Nuevas amistades

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Narra Hope...

Cuando tu propia cabeza es un desastre o tu te entiendes...Quería estar con alguien, pero solo puras arras anónimas se me habían presentado, debido a mis resientes poemas en internet. No tenía muchos admiradores...Pero este era diferente, cada vez que publicaba uno nuevo a la semana me mandaba una carta.

"Algún día quiero conocerte...Ojalá pueda"

"Eres una inspiración...No me canso de leer tus poemas"

Por un lado estaba agradecida, pero ojalá pudiera verlo en persona, saber quien era este amante de las letras, ¿escribirá también?.

Tenía nada más que solo preguntas sin respuesta, me molestaba, pero la vida sigue.

De repente escuché unos ligeros golpes en mi puerta, la abrí y contemplé la sonriente cara de mi padre.

-Hola Hope, Solo quería decirte que tendré una cena de gala esta noche-

-papa...ya te dije, no me lo comentes si sabes que no podré ir-

Mi padre sacó una pequeña carta color manteca de atrás de su espalda, la tomé delicadamente y leí la pequeña caligrafía.

Los esperamos Hope y William Erren a la cena de gala de este año, se dará el evento en el gran salón...Agradeceríamos que vayan acorde a cuanto la vestimenta...confirmar asistencia.

-La cena es hoy ya he confirmado todo, además mi compañero Darren tiene un hijo de tú edad, tal vez puedas socializar si te aburres-

En ese momento abrasé a mi papá, quería ir a una gala desde que tenía memoria, tan formales e inspiradoras...Necesitaba un vestido y la cena era hoy.

-Yo me encargo de socializar papá, tú no te preocupes, gracias, ahora debo llamar a Amy para que me acompañe a comprar un vestido, descuida usaré mis ahorros-

-hace mucho tiempo que no tuve la molestia de comprarte algo para ti, llévate la tarjeta, es mi regalo por ser tan buena hija-

Lo abrace una vez más y luego llame a Mi amiga para que me acompañe a comprar el vestido.

(...)

El centro quedaba algo lejos de mi casa, por suerte Amy no quedaba del todo lejos de mi casa.

Tenía exactamente 5 horas para hacer todo, necesitaba encontrar un vestido muy acorde y rápido.

-Hope...Mira este, creo que se te vería bien-

-Es un vestido precioso, entraré-

Con Amy entramos al inmenso negocios, había bastantes vestidos que mirara, pero yo me enfoqué en el de la vidriera. Le dije a la mujer del personal y ella me llevo al probador con el vestido.

-Bueno amiga...No tenemos todo el tiempo del mundo, ya sal que quiero verte-

No tenemos todo el tiempo del mundo, ya sal que quiero verte-

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Al diablo con la apuesta (PRIMERA Y SEGUNDA PARTE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora