Al diablo con la apuesta (PRIMERA Y SEGUNDA PARTE)

Victima

Narra William

Los chicos ya me habían dado el nombre de la chica, Beck Moller, según ellos era un sueño en todos los sentidos, tanto en cuanto a lindura y personalidad también.

En un pequeño descanso Izzy se me acercó.

_¿Como te fue con tu entrada al Bad boy club?_

_No se llama así, en fin, no importa, si me fue bien tengo que cumplir una apuesta par entrar verdaderamente_

_y, ¿me la vas a decir o que?_

_no, es secreto, no puedo decírselo a nadie, ni a ti_

_ya veo que tienes que sacarte la ropa en un concierto donde pasen música electrónica, si es eso, porfa no te drogues_

_en que loco mundo vives, por supuesto que no haré eso, a ti como te fue, ¿pegaste amistad con alguien?_

_Will ya me conoces, suelo mandar a la mierda a todo ser que se me acerque y encima para variar nombraron a papa_

_Iz, yo sé que lo extrañas..._

_no, no lo sabes, tú no estuviste allí_

Aunque no lo crean mi padre no había muerto en un accidente aéreo.
Un día común y corriente Isabel llegaba temprano de su entrenamiento en el gimnasio, cuando abrió la puerta mi padre yacía muerto, se había suicidado.

_Esta bien, lo lamento, tú sabes que eres lo más importante para mi, lo único que quiero es que no estés sola, nunca lo estarás porque me tienes a mi, pero estaría bien que hicieras amigas, además me las presentas y..._

Ella se rió, amaba hacerla reír después de mandarme alguna cargada, pues su risa era contagiosa. Isabel fue la que más sufrió la muerte de papá, ellos eran literalmente muy cercanos, hacían todo juntos y verlo muerto para Iz fue como si el mundo se le hubiera caído arriba, nunca se recuperó del todo, al menos ahora intento de que si, odio verla sufrir, es mi peor debilidad, Isabel.

(...)

Me encontraba afuera de la universidad Frank todavía no había llegado e Izzy estaba fumando un cigarrillo.

_le prometiste a mamá que lo dejarías_

_si, mis promesas casi nunca valen_

_bueno, ¿me compartes?_

Sin mirarme saco un cigarrillo y me lo dio, lo prendí y camine por el pasto verde, en ese momento vi que mis cordones estaban desatados, me agaché y sentí que alguien se choco conmigo, accidentalmente una chica se había caído.

_lo siento no te vi_

_tranquila no pasa nada, ¿estás bien?_

_si, gracias_

Cuando se quitó el pelo de la cara unos ojos verdes me paralizaron, eran perfectos y su pelo era azabache y lacio, una total belleza.

Pero que tonterías digo, el amor es para débiles y yo no soy débil.

_¿como te llamas?_

_Beck, y ¿tú?_

¿Beck?, era ella, ella era la perfecta en todo sentido, pues mis amigos no se equivocaban, era un sueño esa chica, por lo que veo no será difícil enamorarla, ya la había salvado.

_¿Sigues en esta tierra?_

_lo lamento, soy William pero me dicen Will_

_Es un gusto, un momento tú eres el nuevo miembro del "tarados club"_

Acaso me había dicho tarado, esto se iba a poner feo.

_recién te conozco y ya me caes mal_

_en hora buena, el sentimiento es mutuo, ahora me voy, no me estorbes_

Enserio tenía que enamorar a esta chica, Dios que infierno, ¿no podía ser una que al menos me cayera bien?, gracias Alec, gracias Derek, voy a tener que invitar a cenar al monstruo del lago

De repente mi teléfono vibro.

_¿en donde cojones estás?, te estamos esperando par ir a casa_

_ya voy_

Me subí al auto de Frank y por suerte hubo un silencio tranquilo.

_Iz, ¿al menos hablaste con alguien?_

_¿de que va hablar tu hermana?,si es más agresiva_

_cierra tu maldita boca, no te pregunte a ti_

_dos chicas, Maya y Beck_

Mis ojos se pusieron en blanco, encima tenia que ser amiga de mi hermana, bueno aún no eran amigas.

Lleguemos a casa y mi madre ya había vuelto, la casa olía a una comida particular, pollo con cebolla, que rico.

Coloqué lo que faltaba de la mesa y me senté al lado de mi hermana.

_¿como te fue en la entrevista Mamá?_

_de maravilla William,¿ a ustedes?_

_bien_

_Isabel, mañana se me ocurrió que tu y yo podíamos ir al centro comercial, si quieres_

De repente me atraganté con el pollo, mi madre invitando a mi hermana, al centro comercial, wow, está ciudad hacia cambiar a la gente. Desde la muerte de mi padre Iz y mamá casi nunca estaban juntas, pero esto era un avance.

_si claro mama_

_hey Will, porque no vas con Frank a ver un partido o algo así_

Eso ya me daba gracias, ni a palos compartía algo con Frank, de suerte podíamos vivir en la misma casa.

_Mama, quiero que quede algo claro, yo no tengo ni el más mínimo interés en ir con Frank a ningún lado, me cae mal y lo peor es que lo sabes_

_William, deberías respetar a tu madre y a mi un poco más, no te parece_

_Tu no eres mi padre, no te tengo que respetar si no quiero, a mi mamá si, porque la quiero, pero tú, tú eres un pedazo de basura, buen apetito, me retiro, no tengo nada más para decir_

Ese gran hijo de puta me había dejado sin apetito, no podía creer que mi madre podía estar con esa basura de hombre, me enfermaba.

Subí los escalones de a dos y me encerré en mi habitación.

Al rato sentí golpes en la puerta.

_quiero estar solo_

_no te dejare solo_

La voz tranquila de Isabel me llamo, le abrí la puerta y pasó sin problema, se sentó en la cama.

_Se que también extrañas a papá, créeme yo aún no lo supero, pero tienes que hablar con alguien sobre tus sentimientos, no puedes guardar tanta ira Will_

_¿ y que sugieres que haga?_

_vamos a clases de boxeo, eso nos ayudará, a los dos_

_tal vez tengas razón_

De repente me abrazo, su cuerpo chiquito era cálido, ella era cálida, enserio la quería mucho.

_recuerda algo, siempre estaré de tu lado, hasta si matas a 1.000 personas yo igual seguiré de tu lado, eso si te lo prometo_

_tus promesas no valen_

_esta  si_