Capitulo 15

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Ha llegado el día. Después de llegar a Paris hoy Joey tiene su entrevista de trabajo, se levanta temprano, y cuando sale de la habitación se encuentra con Rachel en la cocina:

- Buenos días Joey ¿Que tal has dormido?

- Bien, bastante bien, estaba tan cansado que enseguida me quedé dormido ¿Y tú?

- Igual, bueno, desayuna y dúchate, mientras llevaré a Emma a la guardería y luego vuelvo a recogerte para irnos a la compañía. Y tranquilo, no se comen a nadie allí. - Rachel se ríe, coge una tostada, termina de preparar a Emma y sale por la puerta. A pesar de lo que Rachel le ha dicho no puede evitar sentir nervios, a penas tiene apetito, algo raro en el, en momentos como este lo que más le relajaria sería salir a correr, pero el tiempo es limitado y el primer día siempre hay que dar una buena impresión. Joey termina de tomar el desayuno, apenas toma un café y una tostada, después se mete en la ducha, antes de que salga de ella Rachel llega al apartamento.

- ¡Joey, ya llegué! ¡Estás listo! - Rachel se pone a buscar a Joey por el apartamento, al llegar al baño se da cuenta de que Joey está en la ducha, sabe que no debe mirar, pero termina cediendo a sus deseos. Sigilosamente entreabre la puerta y comienza a observar a Joey. - ¡Madre mía! - susurra mientras lo observa, él sigue en la mente de Rachel, la cual va por libre y empieza a imaginar cosas: sus manos acariciándola, su boca tentándola, sus ojos desafiándola. Sus manos se desatan y comienza a acariciarse pensando que es Joey. Un roce, dos, tres. Su temperatura aumenta y el centro de su cuerpo reclama más atenciones. Y no se las niega. Esta a punto, solo un poco más...y se muerde el labio, Joey no se percata de que Rachel lo está observando, ella apenas se puede contener. - ¡Ay, despierta! - Se dice Rachel, debe volver a la realidad, y antes de que Joey salga y la descubra, ella se va a esperarlo a la sala.

Minutos después Joey sale listo para irse.

- Valla, ni sabía que estabas aquí, ¿llevas mucho esperando?

- No , solo cinco minutos, ¡Caramba! estás muy guapo y elegante.

- Gracias, he seguido el consejo de una amiga que me aconsejó que cambie de look.

- ¿Ah si? pues ha sido una buena idea. - Rachel se ríe. - vámonos. - Rachel coge a Joey del brazo y salen del  apartamento en dirección a Saboir- Faire, la Escuela de diseño y moda de París. Se encuentra en un edificio de siete plantas, donde tienen sus sedes muchas de las más famosas casas de moda de París, incluyendo Chanel, Hermès, Lanvin y muchas otras.
Aquí, todos los días, los modelos encuentran a profesionales reconocidos a nivel internacional provenientes de las más prestigiosas empresas de moda francesas, profesores altamente competentes, dotados de una pasión estimulante y de capacidades sobresalientes como las de Rachel Green. Los diseñadores desarrollan sus habilidades en todas las áreas del fashion design y del fashion business, desde la consultoría, a la editorial, hasta el marketing. En esta gran empresa Rachel se siente como pez en el agua, ella se dirige al despacho de su superior Megan Foxter con Joey. Rachel se para en la mesa de la secretaria.

- Buenos días, ¿Puedes decirle a Megan que Rachel Green la quiere ver? Ella ya sabe porque.

- Si, me dijo que la esperaba, pueden pasar.

Rachel y Joey entran al despacho de Megan.

- ¡Rachel! ¿Qué tal las vacaciones? ¿Vienes con las pilas cargadas?

- Si, muchas gracias.

- No me las des a mi, dáselas a Madame Sophie, está encantada con tu trabajo. ¿Este es el modelo que me dijiste por teléfono?

- Si, bueno, no tiene experiencia, pero aprende pronto.

- No te preocupes por la experiencia, aquí lo podemos formar, ¿Cómo te llamas?

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