No era el culpable.

•07•

05:05 AM.
HABITACIÓN DE ADAM.

El mayor se despertó en punto apagando la alarma (la cual había dejado en vibrador para no despertar al menor) tomo su ropa y entró en el baño del pasillo para tomar una ducha caliente, luego en la habitación tomo su mochila y abrigo para ir a la cocina, dejo las cosas en una silla y empezó a preparar el desayuno, tal vez era muy temprano pero tenía que despertar a Catriel para llevarlo a la casa de Dean.

—Hey, cariño, despierta bebé, es hora de levantarse—.

Hablaba con cariño apartando el cabello del rostro del pequeño, este gruño un poquito hasta abrir sus ojitos lentamente.

—Eso es, vamos, arriba—.

Tomo al menor, cargándolo en la cintura haciendo que este enrolle sus piernas en el mayor dejándose llevar.

—Se que tienes sueño pero tienes que desayunar ¿Esta bien?—.

El menor emitió un pequeño 'mmj' y fue sentado en una silla para recibir su desayuno. Adam tomó el móvil para escribirle a Dean que se apresure cuando el menor le hablo.

—Angelique dice que...— Bostezo —... Qué no se debe hablar por teléfono cuando— Bostezo —Cuando estamos en la mesa—.

Adam sonrió y dejo el móvil aún lado.

—Tienes razón, lo siento, ahora desayunemos ¿Bien?—.

Él asintió y empezaron a comer.
Al terminar abrigo a Catriel apropiadamente con algunos abrigos que le pertenecían puesto que no quería que el menor se resfriara y por la mañana solía llover o hacer mucho frío.

—Toma tu mochila en lo que...—.

Y el timbre sonó y dejó a Catriel para acercarse a la puerta, girar la perilla y abrir la puerta para atender a quien llamaba a la puerta.

—Hola Adam—.

Abrió los ojos con molestia observando a Dean frente a si, estuvo a punto de insultarlo cuando su perro se interpuso en posición de ataque gruñiendo, Dean no dudó en gruñir de vuelta, ambos mirándose con odio, ambos en posición de ataque.

—¡Dean basta!— Miro a su perro —¡Draco adentro!—.

Ninguno de los dos cedía al otro, tomo del collar de su amigo Draco y lo alejó de la puerta.

—Como sea— Gruñó —Solo vengo por él— Apuntó al menor y se acercó a él —Vamos mocoso—.

Se acercó al nombrado para tomarlo del brazo cuando Draco no dudó en arrojarse sobre Dean tratando de morderlo con la intención de defender al menor, éste se transformó a su forma de lobo para defenderse y atacar al animal, Adam rápidamente se acercó para cargar a Catriel del estómago alejándolo de la situación para que no fuera herido por accidente, les pidió (a gritos) que parasen pero ninguno escuchaba a sus peticiones, entonces decidió salir al patio trasero.

—E-Ellos...—.

—Shh... Lo sé, lo sé, todo estará bien, lo prometo—.

Acomodó al menor dejando el rostro de éste en su cuello, sobaba su espalda tratando de que se calmará puesto que por el susto el pequeño lloraba.

—Todo estará bien— Se mecía caminando por el patio —Todo estará bien—.

Cerró los ojos, decir que no le preocupaba el estado de su amigo y el estúpido de Dean era mentir, ni siquiera le importaba el hecho de poder llegar tarde a su universidad.

Algunos minutos después de estar meciendo al menor logrando que éste se durmiera, Dean salió de la casa.

—¿Cómo está mi perro?—.

Preguntó rápidamente acercándose a él con el menor en brazos, aún sin importarle que Dean estuviera sangrando.

—Tu maldito perro esta bien— Suspiró molesto observándolo —¿Ni siquiera te importó el hecho de qué este así por tu culpa?—.

—¿¡Mi culpa!?— Acarició el cabello del menor tratando de calmarse. En susurros grito —¡Tú fuiste quién atacó a mi perro! ¡Tú fuiste el irresponsable que dejó aquí su medio hermano cuando el acuerdo era llevárselo! ¡Así que no es mi culpa! ¡Es la tuya!—.

Entró a la casa con molestia y busco con la mirada a su perro... Se acercó... El estaba bien, respiraba.

—¿Qué le hiciste?— Preguntó con rapidez.

—Nada, solo lo dormí—.

Suspiró y le entrego al menor con la mochila de éste.

—Lárgate, no te quiero volver a ver en casa, la única razón por la que te veré es para que me entregues a Catriel ¡Porque tú eres un irresponsable! ¡Lárgate Dean!—.

Abrazo a su perro el cual estaba un poco lastimado, nada grave realmente... Dean salió con irá, tristeza... Algo dentro de él se rompió... Adam no lo quería cerca.

Cuando el móvil sonó.

—¿S-Si?—.

—Adam ¿Dónde estás? Teníamos que vernos ahora, ¿Necesitas que te pase a buscar?—.

Adam se recompuso un poco tragando duro, sintió un poco aquel nudo en su garganta pasar.

—Yamato, lo siento, me atrase un poco, iré, tarde pero llegaré, adelantaté ¿Si?—.

Habló un poco más convenciendo a su compañero, en la universidad a la que asistía se encontraban muchos estudiantes de intercambio, entre ellos Yamato el cual venía desde Japón, era alguien amable e inteligente, un muy buen amigo, aunque a Dean no le cayera muy bien... Aunque a Dean... Nadie le caía bien.

06:56 AM.
CASA DE DEAN.

Frustrado dejó a Catriel en la cama para dejar la mochila de éste en el suelo y caminar a su habitación donde tomo una ducha y curo sus heridas.

—Maldito Adam, maldito perro, maldito niño, malditos todos—.

Camino hasta la cama para arrojarse sobre ésta.

—Jodido día en el que me ha tocado despertar—.

—J-Jodido es una mala palabra—.

Volteo su rostro para ver al menor.

—¿Qué haces aquí? Lárgate—.

El menor se debatió mucho.

—¿Dónde está?—.

—¿Dónde está quién?—.

—Adam... Y Draco—.

—En su casa—.

—Q-Quiero ir con ellos—.

—¿Y? No puedes, tú no vives con ellos, vives aquí, conmigo—.

—Y-Yo no quiero vivir con usted— Las lágrimas amenazaban con salir —¡Yo quiero vivir con Adam y Draco!—.

Dean iba a responder cuando el menor salió corriendo a su habitación, frustrado tomo una almohada para gritar en ella... Odiaba su vida...