Friends Vuelve a mi

Capitulo 4

Aeropuerto JFK, Mónica, Chandler, Mike y Phoebe están esperando a que el avión de Rachel y Ross llegue:

- Odio los aeropuertos, la espera se me hace eterna. - Dice Mike.

- Por cierto, ¿con quién dejasteis a los mellizos? - Pregunta Phoebe.

- Con mis padres, están encantados, como ellos dicen son sus primeros nietos. - Responde Mónica.

- Cariño, ¿y Ben y Emma? - Pregunta Chandler.

- Vale, ¿Prefieres que los dejé con tu padre?

- Acabarían bailando I will survive en la cuna. - Responde Chandler.

En ese instante suena por megafonía:

- El vuelo 242 procedente de París, está aterrizando en estos momentos.

- Es el vuelo de ellos.

- ¡No me digas, valla qué sorpresa! - Responde irónico Chandler.

- Vale se acabó, vete a esperar al coche y no salgas.

- Me lo tengo merecido. - Susurra Chandler entre dientes mientras se va.

Unos minutos después Rachel, Ross y la pequeña Emma salen de la puerta de embarque. Rachel se funde en un abrazo largo con Phoebe y Mónica que lloran emocionadas, Ross da un abrazo a Mike mientras Mónica coge en brazos a la pequeña Emma.

- ¿Y Chandler? - Pregunta Ross.

- Chandler está castigado en el coche, ya sabemos quién lleva los pantalones en casa. - Dice sonriendo Phoebe.

Los chicos se van al Central Perk a ponerse al día.

- ¿Sabes algo de Joey? - pregunta Phoebe.

- Hable con Gina, pero no me quiere dar ningún número de teléfono donde localizarlo, solo me dijo que estaba bien, que cuando se marchó se fue destrozado y que no quiere que lo busquemos.

- Pero eso es ridículo, somos sus amigos, ¿Que fue lo que le ocurrió? - Pregunta Mónica.

- Ahora que lo dices, la mañana antes de irse entre en el apartamento de Joey y lo vi mirando una foto, cuando le pregunté que era la guardó inmediatamente. - Dice Phoebe.

- Quizás era la foto de un bocadillo, ya sabes cómo es Joey. - Dice Mónica.

- Gina me dio un número de teléfono, me dijo que llamase y preguntase por una tal Alice, que ella me podría poner en contacto con Joey.

- ¡En serio! ¿y ya llamaste?

- Todavía no en cuanto termine unos asuntos llamaré.

Todos están muy preocupados por Joey, Chandler echa de menos a su mejor amigo, Mónica echa de menos cocinar para Joey, Phoebe echa de menos al que es como su hermano, Ross a su colega y Mike, bueno, Mike hace lo que Phoebe le diga.

Los chicos se dirigen a casa de Mónica y Chandler, pero antes de salir del Central Perk Rachel llama su atención:

- Chicos, si no os importa hay un sitio al que me gustaría ir antes de nada, luego me reúno con vosotros.

- Rachel, ¿Va todo bien? - pregunta Ross.

- Si, no te preocupes, luego nos vemos.

Los chicos se marchan y Rachel sale en dirección al antiguo apartamento donde vivía, llama al señor Treguer el portero y pide que le abra el apartamento donde vivió sus últimos años con Joey.

- Aquí lo tiene, está todo como lo dejo el señor Tribbiani antes de irse, no lo he podido alquilar todavía.

- ¿Podría dejarme unos minutos a solas?

- Claro, estaré en la portería.

El señor Treguer se va y Rachel se queda sola en el apartamento, no hay muebles, está vacío, de repente se fija en la puerta de su cuarto, sigue partida, es increíble, nunca se reparo. Rachel se dirige a la habitación de Joey, cuando entra se sienta en el suelo y comienza a llorar recordando todos lo momentos que ha vivido en ese apartamento con Joey, las comidas en compañía de Joey, la primera vez que soñó con Joey, el beso que se dieron cuando regresaron de las Barbados. Es curioso lo mucho que lamenta ahora el haber dejado escapar en ese momento a Joey, pero en aquel momento tenía miedo, acababa de tener una hija con Ross, y no estaba segura todavía de sus sentimientos. Es curioso como siempre te das cuenta de lo que has perdido demasiado tarde.

Después de un rato, y ya más calmada Rachel sale del apartamento en dirección a casa de Mónica, está vez decidida, ya ha perdido una vez a Joey, pero está dispuesta a recuperarlo como sea, ya no puede esconder lo que siente hacia el. Una vez ya en casa de Mónica y mientras todos están charlando Rachel se aleja, coge el teléfono y marca el número que Gina le dio:

- Despacho de Alice Constance, ¿En qué puedo ayudarle?

- Hola, me gustaría hablar con la señora Alice por favor.

- Soy yo.

- Vera señorita Alice, esto es un poco violento, yo me llamo Rachel Green y llamaba por que Gina Tribbiani me ha dado su número. Verá soy amiga de Joey el hermano de Gina, no sé si sabe de lo que estoy hablando.

- Si, conozco a Joey y a Gina, pero ¿no sé en qué puedo ayudarle?

- El caso es que hace unos meses que no sabemos nada de Joey desde que se fue, parece que se fue un poco enfadado, y estamos muy preocupados por el. Queremos hablar con él y Gina me dijo que le hizo prometer que no nos daría su nuevo número, lo único que me dio fue este número y que preguntase por ti que nos podrías poner en contacto con el. Quizás es una tontería, no sé.

- Bueno, es cierto que puedo poneros en contacto con Joey, pero no quiero que Joey se enfade conmigo por dar su número.

- ¡Por favor! - Súplica Rachel. - necesitamos saber de él, le echamos de menos.

- No puedo daros su número, pero si podemos hacer una cosa, puedo hacer que lo volváis a ver, ¿Que te parece?

- ¿En serio? ¡Eso sería genial! Pero ¿como vamos a hacerlo?

Al cabo de un rato Rachel vuelve a la sala donde todos están, con una enorme sonrisa en su cara:

- ¡Chicos, escuchadme, tengo muy buenas noticias. ¿Os acordáis del número que me había dado Gina? Acabo de llamar y ¡me ha dado la dirección de Joey en los Ángeles!

- ¿Enserio? Eso es estupendo, - Exclama Chandler.

- Cariño, no podemos ir todos, alguien se tiene que quedar con los mellizos, y con Emma, todos no podemos ir. - Responde Mónica.

- Es cierto yo tengo trabajo en el club, y a Phoebe no le dan más días en el centro de masajes.

- Bueno y que os parece si tú Rachel y Chandler viajáis a los Ángeles y convenceis a Joey de que se venga aunque sea unos días, y Mónica se queda cuidando de los mellizos, yo me encargaré de Emma. - Dice Ross.

- Suena bien, si todos estáis de acuerdo... - Dice Rachel.

Después de decidir quién viajaría a los Ángeles Chandler y Rachel preparan una pequeña bolsa de viaje y se van a la agencia para comprar los billetes con destino a los Ángeles. Cada uno con objetivos distintos, Chandler deseando encontrarse con su amigo, más que amigo su hermano, y Rachel con la intención de recuperar al hombre al que ama, si, esta vez no duda de lo que siente.