SEGUNDA PARTE

174 4 0
                                    

Narrra Beck...

4 AÑOS DESPUÉS

Nada había salido bien en mi vida...Estaba sola...Todos a los que quería se habían ido, sólo quedábamos esta pequeña criatura en mi vientre y yo.

Sinceramente no quería tener bebés, me parecía una pérdida de tiempo para mi trabajo, Mi novio anterior me abandonó cuando supo que quede en abrazaba, creí que todo era culpa de esta niño, me había quitado todo en esta vida...Pero, después entendí que era un milagro, quería tenerlo y hacerme cargo de el, tal vez tendría que dejar de lado mi trabajo de tantas horas, pero podía conseguir alguno en el cual pueda cuidar al bebé.

Maya tenía una vida espléndida...No la culpó, yo sabía que conseguiría su sueño, mi hermano la acompañó, se ven tan tiernos los dos...Me recordó a como Will y yo éramos hace años, me arrepiento de haberle insultado, no me había dado cuenta de que me estaba transformando en una persona totalmente mala, quisiera pedirle disculpas...pero ahora eso no era mi prioridad.

Me mudé a un apartamento más chico, el otro ya no podía pagarlo.

-Bien bebe, té prometo que haré lo que sea para mantenerte bien...No se si seré una muy buena madre, pero al menos lo intentare, por ti-

Me toque el vientre y cante una canción, según lo que había leído, a los bebés les encanta escuchar el sonido de tu madre.

-Tu eres la razón por la que volveré a ser feliz-

Cada vez que hablaba me emocionaba y lloraba, como pude ser tan tonta en creer que sería mejor no tenerte, eso no es na solución, eso es abandonar.

Hoy tenía que ir al hospital para saber el sexo...Realmente no quería ninguno en especial, lo amaría igual de todas formas.

Me bañe, me cambie, tomé mi abrigo y baje para subirme a un taxi.

-Señorita, ¿que es su bebé?-

-No lo se aún, estamos por averiguarlo-

-Lo lamento si le incomode, siempre pregunto por los bebés, mi esposa y yo adoptamos-

-No me incomoda para nada, me parece muy bien que adopten, mi hermana quería hacer lo mismo-

El taxista sonrió y en poco tiempo ya estábamos en la puerta del hospital.

-¿Cuanto es señor?-

-No se haga problema, cortesía, felicidades-

-Muchas gracias, se lo agradezco-

Le tomé la mano como saludo y me baje ayudándome con la puerta, la cerré y salude al taxista cuando se iba. Cuando entre al hospital me puse algo nerviosa, quería saber si todo iba bien.

Fui hasta una pequeña mesa donde había una chica con una computadora.

-Buen día, tengo cita con la Doctora Stiffect, ¿donde se encuentra?-

-Primer pasillo a la derecha, puerta tres

-Gracias-

La chica me miro y asintió, creo que no tenía el mejor de los días, seguí las indicaciones de la mujer y estaba en lo cierto, la doctora estaba sentada en un escritorio, muy concentrada al parecer.

-¿interrumpo algo?-

-Beck, para nada, justamente te estaba esperando, ¿ansiosa?-

-Algo-

La doctora señaló la camilla y me acoste, me sonaba las manos cada cinco minutos...si, estaba nerviosa, la doctora Step como yo le decía me puso una crema fría en mi panza, me dio algo de escalofríos pero cuando vi a mi bebé todos desapareció, no podía creer que ya era tan grande, quería llorar de la emoción, pero me controlé.

-Bueno, parece que alguien va a ser mamá de una dulce niña-

Una nena, Tendría una nena...Que hermoso.

-¿ya tienes un nombre?-

-Bueno, antes de que mi mamá...muriera ella me decía siempre que tuviera esperanza, hubo muchas veces que no creí en la esperanza, que no servía para la vida...Pero quiero tenerla ahora, tener esperanza de que mi bebé nazca bien y que la pueda cuidar, intentar ser una buena madre. He decidido ponerle Hope-

-Es un muy lindo nombre, ninguna aquí lo a elegido, estoy muy orgullosa que hayas elegido tenerlo-

-Ella me eligió a mí, y le prometí que nada malo le pasaría-

-Serás una buena madre Beck-

Abrace a Step y me fui contenta del hospital...Tenía que celebrar con alguien y en estos momentos no tenía a nadie, Isabel seguía en su luna de miel y había insultado a su hermano, Alex y Maya cumpliendo sus sueños...Will...Ya lo había hecho pedazos.

Me fui a un café y de repente vi una tienda para bebés, yo no había comprado nada, necesitaba ropa....Mucha.

Me crucé de calle y entré al pequeño negocio...traía mucho efectivo conmigo y esto no era malgastarlo, realmente necesitaba cosas.

-Hola, ¿en que puedo ayudarte?-

-Bueno, voy a ser mamá y necesito, mucha ropa-

-¿y el padre?, ¿está trabajando?-

-El...nos abandonó cuando supo que quede embarazada, al parecer no quería esta etapa en su vida-

-Bueno el se lo pierde, le mostraré los modelos, ¿niña?-

-Si, me gustaría algo caliente, va a nacer en invierno y bueno, no tiene que ser rosa, a mi me gusta el celeste inclusive para mujer-

-pues me alegra porque tengo mucha ropa celeste, ¿como se llamará?-

-Por ahora Hope-

-Es un muy lindo nombre, la felicito por hacerse cargo de su bebé-

-Lo estoy intentando-

Al diablo con la apuesta (PRIMERA Y SEGUNDA PARTE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora