Las fauces extendidas del lobo rugieron, dientes capaces de desgarrar a más que una vulpeja se asomaron demandando autoridad. La mano de Isaac voló en dirección a mis ojos demasiado tarde y el intento vano de que no viera solo despertó mi aterrada curiosidad. De un manotazo aparte su palma, creí estar hiperventilando aunque los sentidos tan nítidos solo afirmaban el comienzo de la exudación en mi frente.
El lobo con su pelaje más negro que las alas de un cuervo y sus patas alargadas se acercaron en mi dirección.
—¿Darren? — Cuestioné recordando lo que dijo Ilan sobre la parte lobuna. El animal parecía querer decirme algo, pero solamente dio un leve asentimiento.
Me acerque con lentitud bajando la cabeza ante el cánido, mentiría si dijera que no estaba aterrada, el animal medía más que yo incluso estando de pie, los ojos ambarinos solo agregaban ese toque lúgubre que presentaba la forma humana del lobo en cuestión y solo trataba de no mojar mis bragas en ese momento, y cuando digo mojar no lo digo de manera sexual, sino de manera cobarde.Cuando estuve unos centímetros por debajo del animal lo acaricié. El hocico de Darren se restregó contra mí nuca y disfrute la sensación suave de su pecho.
Me tranquilice.Traté de tener la mente abierta y aceptar lo que sucedía, incluso dejé que olisqueara mi cuello y humedeciera mi barbilla con su nariz mojada.
—Esperaba que estuvieras tumbada en el suelo hecha bolita como un armadillo resguardándose en su coraza. —dijo Janick recargando su peso sobre los muros de la casa y con uno de sus pies anclados al piso.
—Esa etapa ya la pasé. — respondí levantando mis manos vendadas en su dirección.
—Así que esa es la razón por la cual no tomaré mas café por las mañanas. — asentí sin separarme de Darren aunque parecía buen momento para hacerlo.
Se había oscurecido, la noche refrescaba, pero el calor de su enorme cuerpo evitaba que pasará más frío del necesario.
Me adentré en la casa esperando a que Ilan regresara a su forma normal para platicar a fondo sobre el tema.
—¿A dónde va su parte humana cuando el lobo toma el control? —Ilan sonrió. Avanzo hasta la alacena y saco avena para luego comenzar a prepararla a fuego lento.—Nunca se va, simplemente pasa a ser la mentalidad del lobo, y cuando yo soy humano, Darren es mi mente. —Asentí, pero aún tenía preguntas.
La mente y el alma eran distintas, de eso estaba segura, pero si su mate es su alma, ¿acaso ellos poseían una en ese momento?
—¿tienen alma?La cabeza de Janick se levantó con velocidad al escuchar mi pregunta, pero luego lo confirmó:
—Algo así, tenemos un alma, pero a la mitad y solo nuestra mate la puede complementar.Entendía eso, pero como saber quién te complementa.
—ujumh, pero ¿cómo sabes que es tu mate? ¿lo eliges tú?Fue el turno de Isaac para responder.
— Nunca sabes cuándo la encontrarás o en qué situación, pero cuando llega percibes un olor que nadie más puede identificar, un aroma placentero que despierta tu lobo interior intensificando el lado posesivo hasta que te reúnes con ella. Después no la puedes dejar.
—¿Y si no la encuentras?
—si no la encuentras, ha muerto, o te ha rechazado, simplemente mueres. Aunque si no la encuentras tú muerte es más prolongada que las demás y un poco menos dolorosa.

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SOULMATE
Hombres LoboATENCIÓN: Está historia modificó sus primeros 17 capítulos el 21 de enero del 2019 para el correcto seguimiento de su curso. Sí ya la habías leído te recomiendo leer desde el inicio nuevamente para entender completamente la historia. Las actualizac...