Wild Heart. {Tommo's fanfic} TERMINADA

Capítulo 10. Venganza.

Cogí mi cuaderno de canciones y tras arrancar una hoja del final escribí en mayúsculas “IDEAS PARA VENGARME” con un rotulador rojo como la sangre. Empecé a pensar distintas ideas mientras intentaba aguantar la música en mi cabeza, evitando que acabara explotando.

Sabía cuáles eran las cosas que tan poco le gustaban a Niall, por lo que era más fácil gastarle una broma que le dejara un poco en ridículo y me hiciera reír durante un rato, pero del otro chico no sabía nada.

-               Ni siquiera sé su nombre joder, ¿cómo me voy a vengar de él? –me pregunté en voz alta.

Respiré hondo varias veces y empecé a llenar la hoja con distintas bromas hasta que no se me ocurrieron más. Al final, la hoja dividida en “Niall” y “Chico desconocido” quedó muy desigual, en la parte de mi primo habían unas diez líneas con distintas bromas, y en la del otro chico sólo habían cuatro. Escribí bromas variadas, desde dejarles en ridículo tirándoles un huevo a la cabeza a cada uno, hasta rallar el coche de Niall y seducir al chico dejándolo con las ganas de ir a más.

-               Ya veremos quién se ríe esta vez… -dije con una sonrisa malvada.

Cogí otro rotulador y empecé a releerme cada una de las bromas para ir descartando una por una hasta quedarme con una para cada uno de los chicos. Cuando terminé empecé a pensar cómo llevarlas a cabo y cuando tuve mi gran plan ideado, me puse un bikini y un vestido playero y salí de mi habitación.

“¿Cuál gorra será de las favoritas de Niall?” pensé buscando entre sus cosas.

Recordaba haberle visto muchas veces con una gorra azul y gris de la marca Obey, así que moví todos los cajones del armario de mi primo hasta encontrar el que estaba lleno de todas sus gorras. La que yo buscaba estaba colocada de las primeras de modo que supuse que no me equivocaba respecto al pensar que sería su gorra favorita.

Cuidadosamente la cogí y me dirigí al baño sin que nadie me viera, Niall había prohibido a la gente subir al piso de arriba, por lo que no tuve ningún problema de ser descubierta.

-               A ver Niall, vamos a divertirnos un poco…Champú, crema, un poco de colonia de la tuya y un poco de la mía y… ¡a remover! –dije riéndome.

Esparcí el potingue por todo el interior de la gorra y dejé una pequeña masa justo en el medio para que se manchara más. Respiré hondo para entrar en el papel que iba a interpretar en ese momento y bajé las escaleras con una gran sonrisa y un poco corriendo. Varias personas me miraron y murmuraron, pero les ignoré y me dirigí a donde estaba Niall, el cual me costó un poco de encontrar. Por suerte, el chico que se había reído de mí junto a mi primo hace poco más de media hora, estaba con él.

-               Niall, vengo a avisarte de que me voy. He quedado con un viejo amigo –sonreí de forma ilusionada.

-               No hacía falta ni que avisaras, a mí como si te escapas de casa –empezó a girarse pero se fijó en la gorra-. ¡Un momento, un momento Mariluz! Esa no será mi gorra, ¿no?

Miré el objeto que tenía en la mano de manera inocente y sonreí haciéndome la tonta.

-               Sí, pensé que me la dejarías. Es que al chico le gustan este tipo de gorras y…y yo le quiero gustar –añadí vergonzosamente.

-               ¿Y a mí qué me cuentas? –gritó-. ¡Esa gorra es mía y no te la vas a llevar!

Estiró la mano para quitarme la gorra, pero yo me aparté rápidamente. En ningún momento se dio cuenta del pringue que llevaba en su interior, porque la cogí todo el tiempo de manera que tapaba esa zona.