ESPEREN, no se sientan tristes, aún queda el epílogo y las explicaciones de la historia.
Dos capítulos más de la historia.
Ahora sí, lean.
22:22 PM.
CASA ALEJADA DE LA CIVILIZACIÓN.—Encontré a la familia de mi padre. Estamos en su manada—.
Adam palideció, tembló, y un nudo en su garganta se formo.
—¿A-A qué te refieres?—.
—Ellos están reclamando—.
—Dean, explícame, todo, necesito una explicación, necesitamos volver a casa…—.
—Esta es mi casa—.
—No, Dean, no…—.
—No me iré de aquí—.
—¡No, Dean, no!— Tomó el rostro del lobo entre sus manos para obligarlo a que lo mirase —Dean no te quedarás, no sabes quienes son están personas, ni que quieren de ti, no sabes nada de ellos, absolutamente nada—.
—Adam, ellos son como yo, debo quedarme con ellos, son mi familia y me quedaré con ello—.
—¿Y qué sucede conmigo, con Catriel, con nosotros?—.
—Nunca hubo un nosotros—.
Dean retiró las manos de Adam de su rostro con delicadeza, su corazón se destruyo al decir aquellas palabras, aún más al ver aquel dolor en el rostro de Adam.
Quien apretó su mano en un puño, dejando sus nudillos blancos, sintiendo rabia y dolor.
—¿Interrumpimos?—.
Volteo asustado, aquellos altos hombres se acercaban con algunas bolsas, entre ellos dos mujeres que eran bastante bellas a la vista.
—No—.
Pronunció frió Dean, Adam apretó sus dientes, decidido, se acerco a aquellos hombres, sin miedo, sin dejarse intimidar.
—No sé quienes sean, ni que demonios quieran, no me interesa. Pero nos iremos de aquí, llamaré a la policía e irán presos por secuestro—.
—Hey, cachorro relajate, aquí nadie los obliga a quedarse—.
—Pero sería bueno que lo hicieran—.
—¿M-Me haz dicho… Cachorro?—.
Dean rápidamente actuó, no estaba para problemas, tomo a Adam en brazos apartandolo de aquellos y tirando de él hacia el otro extremo, trataba de mantener el control. Pero Adam era escurridizo y mantenerlo quieto era difícil.
—¡Suéltame cabeza hueca, traicionero, te lavaron el maldito cerebro porque es TAN DIMINUTO!—.
—¡Adam, cállate, te llevaré a tu casa si eso quieres pero cállate!—.
—¿¡Así es como me pagas después de tanto tiempo!?—.
La irá contenida tenía que salir en algún momento, y su pie pateo fuertemente la entrepierna de Dean para dejarlo arrodillarse en el suelo mientras llevaba sus manos a la zona afectada, sin embargo Adam no cesó, golpeo fuertemente el rostro de Dean dejando su mejilla roja.
Las mujeres rápidamente lo alejaron y los hombres corrieron a examinar que Dean se encontrara bien.
—Vaya que tienes carácter cachorro—.
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No era el culpable.
WerewolfDean no siente absolutamente nada por su pasado ni por aquellas personas que lo conformaron, su presente es todo para él, lo que logró en todo ese tiempo no lo cambiaría por nada, todo en su vida estaba bien, desde sus amistades hasta sus paseos por...