Roto

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Narra Alex...

Había tirado todo por la borda, yo y mi maldita costbre de estar alejado de todos, incluso cuando me nesecitaban, no podía dejar de escuchar la voz de mi hermana en mi mente, pronunciaba las palabras ayúdame una y otra vez, yo no había hecho nada para salvarla.

En ese momento cuando creí que todo se había desmoronado alguien toco mi puerta, la abrí sin ganas, no quería ver a nadie, de repente Maya me abrazó como si supiera que en realidad nesecitaba uno.

_te prometo que todo irá bien Alex, Beck es una guerrera_

_Ojala pudiera creerlo, todos han desaparecido en mi vida, mi hermana es vital para mí y ahora estoy al borde de perderla, estoy solo_

_no, yo estoy contigo, te apoyare siempre y siempre estaré a tu lado, nunca creas que estás solo, porque siempre estaré a tu lado, sea lo que se_

En ese momento mis impulsos de besarla eran demasiados, solo me acerque a sus labios rosados y la bese, no se corrio, es fue una buena señal.

_no sabes cuánto he esperado para besarte_

_yo también fui pasiente_

(...)

Tener relaciones sexuales cuando tú hermana está en coma no me pareció la mejor idea de todas pero ocurrió y yacia abrazando a maya en las sábanas grises de mi cama, he querido estar con maya desde que la conocí, pero nunca tuve el valor de decirle lo que sentía, pues creía que tal vez Derek me hubiera ganado, el la conoce mejor pero por alguna razón me eligió y estaba feliz por eso.

Me levanté y me coloque mis pantalones, decidí dejarme el torso desnudo, aveces podía ser muy perezoso.

Prepare el desayuno y lo coloque todo en una bandeja para llevárselo a Maya, cuando entré a la habitación sus ojos estaban abiertos, aún recién levantada era preciosa, sus pecas me sacaban una sonrisa, me perdía en su sonrisa y su pelo era como un misterio que no pudieras resolver, te quedabas mirando horas como se peinaba, tan solo para ver aquella cascada pelirroja que le caía por los hombros.

_Cuando te esfuerzas eres muy romántico_

_Maya, me conoces desde hace mucho pero tengo lados que nadie conoze_

_voy a fingir que no escuché eso, te conozco demasiado bien_

_demuestralo_

_Empezando por el café, ya le has puesto una de azúcar por temor a que este demasiado amargo para mí, las galletas las compraste en tu cafetería favorita por eso me pusiste solo tres, porque sabes que las otras te las comiste tu cuando estabas sonámbulo, luego limpiaste dos veces está bandeja, sabes que no me gustan las peluzas_

Me quedé asombrado, no se había equivocado en nada, está chica era de otro planes o no se, estaba completamente asombrado.

_no puedes ocultarme nada_

_ya veo que no_

Antes de comerse la galleta me beso, pronunció un gracias y luego se comió la galleta y bebio el café.

(...)

Dejé a Maya en casa para que pudieran estudiar y yo fui a visitar a mi hermana.
Al llegar Will aún seguía con ella, seguramente no se iría de allí hasta que despertara, pero tenía muchas ojeras, nesecitaba descansar.

_Will amigo, en estas condiciones no podrás ni decirle hola cuando despierte, ve a casa y duerme un poco, si noticias aparecen te haré saber_

_no quiero irme, estoy bien_

_no estás bien Will, ni siquiera puedes mantenerte derecho de lo tan cansado que estás, por favor vete a tu casa, de lo contrario llamaré a Isabel y ella de seguro te convencera_

Casi rendido solo se limitó a irse, le dio un beso en la frente a mi hermana y luego se fue, no podía imaginarme el dolor que estaba sintiendo. Me senté en el sillón junto a Beck y la contemplé.

_Tengo una noticia qué tal vez no sea importante en este momento pero Maya y yo al fin estamos juntos, ojalá pudieras vernos, estoy feliz Beck, todo te lo debo a ti, me enseñaste cada lado de ella, enserio gracias, me ayudaste a ser una mejor persona, siempre lo has hecho, ver lo mejor en los demás aunque no sea posible_

Narra Isabel...

Cundo Will volvió del hospital me tomé un poco de mi tiempo para visitar a mi mejor amiga, cuando llegue aún Alex seguía con ella.

_hey, tú también deberías descansar_

Los ojos azules de Alex se posaron en los míos, me sonrió.

_Estoy bien Isabel, gracias por haber venido, tal vez no me vendría mal algo de compañía_

_No necesitas fingir conmigo, se como te sientes_

_Entonces tú tampoco lo hagas, se que tu vida no es color de rosa Iz_

_hagamos un trato, no fingimos, no secretos_

_me parece bien_

Alex era tierno, al igual que Thomas, nada más que por supuesto lo amaba más a mi novio, Alex me hacía sentir acompañada, era un buen amigo, Maya tenía mucha suerte.

_ya que no tenemos secretos,¿como empezó tu historia Isabel?_

_yo no tengo historia, mi vida es un drama continuo, como si viviera solo para al día siguiente superar otro problema, todo empezó a ir mal cuando mi papá murió, se suicido y fui la primera en verlo_

Jamás lloraba en público, no me gustaba ser débil pero no podía evitarlo, Alex me dio un abrazo reconfortante.

_Tranquila, puedes confiar en mi_

_¿Cual es la tuya?_

_Cuando mi mamá se fue empecé a ser más solitario, no quería a nadie en mi vida pero me di cuanta de que estaba dejando a Beck sola, así que me mude cerca para no perderla de vista, ella amaba a mamá y se fue cundo era niña, cuando más necesitas a tu madre, por suerte mi tía Raquel la cuidó_

_Raquel es dulce, la quiero muchísimo, es la madre que nunca tuve_

_Izzy, si le dejas preguntar,¿porque razón tienes tantos tatuajes, acaso no te sientes bien con tu cuerpo?_

_no,no es eso, cundo mi papá murió yo desaparecí, quería terminar con mi vida y comencé a cortarme todos los brazos, cuando estaba en estado crítico Will me encontró y en vez de regañarme busco una manera para que no me mandaran a un psiquiatra y se le ocurrió tatuarme los Brazos, me precio bien y lo hice_

_es fascinante como puedes contar toda tu vida en unas simples palabras_

Al diablo con la apuesta (PRIMERA Y SEGUNDA PARTE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora