Dos mujeres, dos vidas, que se encuentran en el mismo camino en busca de un nuevo hogar y listas para conquistar una tierra desconocida. Alexandría mecánica de mantenimiento y Clarke maestra de niños, nada en común, pero aun así el amor aparece po...
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Lexa
Clarke ha tenido unos días tan tristes en las últimas semanas desde lo acontecido con su estudiante, pero también todo esto la ha impulsado para trabajar con mucho ánimo en el comité contra el matoneo escolar por orientación sexual, ha estado haciendo contactos con entidades que trabajan el tema a nivel nacional e internacional, hacía mucho tiempo no veía a la rubia así de entusiasmada por un proyecto, a decir verdad desde cuando estábamos juntas.
Esta tarde decidí ordenar un poco mi habitación, la verdad desde que Costia se marchó no me había dado muchas ganas de organizar, así que comencé a revisar y botar algunos viejos papeles y revistas, en el fondo del cajón encontré una antigua libreta de trabajo y le eche una mirada a aquellas notas de los primeros años cuando era una mecánica rasa y luego como supervisor, no pude evitar traer tantos recuerdos a mi mente, y para mi sorpresa en la hoja central encontré un dibujo, si el dibujo de nuestro sueño común con Clarke, con una casita para las dos, un colegio, un bus escolar que traía niños a estudiar allí, suspire profundamente y los ojos se me inundaron de lágrimas, santo cielo será que nunca lo lograremos?, era eso un sueño y nada más?, me limpie las lágrimas con el dorso de la mano y me tranquilice, ya no importa, lo esencial es que Clarke sea feliz en lo que decida para su vida, pase las hojas de la libreta y allí estaban algunas noticas que la rubia me escribió en aquellos tiempos, una pequeña flor disecada que una vez me regalo, leí algunas y tiernas cartas, nacidas del más puro amor, como anhelaba esos tiempos, como los extrañaba. Se me ocurrió la idea de enviar a la rubia una foto del dibujo pero la cámara de mi teléfono móvil tenía una falla desde la última monumental caída, así que fui a mi laptop para pasarla por escáner, para mi sorpresa mi peludo "salvador" había tomado posición del computador y dormía profundamente sobre este, no pude más que echarme a reír y guarde de nuevo todo dentro de la libreta y la puse en el cajón, después lo haría.
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He dormido un poco alterada, haberme encontrado esa libreta ayer me ha removido muchas cosas, pero la vida debe seguir, esta nueva vida en donde con suerte soy la mejor amiga de Clarke, entonces recordé que hacía tiempo quería reparar en casa de la rubia las llaves del agua del lavado y la ducha que había visto en mal estado, salte de la cama, me organice y salí de inmediato para comprar lo que necesitaba, no sin antes pasar a la panadería a buscar unos deliciosos muffins recién horneados para el desayuno.
