A pesar del tiempo y la distancia, los sentimientos nunca cambian... Hermione descubrirá que no solo el pasado es firme, sino también que el amor lo es a pesar de los años.
PORTADA A CARGO DE LA TALENTOSA MONSERRAT VIDAL, BETA Y AMIGA, GRACIAS.
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Severus leía calmadamente en el árbol cerca del lago en el Bosque Prohibido, un lugar tranquilo siempre era bienvenido y acompañado de un libro de pociones, no había nada más que pedir, se había distanciado de Lily debido a la Profesora McGonagall, pero solo era un breve descanso, después volvería a tratar de conquistarla.
Continuó leyendo el libro que la Profesora Hult le había prestado y podía comprobar que la poción que quería ella era sumamente complicada y sólo como una teoría había quedado, sonrió para consigo, un reto muy interesante y estaba seguro que lo podía conseguir.
Oyó unos pasos que se acercaban a donde estaba, esperaba que fuera otro Profesor advirtiéndole que no podía estar en un lugar tan peligroso, pero al enfatizar más su oído notó que eran varios los que se acercaban, Severus se incorporó y con un ligero temor le hizo frente a sus acosadores.
-. Vaya, Quejicus solo ¿Qué ocurre Snape? Tú y tú novia se verán aquí, debe de ser invidente, sólo así se fijarían en ti -. James se acercó sin temor a Severus y él no se inmuto en su lugar.
-. Potter y, sus secuaces, necesitas compañía para tus orgias contigo mismo, es una pena que tu intelecto sea tan bajo que solo así puedes conseguir satisfacción -. Severus no sabía porque había contestado, nunca lo había hecho, pero sólo por esos momentos, la voz de su Profesora se sintió en su memoria.
-. ¿Qué te crees Snape al hablarme así? -. James se acercó molesto junto con Sirius.
Severus decidió dar por terminado ese incomodo encuentro.
-. Apártate Potter, tú y tus perros falderos malgastan mi tiempo -. Enfatizo la palabra "perros" girando a ver a Remus, el cual se tensó levemente.
Severus los ignoró y se giró dejándolos solos, pero a James eso no le bastó.
-. No te atrevas a darme la espalda Quejicus -. James molesto sacó su varita. -. Expelliarmus -. El ataque se dirigió hacia Severus.
Pero Severus sacó su varita y en el mismo instante giro desviando el hechizo, que se dirigía hacia James, el cual cayó hacia atrás con el impacto, sin llegar a golpear su cabeza en el suelo.
James levemente temeroso, molestó y confundido se levantó.
-. Atacando por la espalda Potter, ¿Por qué no me sorprende? Tú y tus amigos, son unos cobardes, al parecer el sombrero se equivocó en el sorteo de casas -. Los cuatro lo observaron con miedo, era la primera vez que Severus se defendía de un ataque, James se incorporó.
-. Esta me la pagaras Snape -. James le amenazó, varita en mano y haciéndoles una seña a sus amigos se retiraron de ahí.
Severus los observó huir y recapacitó lo que acababa de pasar, no podía creer lo que había pasado, pero su Profesora tenía razón, debía defenderse, sabía que todo el castillo se enteraría y tendría varios problemas y, sin embargo sonrió, había disfrutado cada segundo de ese encuentro.
