Cotton Candy Baby

cap. 10

su mamá había llegado antes de lo esperado, eddie tenía planeado ir a desayunar con richie pero su madre llegó arruinandole todos sus planes para este día tan hermoso.

—¿a dónde ibas tan arreglado cariño?

—con un amigo—sonia lo miro desconcertada.

—¿cuál amigo? sabes que tienes prohibido salir con bill y con esa chica.

—no es ninguno de ellos dos—suspiro—es el chico con el que me viste hablar la otra vez.

—¿¡qué!? eddie, te dije muy bien que no te quería cerca de él ¿que hemos hablado de los desconocidos?

—¡él es buena persona! y me estoy dando el tiempo de conocerlo—frunció el seño y su mamá río.

—hijo, no vas a caer en él ¿cierto? no te vas a creer que es una buena persona ¿o si? recuerda que las personas fingen cariño, él es lo que está haciendo contigo. solo está fingiendo ser amable para aprovecharse de tu inocencia pura, no creas nada de lo que te diga.

—por favor mamá, richie no haría algo como eso, lo conozco hace poco pero es buena persona ¡en serio!

—oh, tiene nombre. richie, suena como un vandalo.

—¡él no es ningún vandalo! ¡él es una muy buena persona!

—no me importa, tienes prohibido hablar con el, fin de la discusión.

—no.

—¿no?—sonia se giró viéndolo con su seño fruncido.

—lo siento mamá pero ya no te haré caso.

—¿que estás diciendo eddie?

—¡lo siento pero lo único que haces es arruinar mi vida! ¡por tu culpa no tengo pareja! ¡por tu culpa solo tengo dos amigos! mamá, abre los ojos. ya no soy un bebé, tengo diecinueve años y puedo hacer lo que yo quiera, te amo pero dejame tener mi propia privacidad, déjame tener libertad.

—no, no eddie ¡no! tu eres aún mi bebé, no puedo dejarte solo por la vida que cometas error tras error como todos esos chicos de las calles, esos que sus padres no les pusieron un alto en su vida.

—¡de eso se vive! ¡se vive de cometer errores y aprender de ellos! de caerte y volverte a levantar ¿que has hecho tú en todos mis diecinueve años? protegerme, así estoy apunto de caer cuando tú estás para sostenerme, estoy a punto de cometer un error y estás allí para arreglar todo, deja que viva mi vida, no voy a estar contigo para siempre ¿si? algún día me tendré que ir de tu lado aunque tú no quieras, algún día me tendré que casar y tener hijos, ¡irme a vivir con mi esposo! y no voy a poder llevarte conmigo porque ahora estaré viviendo mi propia vida. por favor mamá, supera que ya no tengo cinco años, ya crecí...—sonia miro a su hijo a través de sus lágrimas, su nariz estaba roja.

—lo siento mucho eddie, es solo que tengo miedo a que me dejes sola, tengo miedo de quedarme sola, que te vayas y te olvides de esta vieja gorda.

—no mami, tu no eres vieja—se acercó para abrazarla—mucho menos gorda, es solo que papá y yo te llenamos de nuestro amor.

sonia rió a pesar de estar llorando.

—prometeme que nunca te olvidarás de mi, cariño.

—nunca lo haría, porque tú eres mi madre, la me dió la vida—beso la mejilla de sonia.

—te doy tu libertad, puedes salir con tus amigos y también puedes conocer a ese chico, ya no más retenerte, será difícil pero todo por la felicidad de mi hijo—sonrió.

—gracias mami.

—¿y te gusta ese chico?—las mejillas de eddie se tiñeron de rosa.

—si, me gusta y mucho.

(...)

—hey richie, mamá quiere que te invite a cenar mañana. quiere conocerte.

»uy, conoceré a mi futura suegra.

—cállate tonto, no fue nada fácil convencerla en dejar que te conociera, discutí con ella.—mordio su labio.

»lo siento bonito.

—no, está bien, ella lo entendió y ahora me dejara salir—sonrió.

»¡eso es genial! así podemos salir tu y yo.

—suena bonito eso pero ¿vendrás o no? en serio quiere conocerte, dijo: quiero conocer al chico que se robó el corazón de mi tesoro—trato de imitar a su madre, richie rió del otro lado de la línea.

»ten por seguro que estaré alli.

—¿richie?—mordio su dedo con nerviosismo.

»¿eddie?

—te quiero...en serio te quiero mucho—sonrió en grande. al igual que richie lo había hecho.

»yo también te quiero mucho.