Prólogo

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Nunca podría describir lo emocionada que me encontraba en ese momento; Hillary y Tom; los mejores amigos de mi infancia hasta ahora,  me llevarían a una fiesta de un chico del curso superior, una de esas fiestas de los de 6to curso.
Y ¡no solo eso!, en esa fiesta asistiría "Ian", lo sé, su reputación no era la de un chico excepcional, él si bien, era excelente en lo académico, en lo personal era <Un mujeriego> pero no encontraba eso como un obstáculo,  tal vez yo podría cambiarlo, ¿quién sabe?, podría enamorarlo y quedar con él, siendo la feliz afortunada...

-¡Vaya!- escuche una voz por sobre mis hombros, muy cerca del lóbulo de mi oreja.
-¿Quien...? ¡Oh, Ian! -me había sorprendido bastante.  Si, si, semanas atrás había coqueteado conmigo,  y me había tratado de la mejor manera,  invitándome a caminar con él, a hacer ejercicio,  a tomar helado; Realmente estaba interesado en mí, o al menos eso suponía. 
-¡oh, Melody!- dijo, imitando el sonido de mi voz, no lo hacía por maldad, más bien él era así. Yo me limité a soltar una tonta y pequeña sonrisa golpeándolo suavemente en la nariz, pues todavía su cara se encontraba sobre mis hombros
-¡Eso dolió!- dijo,  sobando su nariz.
-Te lo merecías...-encarnando una ceja.
-A lo que vine, ¿Irás a la fiesta que organiza Theo?-preguntó. 
-¿Theo? No sabía que él lo organizaba...-dije algo seria.
-Si, él...-hizo una pequeña pausa, rodando los ojos y luego encontrándose con los míos- ¿Irás?
-claro...-dije con apenas un hilo de voz.
-¡Genial! escríbeme cuando te encuentres ahí,  yo iré junto a ti -me sonrió cálido,  era la más bella sonrisa que había visto, se alejó en reversa y despidiéndose con la mano. Le sonreí y volví a concentrarme en el libro que estuve leyendo antes de qué Ian me interrumpiera,  era un clásico; lo había leído como trescientas veces. "El amor en los tiempos de cólera"  lo amaba y de eso no había dudas.

Pasaron como 5 minutos,  todavía sin poder concentrar mi mente, me percate de unos zapatos por debajo de la sombra de mi libro.

-Quiero concentrarme en mi libro Tom...-sin alzar la vista de mi libro, y von voz seria.
se sentó a mi lado, bajando la cabeza para revisar el título de mi libro.
-El amor en... Espera, ¿de nuevo este libro? lo has leído unas trescientas veces. ¿Tal vez? -dijo.
-y voy por la trescientos uno- reímos juntos.
-deberías prestarme lo, sólo para comprender tu pequeño vicio...-aplastando el libro sobre mi falda.
-¿pasarás por mí?-él era mayor, estaba en 5to,  y ya tenía licencia. También había respondido con una pregunta por qué, ¡Bueno! el no apreciaría tal libro, su mente era...¿cómo decirlo?
Era un chico, ¿entienden?
-Lo haré,  ¿a las 8 está bien?- pregunto.
-okay...

Se fue sin más, seguí prendida a aquel libro, pasaron tal vez unos veinte minutos más o menos, de nuevo los mismos pies se asomaban por debajo de mi libro.
-¿Ahora qué ha pasado? -pregunté a Tom, un poco abrumada. 
-Es que vine y me olvidé de lo que iba a decirte, y entonces volví...y ¡taran! -dijo, apoyando una flor sobre mi libro.
-¿Y esto? -pregunté asombrada.
-lo encontré, es bonita,  ¿no? -observé su cara, sus pómulos se encontraban pintados de un leve rosa.
-¡gracias! lo adoro...-mientras colocaba mi libro abierto sobre mis piernas y sostenía tal flor.
-también, Theo...-titubeo -¿lo recuerdas?
-Quisiera decir que no, ¿qué pasa con él?
-me ha pedido que te insista...sobre la fiesta, ¡Ya sabes!
-dile que iré,  no importa. A demás,  estaré junto a Ian -mis ojos se iluminaron.
-¿Qué? no sales de uno y te metes con otro -esbozo de lleno una carcajada, lo miré amenazante.
-Ian es dif...okay, no lo es, pero avanzamos de a poco. ¡Es algo! ¿No? -dudé. 
-Ni tú lo sabes....-contestó asintiendo a mi duda.
-Lo que sea. -alcé mi libro y fingí leer, ignorando a Tom
-Bien, a las ocho, espero estés lista. - rezongó y se alejó.

"Al fin tranquilidad" me dije,  estaba equivocada.
Hillary apareció prendida al brazo de Efrén, sonriendo, él siempre la había gustado, y ahora estaban cuchicheando juntos, y riendo por ahí.

-Mel, al fin te encuentro...-dijo Hillary.
-¡H- Hola! -la observé desprenderse del brazo de Efrén y sentarse a mi lado.
-Ven siéntate...-dirigiéndose a él. Y luego a mí- necesito preguntarte, ¿Es verdad que tu irás a la fiesta de Theo?
-si -dije con un color de voz normal,  ella abrió los ojos sorprendida.
-¿Acaso te golpeo un simio con un sartén? no recuerdas que ese engendro...-miró a Efrén y calló.

La verdad es que ella sabía lo ocurrido entre Theo y yo, en una fiesta donde habíamos asistido, "Theo" no era mi novio ciertamente, solo mi amigo, bueno, algo más que eso. Entre presiones y simples palabras como "Me gustaría estar contigo" y "Si en verdad me quieres lo harás". Bien ya sabrán lo que viene; accedí tontamente a acostarme con él,  eso había ocurrido unas 3 semanas atrás.
Por lo demás, está de más decir que terminé odiando lo boba que había sido,  mi vida no podía estar más arruinada, pero me estaba equivocando.  Ese día de la fiesta, todos me miraban con ojos acusadores, otros murmuraban "no puedo creerlo", "regalada", "es una puta" entre otras cosas mucho peores; Ian me había soltado de la mano, sé que se sentía incómodo,  ¿quién no lo hubiera estado?, me enteré de Hillary lo que Theo había dicho, al verme ingresar a su fiesta agarrada del brazo de Ian. "Sabía que la muy puta correría a los brazos de mi mejor amigo, es lo que quiere,  meterse con todos mis amigos,  ya que la deje, tras haber conseguido lo que quería"  me imaginaba que Theo lo habría dicho así, o incluso, ¿peor?
No saben el tormento, salí de aquel lugar, en el transcurso de las semanas post - fiesta nadie olvidaba, estaba ahora, prisionera de los murmureos y chismes, no podía escapar. Lo cierto es que pasaron las semanas. Ian ya no hablaba conmigo,  sus miradas eran de un profundo "lo siento" y volvía a mirar el piso,  confundido, Tom era el único que se encontraba siempre a mi lado a pesar de saber la verdad,  y lo torpe que había sido
Sin embargo, el saber que era considerada de lo peor en la escuela, y de ser rechazada por los mismos profesores no era todo, ¡No! pues, al hacerme el bebé test ¿qué creen?; si, no se equivocan estaba embarazada de Theo.
Los problemas no terminaban, y no lo harían,  es por eso que me encontraba desde esta altura, en el departamento de Theo, intentando saltar.
Si, VOY A SUICIDARME....

Adolescente &quot;EMBARAZADA&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora