uy y él ¿quien es?- dijo al darse cuenta de la presencia de Nate.

-Soy Nate, mucho gusto- dijo mientras se le acercaba y la saludaba.

-Emmm.... Hola soy Catty.

Nate se sentó a la par mía y al momento llegó la profesora.

-¿De dónde lo sacaste?, esta muy guapo- me susurro Catty al oído.

-llegó solo, y si lo sé- dije en susurrándole.

-¿Algo que quieran compartir a la clase? Enyell usted que es buena inventando historias- dijo la bruja esa, yo sólo la volví a ver con cara de pocos amigos

Catty se estalló de risa, al recordar el porque ella me decía eso, Nate nos veía raro, se notaba que no entendía que estaba pasando.

-En el almuerzo te explicó- le dije a Nate.

El sólo asintió y siguió haciendo apuntes en su cuaderno.

Hora de almuerzo.

Todos nos dirigimos al comedor, tenía la esperanza de ver a Sebas ahí cómo siempre, pero al llegar tope con la suerte de que no estaba ahí.

Fuimos a hacer fila al comedor, y luego nos fuimos a sentar... Ni Sebas ni Alejandro habían llegado, ya estaba siendo muy extraño.

«A poco te hace falta Sebas..... A quien engaño si me hace falta» pensé

-Ya me vas a contar, ¿qué fue lo que paso con la profesora?- dijo Nate sacandome de mis pensamientos.

Solté el aire que tenía en mis pulmones y me puse a contarle toda la historia con la bruja esa.

-JAJAJAJAJAJA, se fue y le sacó el dedo del centro, ya me cayó bien- dijo Nate.

-Recuerde que yo lo adopte cómo parte de este crew, no me haga despedirlo al primer día- dije.

Iba a seguir hablando pero unas manos taparon mis ojos.

-Quien quiera que seas, si no me quitas tus sucias manos de encima, olvidate de tener hijos- dijo Catty.

«A las dos nos taparon los ojos, sólo dos personas pueden ser los culpables»

-Sebas ¿qué haces?- dije.

-Te prometí algo, y lo cumpliré hermosa- dijo él.

Me quitó sus manos de mis ojos y lo que vi fue hermoso.... Había un ramo de rosas blancas, pero con una rosa roja en el centro y a la par habían.... ¿Papas fritas? Con una nota que decía.

"Sé tú delirio por ellas, te gustaran más que las rosas lo sé, pero un detalle es un detalle, cada vez más cerca de poder estar junto a ti.... Aún te amo".

No lo pude evitar, y me tiré a los brazos de él y lo abrace cómo hace mucho tiempo no lo hacia.

-Fueron las papas ¿verdad?- dijo mientras me abrazaba de una manera tan tierna pero fuerte a la vez.

-Fue todo, sigue así, y de verdad si estarás muy cerca- dije

- ujumm- dijo alguien.... Cierto Nate estaba ahí.

-Lo siento, chicos- dije para ver a Catty y Ale... El también le había traído flores y estaban viendo quien tenía el esófago más largo.

-Tórtolos- dije y se separaron inmediatamente... - Cómo decía chicos él es Nate, Nate ellos son Sebastian y Alejandro.

-Hola- dijeron Ale y Sebas en unísono.

Nate, solo les levantó un poco la ceja y siguió en lo suyo, algo me dice que estos no se van a llevar bien.