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La Familia Colón, era una Familia adinerada. Y digo era porque la empresa del Señor Colón quedó en quiebra.

Así que con lo último que les quedaba de dinero, decidieron comprar un departamento-casa en un pequeño barrio.

En ese barrio vivían familias muy adineradas y otras no tanto, pero de igual forma convivían.

La mudanza dejó las cosas de su antigua casa, adentro del Departamento y se retiraron.

La Familia tenía a un Pequeño llamado Erick que casi siempre vestía con Vestidos de tonos pasteles o algún short o falda que le gustara.

Acomodaron todo lo que la mudanza había dejado y cuando terminaron el sonido del timbre resonó por todo el apartamento.

La Señora Daysi volteo a ver a su hijo y este rodando los ojos se paro y camino en dirección a la puerta.

Cuando la abrió se encontró con una Señora un Señor y un chico como de su edad.

- Ven Papás, les dije que habia llegado una nueva familia.
Dijo aquel chico con una sonrisa en su rostro.

- Si ya veo, hijo.
Habló el Padre de aquel chico.

Erick forzó una sonrisa que salió más como una mueca.
Llamó a sus padres y estos dejaron pasar a la Familia Vélez Muñoz.

- Hola... Le llamó Christopher, pero me puedes decir Chris.
Dijo el castaño.

- Soy Erick y me puedes decir Erick.

Es oji-marron se río y el oji-verde quedó más que confundido.

- Ahí Erick eres tan gracioso.
Dijo tratando de parar su escandalosa risa.

Sonrio.
El chico le caía bien.

Cuando la risa paro el chico jalo a Erick y salieron corriendo hacia el patio de aquel barrio.

Los Padres no temían a que les pasará algo pues estaban en maxima seguridad.

- Ven Erick, vamos a jugar y te presentaré a algunos amigos.
Corriero y llegaron con unos chicos de su edad.
- Mira el es Zabdiel, pero le puedes decir Zab o Zabdi.
- Y el es Richard pero le puedes decir Rich.

El oji-verde saludo a todos.

- ¡Hola Niños! ¿¡Quien quiere Dulces y Chocolates!?
Grito un Señor llamando la atención de todos los niños que se encontraban ahí.

- ¡Señor Pimentel!
Gritaron los niños al unísono.

Todos salieron corriendo en dirección al Señor con una bandeja de Dulces y Chocolates en mano.

Erick solo se quedó en su lugar viendo como todos los niños regresaban con sus golosinas en manos.

- ¿Que Pasa? ¿Porque no fuiste por Dulces y Chocolates? ¿No te gustan?
Pregunto Chris sorprendido.

- No, si me gustan y mucho. Pero mis Papás me han dicho que no debo de aceptarle Dulces a desconocidos.

- Pero el Señor Joel no es ningún desconocido el es Nuestro Amigo.
Chris le dio una sonrisa de sinceridad a Erick y le invitó un poco de sus Dulces.













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DULCES Y CHOCOLATES • JOERICK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora