Dos mujeres, dos vidas, que se encuentran en el mismo camino en busca de un nuevo hogar y listas para conquistar una tierra desconocida. Alexandría mecánica de mantenimiento y Clarke maestra de niños, nada en común, pero aun así el amor aparece po...
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Clarke
No he podido dejar de pensar en lo sucedió la última noche en ciudad capital, me siento tan extraña, tan confundida, que me está pasando, es una mujer, no puede ser, es Alexandria mi mejor amiga. Siento que mis labios se queman cada vez que recuerdo como me beso y como se estremeció todo mi cuerpo cuando lo hizo. Eso lo he sentido quizás con alguno de los chicos que me han besado pero nunca tan intenso como cuando ella lo hizo. Lo que sucedió acaso me hace homosexual? Lexa es homosexual?, siento que todo esto me sobrepasa, casi no he dormido anoche; es una mezcla de emoción, de alegría, como alguien me hace estremecer de tal manera?, pero también me asusta, es todo nuevo para mí. Y ahora qué voy hacer?, me negué a hablar con Lexa porque no sabía que decirle y no se me borra del corazón la tristeza que leí en sus ojos cuando le dije que iba a hacer de cuenta que nada había pasado. Pero que más podia a decirle, ni yo misma entiendo que ha pasado.
- Clarke estas indispuesta? Casi no has probado tu desayuno – me dice mamá con un tono de preocupación-
- Lo siento mama, es que no tengo mucha hambre, quizás algo me cayó mal, el cambio de comida en ciudad capital – mentí para que no me hicieran comer-
- Pequeña si quieres busco una cita con el médico, hoy es domingo pero quizás nos puedan atender por urgencias – dijo papá también observándome detalladamente, debía estar fatal sin haber dormido y con una tristeza que pesaba una tonelada-
- En serio estaré bien, solo debo cuidarme en la comida un poco y pues darme un baño, además hoy tengo tareas de la universidad que debo hacer – diablos recordé que habíamos quedado con Lexa hoy domingo de finalizar nuestra tarea de arte, el cuadro al óleo-
- Dile a Lexa que venga y se quede almorzar, así trabajan aquí y puedes descansar.
- No mamá yo debo ir a su casa porque allí están todos los materiales y es mejor no mover el cuadro porque podemos echarlo a perder, yo mejor me voy temprano y regresaré para el almuerzo – hice el plan y ni siquiera sé si Lexa quiera verme después de lo de ayer-
- Está bien hija, pero si te sientes mal solo dinos, puedes estar intoxicada o algo así con esas comidas de hoteles y restaurantes.
- Si papá lo tendré pendiente – le dije con una sonrisa de agradecimiento-
- Clarke puedo comerme el resto de tu desayuno – me miro Octavia con sus tiernos ojos-
- Si hermanita termínalo – en segundos mi plato estuvo vacío y Harper y Octavia se peleaban por la comida-
- Pero niñas que es eso parecen que están muertas de hambre – las regaño mamá en tanto me arrancaron una sonrisa-
- Déjalas mamá es que están en pleno crecimiento y son un barril sin fondo- las defendí-
- Menos mal no tenemos invitados, me avergonzarian
- Mamá nosotras sabemos comportarnos, es que Harper es muy ventajosa, Clarke me dio su desayuno y ella quiere también una parte.
