La hija del diablo.

Capitulo 5

Cuando grité eso los 15 imbéciles más grandes que un armario empotrado me apuntaron con las armas. Si supieran realmente que a mí esto no me genera miedo ninguno.

  -Eh subnormales bajar las armas antes de que os mate yo mismo. Dijo Connor mirando a sus hombres.

Lentamente bajaron todos las armas y se quedaron mirándome como si tuviera 3 ojos o una teta fuera. He de reconocer que mire para abajo para ver si era verdad que alomejor tenía una teta fuera.

   -Buenos y esta zorrita quien coño es? Dijo uno de lo hombres más altos con el pelo largo oscuro como la noche.

   -Eh perdona como me has llamado simio sin cerebro? - conteste de muy mala ostia.

   -Eh pedazo de puta ninguna mujer se atreve a llamarme a mi ninguna cosa no seas tú la primera que vas a acabar muy mal me importa una mierda que seas mujer. Lo dijo acercandose a mí peligrosamente con claras intenciones de pegar un bofetón y dejarme de pegatina en el suelo.

Me enfureci más todavía quien se creía está gilipollas para insultarme y amenazarme en mi propia casa se había acercado a mí hasta tenerlo casi pegado.

   -Ooo alomejor eres una zorrita que quiere que le den lo suyo y le enseñé a respetar lo que es un hombre. -Subio la mano para tocarme el culo y pegarme a su cuerpo.

En reacción le cogí la mano se la retorci lo más que pude usando su fuerza en su contra le di un puñetazo en el estómago para dejarlo sin aire me di la vuelta y le metí un codazo en la nariz y para que dejara de molestar le pillizque un nervio del hombro haciendo que cayera desplomado a mi lado.
Me acerque a el y le dije a él que estaba inconsciente y a los demas.

   -El próximo que se atreve a intentar humillarme se las verá con la misma suerte .

   -Pero que coño Lis que le has echo? Lo has matado? Me dijo con cara de enfado.

  -Tranquilo machote está bien solo le he pellizcado un nervio para que dejara de molestar se despertara en una media hora, traerle una coca cola y algo con sal se levantara con la tensión baja. Y ahora me explicas que coño es esto y que hacen todos estos en mi puta casa sin mi permiso? - le dije gritando porque ya me estaba empezando a hartar.

  -Joder Doc lo siento yo es que no podíamos irnos al club Roise no está bien del todo teníamos que hacer misa para hablar entre nosotros.

  -Me da igual -le interrumpi- es mi casa no tienes ningún derecho a invadirla y meteros aquí a acabar con ella mi vecina casi llama a la policía sería genial que os encuentre aquí con dos heridos de bala verdad?

   -Vale lo siento por esto y por lo de Dark se pone subnormal a veces no es por quitarle culpa pero no tuvo que haberte dicho nada me encargaré de el cuando se despierte y te lo vuelto a decir mi club te debe más de una. Me dijo mirándome fijando al igual que los otros bigardos.

   -Mira como sea ahora por favor los que no estén heridos y a mi cargo que se vayan y llevaros al imbécil que está inconsciente de mi casa antes de que lo mate de verdad. Dije sin dejar de mirarlos para que vieran que no me daban ningún miedo.

   -Bien tíos doy la misa por acabada ahora largo y llevaros al imbécil de Dark hablarle con el después. Todos empezaron a salir y dos cogieron al idiota para sacarlo de mi casa.

Me di la vuelta y fui hasta la cocina a por mis pastillas tengo problemas en los ovarios y por eso toma la píldora aunque ahora mismo no la necesite para nada hace demasiado de mi último polvo.

   -Oye -Interrumpe Connor mis pensamientos sobre sexo y mi abstinencia.

   -Que? -Le digo cabreada .

   -Lo siento no pensé en lo que podría pasar tenia que informar a mí hombres para que se cuiden no quería crearte más problemas. -Dijo con algo de culpa o algo si pude identificar en su mirada.

  -Dejalo vale solo no me metas en lios.

   -Tranquila lo último que quiero es que te pase algo has sido demasiado buena desde aparecimos por tu puerta. -Dijo acercándose a mí peligrosamente.

Me cogió por la cintura y me acerco a él para pegarme más intento darme un beso pero me quite no puedo dejar que esto pase.

   -Lo siento machote pero ya te dije que yo no soy tu tipo. Tengo que revisaros me sueltas por favor.

Me solté y sali de la cocina con el corazón en la boca no se qué tiene ese hombre que me pone a mil por hora. Claro que lo hubiera dejado besarme y otras cosas más pero no me podía permitir nada así hace mucho que acepte que mi vida sería así.