cap. 6

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el pelinegro suspiro cuando entro a su casa y sonrió al recordar los labios del castaño contra lo suyos, tan suaves, tan pequeños, tan dulces tan...

—¿como te fue en tu cita?—miro a stan quien estaba en el sofá con una revista y una taza de té humeante, richie se encogió de hombros.

—estuvo bien.

—¿no hubo beso?

—...no—el rizado lo miro con las cejas levantadas y richie empezó a sudar.

—¿seguro? ¿porque estás sudando? ¿a caso estás nervioso? ¿que ocultas? ¿es algo malo? ¿porque tiemblas? ¿tienes a caso un tic en el ojo?

—¡basta! si, bese a eddie—susurro y stan sonrió.

—sabia que no podías tener por un minuto tu lengua dentro de tu boca—richie se sonrojo.

—¿¡qué!? ¡no hubo lengua estúpido! solo fue un beso tierno—sonrió enamorado—su primer beso lo dió conmigo.

—¡oh por dios! de seguro no le gusto cómo lo besaste—comenzó a reír.

—¡cállate stan! a él le gustó y me lo dijo, no peleare contigo, mejor me ire a dormir.

—o te irás a pajear con el recuerdo de sus lindos labios—hizo sonidos de besos.

—¡que te jodan!—por último escuchó la gran carcajada que soltó stan antes de ahogarse con su propia saliva y toser como retrasado.
richie tomo su celular y le envío un mensaje a eddie.

tú: hey ¿ya te dormiste?

eddie>3: no, no puedo dormir :c

tú: oh dices que tienes insomnio

eddie>3: ¡si! y no me gusta eso :((

tú: esto sonara algo extraño pero, ¿te gustaría que fuera hasta allá?

eddie>3: ¿lo harías? :00

tú: solo si tú quieres.

eddie>3: ¡claro que quiero! las llaves de mi casa están en una maceta a lado de la puerta, puedes entrar yo te estaré esperando :D

tú: está bien, en unos minutos estaré allí. solo espéreme despierto.

eddie>3: si señor.

richie rió mientras negaba, tomo una mochila vacía y metió su pijama y su cepillo de dientes, después bajo a la cocina para meter algo de comer y compartir con eddie. camino a la sala y se encontró con un stan completamente dormido, si que estaba muy enfermo para quedarse dormido donde sea, así que sin hacer mucho ruido salió de su casa y cruzó la calle para llegar hasta la casa de eddie.

busco las llaves y las encontró, las metió en el picaporte y abrió la puerta.

—¿eddie? ya estoy aquí—avisó.

—¡estoy en mi habitación!—richie sonrió y subió las escaleras, solo había tres habitaciones y entro a la primera donde se veía una luz encendida, entro encontrandose con un eddie vestido de pies a cabeza con su pijama de unicornios.

—hey—el castaño se lanzó a sus brazos enredando sus piernas al torso de richie.

—¡hey! ya que estás aquí ¿que haremos?—se bajo de su cuerpo, el más alto se quitó la mochila y la abrió para sacar una gran bolsa de doritos, una coca cola, una pequeña caja de pizza y por último otra gran bolsa de sabritas. eddie jadeó.

—traje todo esto, podemos jugar a algo y...—pero antes de que terminara la frase, sintió como fue jalado hacia abajo y unos labios impactaron contra los suyos.

—solo quiero que me beses—dijo entre besos, richie no se quejó y tomo la pequeña cintura de eddie.

(...)

la noche para ambos chicos fue tranquila, comieron de las bolsas de papas, bebieron de la coca cola y miraron algunas películas de terror que eddie tenía ocultas en una caja debajo de su cama, también se daban uno que otro beso.

ahora se encontraban en la cama de eddie con todas las luces apagadas y solo se podía escuchar en aquella habitación, los chasquidos que hacían sus labios cuando se besaban. el castaño se encontraba encima del cuerpo del más alto.

—nunca me cansaré de besarte—eddie susurro cerca de los labios de richie.

—lo mismo digo, pequeño—dijo acariciando las caderas del menor. eddie peino los cabellos de richie que se pegaban en su frente, peinandolos hacía arriba o hacia un lado.

—eres muy guapo richie, ¿porque no te conocí antes?

—porque no vivía aquí pero estoy para quedarme, no me ire de este lugar, no sin que tú seas mi esposo—eddie rió bajito y sus mejillas se sonrojaron.

—eres un tonto.

—¿qué? ¿no me crees? vas a ver qué en un futuro nos iremos tu y yo a otro lugar fuera de derry, solo tú y yo en un lindo auto, ambos con traje de boda y dos anillos como símbolo de estar casados—el castaño negó con una sonrisa divertida en su rostro y volvió a besar los labios de richie.

a eddie le gustaba esa idea.

Cotton Candy BabyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora