El pueblo

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Trece años más tarde.

— ¡Quítate, me estorbas!—Grito Dereck.

—Pe-pero papá dijo, el-es que dijo que podía ir contigo.—

—Afff que fastidio, si vas a venir no molestes y camina rápido o te dejo.—

— Si-si hermano mayor.—

Llegando al pueblo Dereck se detuvo, se agacho y le dijo al hermano.

—Escucha, este lugar es peligroso, no mires a nadie a la cara, cállate y no te alejes de mi ¿entendido?—

—Si hermano.— Dijo tímidamente el pequeño.

—Muy bien.— Sonrió y le vatio el cabello al hermano menor.

Al Caminar por la plaza pudieron ver a los comerciantes de esclavos esperando, escuchaban gritos y sollozos de las personas atrapadas en sus jaulas.

Dereck Camino junto a su hermanito a través de estos para llegar al lugar que su padre le encomendó. El trabajo era fácil, recoger la carga y salir del pueblo.

Jhoderford dirigía la Caza del Zapatero, era un viejo amigo del padre de Dereck así que se podía confiar en él, los chicos se tardaron un poco en llegar y al entrar dijo Dereck.

—Hola viejo Jho he venido por el encargo de mi padre.—

—Hola pequeño Dereck ¡Mírate! Ni haz crecido jajaja.—

—Perdón por ser pequeño.—

—Jajaja Perdón, me he sobrepasado; pero veamos ¿Qué es esto y esta pequeña comadreja que llevas colgada?—

—Es mi hermano Shadd mi padre me obligo a traerlo, pero no es importante así que no lo mires y dame ya el encargo.—

—Eres impaciente Dereck, eso no es atractivo.—

—Viejo, sabes que ya debo irme.—

—Si, si perdón, Ten tómalo.—

Y con eso agarró la mano de Dereck y se acerco a su oído, diciéndole en un susurro algo que le erizo la piel.

— A tu comadreja ya la han visto.

Se separó rápido Tomando a Shadd de la mano y corriendo con gran rapidez.

—Her- hermano, ¿Por qué corremos? Dijo Shadd exhalando continuamente, cansado por sus pequeños pies.—

Pero Dereck lo ignoro y siguió corriendo aun más rápido. Frente a ellos una figura alta, escuálida con una vestimenta algo descuidada y cabellos que caían sobre sus hombros los detuvo y dijo.

— ¿A dónde van estos dos pequeños solos, y con tanta prisa?—

Helado Dereck pensaba en soltar la mano de su hermano y salir corriendo, pero por alguna razón apretaba su brazo delgado cada vez más; cuando el hombre se acerco listo para llevarlos consigo alguien más se presento.

— ¿Quién eres?—Exclamó Renaldo con enfado.— ¿Qué quieres con mis hijos?

Los chicos al ver a su padre corrieron a refugiarse bajo sus brazos, a lo que al hombre de cabello largo cohibió y dijo.

— Perdón, me he equivocado.— con esto se fue y su figura se difumino con los arboles del bosque.

— ¡Niños!—Exclamo Renaldo —¿Se encuentran bien?—

—Si-si padre— Dijo Dereck

—Papá Tenía mucho miedo—Dijo Shadd mientras limpiaba sus lagrimas con su antebrazo.

—Lo Siento, por favor ¡perdónenme! Mis pequeños.— Dijo Renaldo mientras tomaba en brazos a Shadd y acariciaba a Dereck.

Su madre ha hecho la cena, llegaremos tarde, vamos.

Crónicas de Arzo [Un Reino Secreto]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora